one-shots {haikyuu}

Amor Joven (BokuAka)

Bokuto Kotauro, el ruidoso búho capitán del fukurudani. Se había declarado hace ya un mes a su actual novio Akaashi Keiji y no sabía que regalarle.

Era su primer mes juntos, no recordaba haber durado tanto tiempo con alguien, en realidad nunca había estado con alguien, solo sus padres, su bro y el equipo de voley podían soportarlo.

-¡Bro! Necesito tu ayuda- gritó desesperado por no saber que darle a su pareja. Esperó la respuesta de su hermano de otra madre pero esta no llegó, de fondo solo se escuchaba un "vamos, c'mon. Tú puedes guiarla".

-Lo siento Bo, sonaste como Dora la exploradora en la intro- murmuró divertido mientras seguía tarareando la canción -¿Akaashi dejó de darte pases?- luego de aquella pregunta sintió como el teléfono resbalaba de su hombro, se encontraba tendiendo la ropa húmeda para que se secara y no podía agarrar el dispositivo. Con la ágilidad de un gato logró tomarlo en el aire y colocarlo de nuevo en su oreja antes de que su hiperactivo amigo hablara.

-No es eso Bro, aun que si sucediera probablemente ya me habría cicidado con la corbata desde la escuela- dijo con toda tranquilidad como si fuera normal aquello -lo que pasa es que mañana cumplimos un mes juntos y no se que regalarle- el pelinegro detectó aquel tono, era el modo depresivo de Bokuto.

-Voy enseguida a tu casa, solo no te deprimas Bro- escuchó a su amigo emocionarse y agradecerle para luego colgar. Salió de casa lo más rápido que pudo y se dirigió hacia la del búho, una vez ahí no tuvo que tocar pues el ojiámbar ya se encontraba ahí en la puerta esperándole.

Se saludaron e ingresaron a la casa para comenzar con el regalo perfecto. Bokuto llevaría un gran cartel con fotos de Akaashi, suyas y de ambos, luego le cantaría un poco y llevaría a un café cercano. Y así sucedió, solo que el menor llevaba un pequeño detalle también, unos collares hechos a juego, uno era un búho jugando con un balón de voley y el otro era una lechuza mirando fijamente al búho. Los collares tenían unos pequeños imanes en los costados para poder unirlos sin necesidad de estarlos sujetando.

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Unos años después se encontraban Akaashi y Bokuto en la sala de la casa en la que vivían, Kotaro se encontraba recorstado en el regazo de Akaashi dejando pequeños besos en el vientre levemente abultado de este, Akaashi se limitaba a jugar con los cabellos bicolores y disfrutar de la atención -Bokuto-san, no van a nacer antes aun que les de muchos besos- murmuró felíz de poder ver a su pareja felíz de tener próximos a dos pequeños búhos, el día que se enteraron fueron al médico, habían pasado ya dos meses y al ver el ultrasonido les informaron que tendrían gemelos.

-Agasheeeeee- murmuró el ojiámbar quejándose y luego abrió la boca para comenzar a entonar parte de una canción - nothing quite to say, young love, young love it changes in a day~ young love, young love doesn't ask too much, young love, young love...-miró al pelinegro el cuel solo sonrió ante aquel recuerdo.

- I think we're old enough to know that this is much more than just...young love- entonó después del de cabello bicolor, aquella había sido la primera canción que le había dedicado, el primer mes de estar juntos -Felíz aniversario, Bokuto-san- el búho se levantó felizmente energético.

-Akaaasheeeee, te acordaste- se lanzó para abrazarle teniendo cuidado en aquella parte baja creciente.

-no podría olvidarlo, Bokuto-san- correspondió el abrazo felíz de poder tener aquel búho hiperactivo a su lado.

Ya no eran niños, sabían que aquello era mucho más que un amor joven, era un amor que crecía cada día más, prometiendo ser infinito.