Cualquiera pudiera pensar que Guanlin estaba loco por no tenerle ni tantito resentimiento a Jihoon después de todas aquellas cosas que le dijo. Y podía que estuvieran en lo correcto. Pero realmente lo único que Guanlin quería era que su compañero se sintiese mejor luego de aquella tarde, cosa que no era posible confirmar o desmentir puesto que habían pasado dos largas semanas en las que no se veían. Con el paso del tiempo, la estancia de Guanlin en la secundaria no mejoraba ni empeoraba, pero un día se encontró con un chico que, emocionado, se ofreció a ser su amigo.
Daehwi y Guanlin pasaban la mayoría del tiempo hablando de cualquier cosa que se les ocurriese, desde la serie de anime de moda, hasta de los temas de álgebra que ni volviendo a nacer les encontrarían una utilidad.
Aunque Jihoon sabía el por qué de la ausencia de Guanlin las últimas semanas, no era ajeno al nuevo amigo de el chico. No sabía qué era lo que le causaba tanto rechazo hacia Daehwi, ese sentimiento de incertidumbre lo ponía incomodo,no era de odiar a las personas solo porque sí, pero había algo que no le terminaba de gustar en aquella persona. Quizás no le gustaba lo rápido que se había ganado su confianza, cosa que nunca había sucedido con él, cuestionándose así su habilidad para socializar. De todas maneras ¿Por qué le interesaba tanto que pasaba con Guanlin?
Mientras aquello sucedía, Guanlin buscaba la forma en acercarse de nuevo a Jihoon. Sabía que nunca tuvieron una relación de la que enorgullecerse, y también estaba consciente de que en realidad, nunca tendría ninguna oportunidad de entrar en su corazón, pero con que le devolviera la sonrisa, o esos dos rojos tomatitos en sus mejillas, aunque fuera de lejos, Guanlin se daba por bien servido.
-"¡Lee Daehwiiiiiiiiiiiiiii!"- Un apurado y emocionado Guanlin entró a su salón de clases, asustando a su mejor amigo.
-"¡Ah! Oye, me asustaste ¿Qué necesitas?"
Mientras se reían y recibía un pequeño golpe de su amigo, tomó asiento a un lado suyo, ninguno era mucho de quedarse a estudiar, pero si le temían a algo, era a los exámenes finales, y claramente no querían arriesgarse de más, por lo que pasaban gran parte de su tiempo en el aula.
-"¿Cómo harías feliz a alguien? digo, subirle el animo. Dae ayúdame, tú tienes talento para esas cosas."- Guanlin sabía que su amigo era una excelente persona en cuanto a detalles se trataba, por lo que, haciendo pucheros, planeaba obtener un buen consejo.
-"Está bien, está bien. Puedes prepararle el almuerzo a tu conquista, siempre se entra por el estomago y luego al corazón. Qué es tanta emoción, Linlin."
-"No planeo conquistar a nadie Lee. ¿Acaso crees que soy tú y Kim? ser cursi no es lo mio."
Las mejillas de Daehwi se colorearon, no dudó un instante en estampar su libro de ciencias contra el hombro de Guanlin a la vez que este se reía sin control alguno.
-"No lo menciones, no dejaré que su nombre salga de tu sucia boca."
-"No diré su nombre, no te angusties. Y gracias por el consejo, espero no me copies y también comiences a prepararle el almuerzo a S-"
-"¡LAI GUANLIN!"
🌼
A la mañana siguiente, el despertador de Guanlin sonó una hora antes de lo que usualmente lo hacía, con cara de pocos amigos y sin querer dejar la comodidad de su cama, se levantó como si de un resorte se tratara al recordar lo que debía hacer.
Encendió su computador en busca de recetas fáciles para preparar una caja de almuerzo, no era un experto en la cocina, pero de alguna manera el pasar casi dos años viendo como Jihoon hacía magia con unos simples ingredientes, lo había dejado con algunos conocimientos.
El pensar en todas las veces que su aprobación hacia alguna de sus recetas basto para ponerlo feliz lo hizo sonreír, y por consecuente, comenzó a preparar la comida de una manera más animada.
La tarde anterior se había encargado de comprar incluso algunos stickers para decorar la cajita donde guardaría todo lo que había cocinado, se encargó de pegarlos con cuidado y de dejar una pequeña nota que indicaba el propietario de aquella linda y elaborada caja de almuerzo.
Terminó a la hora en que solía despertar y empezar a alistarse, pero no se quedó ahí. La puerta de su instituto ya estaba abierta a esa hora, pero nadie solía llegar tan temprano, por lo que aprovechó la oportunidad de entregar la comida sin que nadie se enterara.
Tomó su bicicleta y entró al salón de Jihoon. Dejo la caja de almuerzo sobre su mesa y se retiró a su salón, viendo su reloj se dio cuenta de que aún podía recuperar 15 minutos de las dos horas de sueño que perdió.
Como cualquier otro día, Jihoon llegó a clases sin notar nada extraño, eso hasta que llegó a su asiento. Una pequeña caja rosada llena de pegatinas de Rilakkuma ocupaba el lugar que le pertenecía a sus libros en horario de clases, tenía una nota colgando, la cual se encargó de leer.
"Para Park Jihoonnie"
Pensó que podría ser una broma, pero no lo descubriría hasta lo hora del almuerzo. Al llegar este, Jihoon, espero a que sus amigos estuvieran distraídos, no quería explicar algo que ni él mismo entendía, y tampoco quería compartirle a Jinyoung, que conociéndolo, no le dejaría nada.
Sus ojos brillaron al descubrir el rico almuerzo que le preparaba, y con una sonrisa, comenzó a devorarlo todo, esquivando a su amigo, que le pedía todo lo que podía. Detrás de un arbusto que se encontraba por ahí, Guanlin sonreía al ver a un Jihoon muy feliz y animado, mientras apretaba a Daehwi en un intento de abrazo.
Jihoon dejó la caja a fuera de su salón de clases, caja que luego Guanlin recogió, con la diferencia de que ahora tenía otra nota.
"Muchas, muchas gracias. :D"
💓
Se me salió mucho la azúcar con este capítulo; -; pero espero que haya quedado lindo :')
La pregunta del día es ¿Quién creen que sea la conquista de Daehwi? quizás luego dé otra pista.
¡Gracias por leer!🌸
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Sweet as you; Panwink
FanfictionDonde Jihoon es un estudiante amante de la cocina muy serio y Guanlin intenta conquistarlo con comida. O donde Jihoon comienza a comparar todas las cosas bellas de la vida con aquel chico de pelo azabache y bonito nombre. "Esto es tan dulce como tú...