Mi lindo acosador

Extra 2: Abuelo.

4 años de vida y el pequeño niño lo perdió todo.

Ya era de noche, sus padres pronto debían llegar de trabajar, estaba en su habitación ordenando porque su abuelo le pidió que ordenara mientras él hacía la cena.

-Lito, lito- Corrió el pequeño niño a la cocina al sentir el olor del Pirozkhi recién hecho

-Yuratchka mi pequeño, ¿Te llegó el olor?- Dijo tomando la bandeja de Pirozkhis recién preparados

-¡Piloshkli, piloshkli!- Repitió una y otra vez hasta que estuvieron suficientemente fríos para que pudiera comerlos

-Mi pequeño niño- Sonrió el hombre mayor mientras acariciaba el pelo de su nieto

Y entonces pasó...

Esa sonrisa se fue desvaneciendo mientras se volvía una mueca de dolor y el señor apretaba su pecho intentando llegar al teléfono

-¿Lito?- Preguntó el pequeño sin recibir respuesta, dejo todo rápidamente y corrió a buscar ayuda -¡Mami, papi, yei yei, lapido, lapido, lito, lito- Gritó corriendo rápido por toda la casa en busca de alguien y entonces JJ llegó en su ronda de vigilar el lugar, al ver al pelinegro el pequeño niño corrió rápidamente a su abuelo y lo movió -Lito, lito, yei yei eta aquí, lito lito- Comenzó a llorar el pequeño muy asustado

¿Qué mas podía hacer un niño? Solo tenía cuatro años, no podía alcanzar el teléfono de la pared y llamar a alguien, se desesperaba, se sentía inútil, su abuelo necesitaba ayuda y él no podía hacer nada más que gritar por ayuda y suplicar que por obra divina lo ayudaran.

JJ llamo a dos sirvientes para que lo ayudaran a subirlo al carro y así poder ir a un hospital, luego intento alejar a Yuri para revisar su respiración y presión

-No, no, lito, lito- Grito llorando el niño

El pequeño se rehusaba a despegarse de su amado abuelo así que no tuvieron opción y tras revisar al abuelo llevaron al niño al hospital tomado de la mano de este.

Yuri se quedo dormido de tanto llorar antes de que llegarán al hospital, el canadiense aprovechó y se lo llevó.
Pero en la mente del pequeño siempre estaría el recuerdo de como poco a poco el calor de su dulce abuelo se desvanecía.

Cuando Yuri despertó estaba en brazos de su madre quien estaba de pie y sollozaba

-Lito, mami quielo a lito- Dijo el pequeño niño rápidamente -¿Dode eta lito?- Preguntó inocente colocando su manita en la mejilla de su madre, al sentir la pequeña mano de su hijo callo de rodillas al suelo

-Mi amor, tu abuelito esta durmiendo y ya no volverá, fue a un lugar mejor- Soltó la madre entre lágrimas

-¿Lito e fue?- Las lágrimas comenzaron a deslizarse por sus pequeñas y blancas mejillas que poco a poco fueron tornándose rojas al igual que el resto de su carita -¿Lito no quiele a Yuwi?, e se fue pala no eta con Yuwi- Dijo en un llanto lleno de sentimiento

-No mi amor, abuelito te ama mucho, mucho pero él fue a reunirse con la abuela en el cielo- Abrazo a su pequeño quien estaba por perderlo todo