Día #5.- Promesas.

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"Conforme la vida avanza, el camino se vuelve extraño con caras nuevas y cerca del fin, los logros se vuelven lápidas y ahí abajo, todos necesitan amigos..."

-James Russell Lowell.

Se podía respirar el agradable olor de la primavera en el aire, pues ya era Marzo

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Se podía respirar el agradable olor de la primavera en el aire, pues ya era Marzo.

Los cerezos ya habían florecido y sus flores caían de manera constante.

Se encontraban en un campo santo. Todoroki y Midoriya. Ninguno hablaba pero la cara de ambos lo decía todo.

-Cuando una persona buena muere, el mundo debería sentirlo. No debería ser indiferente para nadie.-Aquella mujer de la que Midoriya se había hecho amigo había partido. Era inevitable después de todo.

Todoroki no dijo nada. Eran los únicos que habían asistido a darle el último adiós a esa mujer.

Estaba tan silencioso.

-¿Estás bien...?

-Todoroki...-ignoró la pregunta.- ¿Qué crees que hay después? ya sabes, del otro lado.

--No importa lo que haya, sólo me importa el ahora.

-¿No te preocupa que al morir, estemos solos? Todoroki, prométeme que si muero antes que tú seguirás adelante...

-Por favor, para...-Suplicó.- detesto que pienses así...-Sintieron un poco de nostalgia. El ambiente se tornó melancólico en cuestión de segundos. Se podía palpar el miedo a lo desconocido.- Te prometo, que si me llegas a faltar, te buscaré en mis recuerdos. Siempre estarás conmigo de una u otra forma.

Midoriya soltó un pequeño sonido agradable, parecido a una risa.

-¿Te arrepientes de algo, Todoroki?

La respuesta era obvia. Se arrepentía de no poder decirle abiertamente todo lo que sentía. Él sólo era capaz de expresarlo por medio de acciones pero no le decía nada excepto algunos cuantos "te quiero" después de una noche de intimidad. Deseaba expresarle su amor con palabras cursis, traducir los besos y las caricias lujuriosas con alguna clase de oración. 

Sólo podía hablar con él de forma sincera cuando Izuku dormía.

-Sí, y me arrepiento todos los días, a toda hora de no ser más valiente.-Dijo.

-¿No me dirás eso de lo que te arrepientes?

-No. Aún no...-

A pesar de que el pecoso conocía el secreto de Todoroki, guardó silencio. Esperaría hasta que Todoroki estuviera listo para decirle eso que siempre le contaba cuando fingía estar dormido.

-No te preocupes. Ya me lo dirás cuando estés listo.- Se agachó y dejó un ramo de flores blancas en la lápida de aquella mujer. Estaba dolido, pero no sufría en soledad, ya que tenía a su amado Shoto a su lado.

Sobra decir que repetía su disfraz en esta ocasión.

Había repetido más de una vez su vestimenta para poder salir con mayor frecuencia con Midoriya.

Terminaron por marchándose del cementerio. 

Había un baño en la habitación de Todoroki

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Había un baño en la habitación de Todoroki.

La puerta de ese baño estaba abierta y se apreciaba que salía una buena cantidad de vapor.

Se debía a que el chico del pelo bicolor estaba tomando un baño; un largo y muy caliente baño tal y como a él le gustaba.

Por otro lado, el pecoso escribía en su celular una nota en la aplicación del "Blog de notas" su día. Era un pequeño diario que comenzó a escribir desde que salió de la preparatoria.

Al final de cada día, escribía lo que Todoroki le decía al despertar.

Sentía sincero interés por saber qué era lo que le diría el día de mañana. Apagó su teléfono y se decidió a dormir.

Pocos minutos después, salió Todoroki del baño vistiendo su pantalón negro de pijama que usaba para dormir.

-Izuku, ¿Cuándo dijiste que iríamos a comer con tu madre...?-No recibió respuesta. Aquel con quien quería hablar ya estaba dormido, y aunque él no podía saber que en todas las demás ocasiones Midoriya fingía, repitió su rutina:

Se acercó a él y le besó con ternura fehaciente.  Y una vez más, le habló con la seguridad que jamás ha tenido para decírselo de viva voz.

-El lugar donde he sido feliz, es el lugar que está a tú lado. Te prometo, con cada fuerza que tengo en mi cuerpo, que no he de volver jamás a ningún otro sitio. Me sentiré fracasado de haberte perdido. Me quiero morir primero que tú, no porque no te ame lo suficiente, sino porque soy cobarde para afrontar una vida sin ti pero a veces temo de hacerte llorar, por lo que te prometo ser más valiente y más fuerte para no hacerte sufrir. Prometo estar ahí, cuando mueras y prometo llorar con toda la fuerza que tenga... porque eres lo mejor que me ha pasado y no habrá más mundo después de ti. Te prometo que te amaré, incluso si no hay nada del otro lado.
Por que hasta la muerte me parece cálida sabiendo que te tuve en vida.-

Lo abrazó. Y recargó su cabeza a un lado de la de Izuku. Su cabeza olía a primavera.

 Su cabeza olía a primavera

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-[Final del capítulo.]-

(Actualización del Viernes 13 de Julio, 2018. Un día tarde pero estaba enfermo.)

Lo que te conté cuando te hacías el dormido. •[TodoDekuWeek]•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora