Agents G.O.T.7 - MarkBeom/Bmark

21. Ahora todo tiene sentido.

— Por favor, no escuches nada de lo que te puedan decir, solo...

— Solo entrego y me regreso ya lo sé, ya te puedes ir — Mark sujetó la maleta de color negro.

— Regresa con bien ¿Quieres? — acarició el rostro de Mark.

— Solo voy a entregar un puto maletín no voy a la tercera guerra mundial — rodeó los ojos. — Te veo en casa — besó sus labios.

Mark salió del coche y JB se marchó a hacer otras cosas, el americano arregló un poco su ropa antes de entrar a aquel edificio que a simple vista parecía vacío.

— ¿Quién eres? — preguntó un guardia que estaba en la entrada, era tres veces más grande que el americano hasta una cuarta si es posible.

— Soy... Tuan, vengo por parte de Shin, tengo que entrar un par de cosas a un tal Frank.

— Pasa, le diré que estás aquí — abrió la puerta.

— Claro, no tengo problema.

El americano se adentró al edificio, la música malísima resonaba por todo el edificio, botellas de alcohol rotas y vacías estaban tiradas, gente con grandes armas cuidando por todos lados y otras jugando o drogándose.

— Frank está en el piso de arriba. — dijo antes de Marcharse el americano.

Caminó un par de metros, subió al segundo piso y ahí estaba el supuesto Frank, rodeado de seguridad y un par de mujeres, obviamente era él.

— Hey — habló Mark para llamar su atención, pocisionandose enfrente de él. Dejó caer el maletín.

— ¿Que chingados quieres? — se levantó de donde estaba, mirando el maletín.

— Es encargo de Shin, quiere que pruebes lo nuevo y si te interesa que le llames — su semblante era frío, quería mostrar que no tenía miedo y que podía estar a la altura de él.

— Bien... Lo haré pero dile que Suk me está convenciendo de ir con él — rió maliciosamente.

— ¿Suk? — un nudo en la garganta se presentó en el americano. — ¿Yang Suk?.

— Ese mismo ¿A caso lo conoces? Es mejor que no los conozcas, Suk y Jay son de los mafiosos más hijos de puta que te puedas imaginar, igual son traficantes, se hace la guerra entre Shin y Suk, de momento me está convenciendo Suk sobre el negocio. — tronó sus dedos, echándole un ojo al maletín sobre la mesa.

— ¿Quién es Jay? — preguntó Mark.

— El brazo derecho de Suk, se desconoce su rostro, siempre va oculto, podría estar entre nosotros y no sabríamos.

— Es por eso que te quieres ir con Suk, estás cagado de miedo — soltó una sonrisa de ladina.

Frank sacó su pistola para apuntar a Mark. —Será mejor que te largues, si no te volaré la cabeza en pedazos.

— Me iré, no tengo nada más que hacer...

°•°•°

— Mi querido Jay Jay ¿que tal va todo?

— Ya me deshice de BaekYoung, lo tiré al barranco para que nadie lo note.

— Muy bien Jay ¿Y qué tal con Shin? Escuché por ahí que alguien llegó...

El temor del coreano creció, su corazón estaba muy acelerado.

— No sé de qué me hablas, Shin se está cayendo poco a poco, ya hemos distribuido el producto antes que él, así qué...