Prologo

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El Dios Bíblico estaba sentado en su trono descansando pues estaba muy cansado después de encerrar al dragón trihexa, además de que ya dentro de tres días será la batalla final entre los cuatro satanes, los ángeles y los caídos, el mismo sabía que no podrá usar todo su poder pasando esos días y no sobreviviría pero antes de seguir con sus pensamientos y su descanso, el Dios Bíblico tuvo una visión del futuro, un futuro que él no lo esperaría.

Un futuro lleno de caos y destrucción hecho por máquinas, que querían el mundo arder además de unas figuras misteriosas que para el dios les son desconocidos y no podía identificar sus siluetas a excepción de una, una que pudo identificar y el mismo Dios no podía dejar de reír de la ironía de esto al ver quien estaba involucrado en su visión.

-Lucifer incluso estando muerto, tu descendiente no podría darme más problemas en el futuro-dijo el Dios Bíblico.

Pero de repente apareció una silueta que el Dios Bíblico se dio cuenta que está al lado opuesto enfrentando a esas siluetas misteriosas el tenia forma humana, tenía puesto alguna clase de armadura color rojo con un casco con un cristal con cabello rubio largo que le llegaba hasta las piernas y en ambos brazos llevaba armas el derecho llevaba una especie de sable de luz de color verde neón y el otro brazo llevaba una especie de pistola (buster en realidad, pero él no lo sabe), pero lo que le sorprendió de verdad al Dios Bíblico fue en lo que reflejaba en los ojos de este personaje.

Ojos de color azul zafiro, tan azul como el cielo en ellos se reflejaban tanto luz y oscuridad, pero más luz que oscuridad debido a un pasado doloroso pero también refleja pureza que hasta el dios bíblico se sorprendió de alguna manera el chico logro conservar su pureza y además de que sus ojos se reflejan algo mas y eso es valor, determinación y esperanza para un mañana mejor, tales cualidades no se ven en cualquier humano.

El Dios se dio cuenta de que este chico era el único con el poder suficiente para detener esas siluetas que no se veían a excepción del descendiente de Lucifer.

Pero también vio que detrás del chico estaban muchas siluetas que parecían estar de su lado dándole su apoyo y su respaldo pero lo que más le sorprendió fue ver a tres siluetas familiares para él.

Los dos eran sus hijos el primero estaba vestido de negro y tenía su pelo negro con una parte rubio con una sonrisa despreocupada pero que parecía que confiaba en el chico se trataba de Azazel el líder de los ángeles caídos, el otro era alguien de pelo rubio claro con un halo en su cabeza y con una sonrisa sincera y angelical se trataba de Michael el futuro líder de los ángeles.

Y por último alguien que no esperaba ver y era un diablo pero no un diablo cualquiera, no era un diablo de raza pura, un súper diablo para ser precisos con una especie de armadura que parecía a la de un maou (n/a: ojo Dios todavía no sabe que sirzench será el nuevo lucifer) ojos verdes azulados con una sonrisa normal casi angelical pero lo que lo destaca era su cabello rojo carmesí, se dio cuenta de que era un Gremory y estaba al lado de este chico.

Al dios bíblico le salió una lagrima al ver esto, en que tal vez no ahora pero en el futuro las tres facciones estarían de la mano peleando juntos pero también dejarían de lado las peleas que lo han separado por tanto tiempo, eso era lo que el dios bíblico deseaba que las tres facciones ángeles, ángeles caídos y demonios puedan trabajar mano a mano a pesar de las diferencias y vivir en paz y al parecer ese deseo se hizo realidad gracias a ese chico humano.

El dios despertó de esa visión además de que se tomó tiempo para asimilar lo que acaba de ver, se dio cuenta de que esa armadura no era de este mundo ni de sus sacred gear, sino de una dimensión alterna diferente él sabía que no tenía mucho tiempo tenía que encontrar ese poder, así que con su propio poder abrió un portal a otra dimensión solo esperaba encontrarlo pronto.

Megaman ZX: la leyenda renaceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora