☀ 6 (2/2) ☀

320 34 2
                                    

Kurosaki Ichigo

Juro que en toda mi vida no pensé que me encontraría con este rostro tan conocido y aquí en el palacio.

- Hehe, maldito kurosaki...- decía aquella voz con todo el sarcasmo posible- ¿que rayos andas haciendo en el marco de la ventana?¿te escondias?- pregunto con esa sonrisa burlesca que tanto odiaba.

Baje del marco de la ventana y acomode mi ropa, con todas las personas conocidas debía toparme con el menos deseable en mi cruel existencia.

- ¿No vas a responder?- insistio una vez más.

- ¿Por que debería darte explicaciones?¿Acaso debo suponer que viniste a verme como buen familiar que eres?- dije con desagrado.

Despues de todos estos años sin verle se presenta como si nada delante de mi ¡que descaro!

- Sabes que no es mi culpa...- se detuvo y se cruzo de brazos, mirandome fijamente - ahora si me diras, ¿que hacias ahí arriba?

- ¡Que no!¡Vete a fastidiar a otro!- le grite.

- No hay nadie más...- y nuevamente esa sonrisa volvio a aparecer.- ¿desde cuando andas robando en el palacio?

Suspire pesadamente ante su mal chiste, no escaparía tan facil ante el sin antes darle unas buenas explicaciones...

- Vale, te contare; en el dia del homenaje al rey hubo un accidente en el cual quede involucrado accidentalmente y estoy cumpliendo un pequeño castigo por ello, a pesar de ser inocente, solo para complacer al general.

El parecio escuchar claramente todo lo que le relate, por lo que asintio al final.

- ¿Para complacer al general? Si eso es así, debiste haber lastimado su estupido ego, insultado su ridiculo peinado o...- se quedo en silencio por largos segundo hasta que comenzó a reir como un loco.- pervertido, ¿que le hiciste a la princesa?...

Mis mejillas se encendieron rapidamente, no crei que lo atinaria tan facil, además, me hizo recordar cosas que quería olvidar.

- Yo...yo no..no- rayos, las palabras no salian de mi.

Y otra vez tenía a Grimmjow echo un mar de risas.

- Ya para, no es gracioso..- dije en un susurro.

- Ay...mi..mi estomago..jajaja.. lo siento...lo siento..- se seco las lagrimas que habian salido y me miro directamente a los ojos.- ¿ya ocurrio algo entre ustedes dos?- pregunto.



De verdad siento mucho la tardanza, me había quedado en blanco al inicio de este capitulo... jeje



El prisionero y la coronaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora