Mi lindo acosador

Despertar.

Habían pasado unos días desde el incidente cuando JJ despertó, Bella que no se apartaba de él rápidamente buscó un doctor pero cuando llegaron a la habitación estaba vacía.

-Se dónde esta- Dijo Isabella aliviada de ver que el canadiense tenía suficiente fuerza para moverse

-Yuri esto es culpa mi- Pego la frente al cristal

-No lo es, la culpa es mia- Dijo Viktor acercándose con un doctor y la pelinegra detrás de él -Fui descuidado, él estará bien. Por ahora esta estable y mejorando- Añadió

-¿Ha abierto los ojos?- Preguntó nervioso

-No, pero esperamos lo haga pronto. Por ahora debería descansar- Añadió el doctor

-Lo único que podemos hacer es esperar- Dijo Isabella, al canadiense no le quedo de otra que regresar a su habitación

Todos iban a visitar a Yuri con la esperanza de que este despertara, incluso sus padres iban todo el tiempo y entonces paso.

Yuri abrió los ojos y comenzó a llorar, sus padres estaban dormidos pero tan pronto como sintieron a Yuri moverse en su cama despertaron.

-¡Yuri!- Dijo su mamá entre lágrimas -Mi pequeño-

Dos semanas, dos semanas había estado inconsciente, dos semanas sus padres habían tenido miedo de que su corazón dejará de latir

-¡Mamá, papá!- Dijo llorando como si fuera un niño pequeño

-No llores, aquí estamos- Intentó calmarlo su padre

Para Yuri era como estar en un sueño el despertar y ver a sus padres.
La noticia de su despertar se difundió rápidamente, todos fueron a verlo menos cierto kazajo que no sabía como darle la cara.

Por la tarde Yuri le pidió a sus papás que fueran a bañarse y a comer sin preocuparse que él estaría bien y que seguro los chicos no tardaban en llegar.

-¡Yuri!- Dijo JJ corriendo a él -Lo siento gatito, es mi culpa-

-Estoy bien, ¿Deacuerdo?- Refunfuño el menor

-Si, si, lo que digas- Dijo divertido el canadiense y luego lo miro a la cara, su sonrisa estaba devuelta, esa cálida sonrisa de inocencia

-Es bueno volverte a ver sonreír así Koneko-chan- Viktor entró a la habitación con una sonrisa y el nipón detrás de él

-¿De que hablas?, antes también sonreía- Infló los cachetes

-Si pero de esta forma, sonreias forzadamente o falsamente- Le explicó el canadiense

-Eso es porque cuando desperté mis padres estaban aquí, además de qué ya no debo tener miedo de que se hombre vuelva hacerme algo-

-Gatito no es echar sal en la herida pero ¿Cómo se llamaba?- Dijo Viktor poco informado del mundo, Yuuri lo codeo

-No importa, se llamaba Segei Ivanov, el muy maldito creía que le pertenecía- Dijo Yuri sin temor alguno

-Tal parece que el gatito se volvió un tigre- Bromeó Jean

-Ya chicos, dejen de molestar a mi bebé- Los interrumpió su madre con una bolsa en las manos

-¿Y papá?- Preguntó algo triste el menor

-Faltamos bastante al trabajo así que hoy nos dividimos, tú papá avanzara con el trabajo atrasado mientras yo te cuido y luego el vendrá para que yo vaya a trabajar- La madre sonrió y entonces el papá entro con un portafolios en la mano

-Si, hubo un cambio de planes, trabajaré desde acá- Aclaró el padre tomando asiento -Ya hemos descuidado mucho a nuestro a hijo por el trabajo, es hora de darle más tiempo a lo más preciado que tenemos- Añadió