Uncommon [03]

14

—Hola – dije cuando lo vi parado en la puerta de las tres escobas

—Te demoraste – se quejó él

—¿Querías que viniera con los demás? – pregunte fastidiada

Los demás habían querido acompañarme cuando les dije que iría a Hogsmeade, así que tuve que esperar a que estuvieran distraídos y escapar.

—Bien – dijo molesto – entremos

Ocupamos una de las mesas que estaba al fondo, era bueno ser precavidos, no quería que nadie nos viera, ya que los rumores empezarían, y eso era algo que quería evitar a toda costa; mientras que yo me acomodaba en la silla Malfoy fue por nuestras bebidas.

—Deja de ser tan paranoica – dijo Draco mientras daba un pequeño sorbo a su cerveza de mantequilla

—No puedo – me queje

Ninguno de los demás estudiantes había notado nuestra presencia ya que estaban absortos es sus conversaciones, pero Madame Rosmerta, nos miraba de vez en cuando con mucha curiosidad.

—Ella no le va decir a nadie – dijo Draco mientras veía en la dirección que miraba – ella sabe quién es mi padre

—Si – dije ciertamente – también sabe quién es mi padre

—Ya déjalo – dijo Draco mirándome

—Como quieres que lo deje – me queje – somos una novedad, Malfoy y Weasley.

Hubo un largo silencio, Draco se me quedo viendo, hasta que volvió a hablar, no sé en qué momento, pero la conversación había dado un giro repentino, ahora solo nos reíamos, ya no estaba al tanto de lo que sucedía a mi alrededor.

Al llegar al castillo cada uno tomo una dirección opuesta, había sido una agradable tarde, nunca creí que me divertiría tanto con Draco.

Nos encontramos por dos ocasiones cerca al lago, o mejor dicho nos citamos o él me cito, y al parecer aquella vez que mande a Tadd, Draco le había alimentado y dejado ir.

—Que puedo decir, tengo un encanto natural – dijo Draco sonriendo

—Estas siendo presumido – dije sonriendo también

—¿San Potter te invito al baile? – pregunto Draco con incomodidad

—¿Sigues con eso? no sé de dónde sacaste eso – me queje – no, no me invito al baile.

Solo un día anterior mamá envió a Ron un traje de gala, era horrible, con Hermione nos reímos todo lo que duro el desayuno mientras que Ron se quejaba y ese mismo día la profesora McGonagall, nos dio clases de baile.

—Entonces uno de tus tantos hermanos lo hizo – dijo serio

—Nadie me invito – dije sonriendo

—Entonces...

—Entonces ¿Qué? – pregunte mirándolo

—Iras conmigo – sentencio firmemente

—No – respondí rápidamente

—Lastima – dijo él sonriendo maliciosamente – no fue una pregunta

—Draco – llame cuando este empezó a caminar – Draco

Nunca dio la vuelta, solo volvió al castillo.

Las últimas semanas de diciembre fueron bulliciosos en todos lados solo hablaban del baile y eso me ponía más nerviosa y aún no tenia muy en claro si Draco realmente me había invitado o solo estaba jugando.

—Ustedes son chicas – susurro Ron durante la clase de Pociones

Yo estaba sentada delante de ellos, estábamos realizando un ensayo sobre antídotos.

—No me había dado cuenta – susurre sarcásticamente

—Que observador – susurro Hermione para que segundos después Snape golpeara sus cabezas con un cuaderno

Ron trato de la "mejor" forma hacer que fuéramos sus parejas, pero no funciono Hermione se paró furiosa y entrego su cuaderno luego se retiró.

—No creo que alguien la haya invitado – susurro Ron mientras Hermione se alejaba

—Pues créelo – susurre mirándolo

—Tu si puedes venir con uno de nosotros, y lo mejor sería, ya que somos hermanos, que fueras conmigo

—Ya me invitaron – susurre de mala gana mientras alistaba mis cosas

Cuando entregue mi cuaderno el profesor Snape me miro irritado, supongo que era porque estábamos hablando.

Ese fin de semana fui a Hogsmeade, solo para distraerme ya que Ron seguía preguntando quien me había invitado al baile, cuando pase cerca de Moda Tiros Largos, la tienda de ropa vi unos guantes de quidditch, no había comprado nada para Draco por navidad así que me pareció un buen gesto ya que somos amigos, después pase por Honeydukes y compre plumas de azúcar, me pareció irónico ya que Draco me había enviado cartas así que bueno, creo que él lo entenderá.

Antes de dormirme, prepare el regalo de Draco y trate de que nadie me viera y lo deje junto a los demás, supongo que mientras dormimos los elfos son los que se encargan de repartirlos.

A la mañana siguiente cuando desperté; junto a Hermione abrimos nuestros regalos, había una pequeña caja, con un listo verde y una nota sobre ella, la cinta ya lo decía todo, sabía de quien era, primero leí la nota.

Por algún motivo mi corazón latió rápidamente cuando leí aquella nota, eso me emocionaba, creo que me hacía sonreír como estúpida, y al parecer esta era mi confirmación de que si me había invitado al baile; al abrir la pequeña caja me encontré con un collar, era un guardapelo, tenía una "E" grande grabada y piedras verdes la decoraban.

Me tomé mi tiempo para observarlo, cuando lo abrí me encontré con otro grabado.

"Intret amicitiae nomine tectus."

D.M.

—Estás siendo presumido – susurre viendo aquella frase y las iniciales de su nombre.

No tenia ni idea de lo que decía, pero ese mismo instante me lo puse; traté de ocultarlo de los demás, lo cual no fue muy difícil ya que con Hermione nos fuimos a alistarnos temprano.