Aloha y sus dragones

8. Derribando Muros

La medicación me deja trastocada, es aburrido estar tantas horas en casa tumbada en la cama. Ya ha pasado una semana, los dolores parecen aminorar, pero el sueño va en aumento. Creía que vería muchas películas, leería mucho, sin embargo en el transcurso de esta semana no he leído nada y quizá habré finalizado un total de cuatro películas.

No miento cuando digo que duermo en exceso. Tomo unas veintitrés  pastillas diarias, cada cuatro horas voy alternando analgésicos para el dolor, junto a los anti-inflamatorios, los antibióticos y cada doce horas un relajante muscular. Lo dicho, cambiamos plan de películas y libros por roncar y babear. Cada semana se reducirá un relajante y la dosis del analgésico. El médico viene a casa de forma semanal y dicta la nueva pauta.

Hoy es el primer día con menos dosis, dicho esto, pienso ponerme una película. "El diario de Noa". Soy una romántica empedernida, una blanda, pero solo cuando estoy protegida por mis cuatro paredes. Donde únicamente puedo ser yo.

Ha venido mi tía a cuidarme, en algún momento en el cual estaría durmiendo ya que ni me he enterado. Evitan dejarme sola por si necesito ir al lavabo y las tomas de medicación.

- Cariño, ¿Estás mejor?- preguntó mi tía trayendo una manzana rayada con un vaso de agua y la dosis perteneciente.

- Sí, tita. Estoy bastante mejor. ¿Sabes dónde está mi móvil?

- Lo dejé aquí cargando, no ha parado de sonar. Hacía pri-pri. Al ver que no eran llamadas lo silencié para que te permitiera descansar.

- Muchas gracias.- Mientras me comía la manzana miré el móvil.

Tiene tres mensajes de Facebook.

<< Hola Aloha :) Mí nombre es Nil. ¿Cómo estás? >>

¿Quién era este tal Nil y porque me había hablado? Sin saber porqué le contesté.

<< Hola Nil, encantada. Bien ¿y tú?. >>

<< Genial, trabajando un poco.>>

<<¿ De qué trabajas Nil? >>

<< Trabajo de Seguridad, ¿tú trabajas o estudias? >>

<< Ambas cosas, aunque ahora estoy un poco en parón jejeje >>

<< Espero no sonar a persona psicópata, pero veo como coges el tren cada día. Me llamaste la atención desde el primer momento.Sin embargo, llevo días que no te veo. ¿ Es por el parón?>>

<< Quizá si suenas a psicópata, ¿estoy haciendo bien en hablar contigo? jajaja>>

<< Eso espero Aloha, creeme que soy de lo más normal del mundo. un chico corriente con un gato llamado Antonio que trabaja más horas que las que está puesto el sol y solo le permite ir del trabajo a casa. Pero todas las mañanas hago transbordo en tu misma estación y llevo meses viendo como le regalas al mundo esa sonrisa tan maravillosa. Pero al dejar de verla pensé que habrías cambiado rutina o cualquier cosa, llámalo coincidencia, pero teníamos un amigo en común y al ver tu foto, te he reconocido y no he podido resistirme.>> << Vale jejeje >>

La conversación no cesó, eran las nueve de la mañana cuando habíamos comenzado a hablar y en un par de horas nos habíamos dado el messenger. El día estaba finalizando, yo debía tomarme mis anelgesicos, pero no podía dejar de hablar con él.

<<¿ Eres más de mar? Yo en la playa apenas me baño, pero el año que viene nos iremos de vacaciones a un hotel que tenga piscina, pero en primera linea de playa.>>

<< Me parece perfecto, pero tendrás que darte al menos un mini baño conmigo. ¿Lo prometes?>>

<< Prometido. Voy a plegar, así que voy a tener que cerrar esto, ¿Hablamos cuando llegue a casa? >>

<< Vale, ¿Cuánto tardarás? >>

<< Una hora y media más o menos...>>

<< Nil, seguramente esté dormida, así que si me ves que no estoy conectada es porque me dormí >>

<<¿ De verdad? Es que me encantas y no querría desconectarme, veas la oportunidad para no saber más de mí y desaparezcas. >>

<< Eso no pasará, si al llegar a casa no estoy conectada es por la medicación, pero prometo hablarte mañana. >>

<<vale, te creeré. Intentaré correr lo máximo posible a ver si así consigo pillar el tren de antes y gano minutos.>>

<< ¿No tienes Whatsapp? Puedo darte mi numero y vamos hablando. >>

<< No tengo, pero lo primero que haré nada más llegar a casa será hablarte, hasta luego peque. >>

Pensaréis que soy subnormal, pero luché contra los efectos del analgésico con tal de darle las buenas noches. En doce horas habíamos hablado de planes de futuro, hablábamos como si fuésemos amigos de toda la vida. Era increíble, pero habíamos dado por hecho que en el primer instante de vernos ya seríamos el amor de nuestras vidas y desde ahí podríamos labrar un futuro juntos.

Sumergida en mis pensamientos, en Nil y su aparición repentina en mi vida, sonó el móvil. Era él, estaba en casa y había cumplido sus palabras.

<< toc, toc>> Un inicio de conversación estúpido, pero a mi me provocó una sonrisa y un acelerón de corazón. Así tal cual.

<< ¿Quien es ? >> contesté ridículamente.

<< La persona que quiere secuestrarte para el resto de tu vida >>

<< Hazlo >>

Mierda, quizás acababa de abrir mi corazón. " Aloha céntrate, que no lo conoces". " No Aloha, déjate llevar". ¿ Acababa de poner mi corazón y mi mente en conflicto sin querer?

<< Lo haré, pero más adelante >> "Eso espero", "Joder Aloha, nos está ganando el puto corazón. ¡ FRENA!

No creáis que aguante muchas horas más de conversación, como mucho veinte minutos, donde simplemente desaparecí. El sueño junto al analgésico me venció, y yo, que estaba feliz, me dejé ganar.

Al día siguiente nada más abrir los ojos ahí estaba su buenos días. Los días pasaban y nosotros hablando con ellos, simplemente dejábamos de hablar en las horas de sueño.

El chico misterioso estaba derribando los muros a pasos agigantados, cada vez estaba más adentrado en mi corazón sin aún haberle visto la cara. Debía reconocerlo, tenía mucho miedo.

¿ Y si me enamoraba de alguien a quien no conocía ? ¿Y si no era el chico de la foto o no era quien decía ser ? ¿Y si solo quería sexo? O peor aún, ¿Y si era quien decía ser, me enamoraba y al conocerlo seguía siendo incapaz de tocar un hombre?