Mecanismos de defensa

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Cómo nota debo decir que los mecanismos de defensa son aquellas actitudes inconscientes que nos ayudan a sobrellevar una situación angustiante o terrible. Dicho de forma muy general. ¡Saludos!



Capítulo 6.- Mecanismos de defensa.



La cabeza le punzaba ligeramente y la sed era terrible. Pero sentía frío. Se envolvió un poco más en las mantas. Si no fuera por ese brazo cálido que rodeaba su cintura... Abrió los ojos, ¿brazo? Paseó asustado la mirada, sin ubicar el lugar en el que se encontraba. Luego dirigió la vista hacia su cuerpo, desnudo... ¿DESNUDO? "Oh, por dios". Miró fijamente la pared enfrente de él ahí, un póster con un cantante de rock, lo saludaba. Su pecho era un lío de angustia. Fijó la vista en el póster, cómo si éste fuera a explicarle lo sucedido. Una serie de retazos de recuerdos, comenzaron a llegarle a la cabeza, en desorden, cómo piezas de un puzzle, cómo memorias de un sueño: El karaoke, Hyun en la sala de su casa, el director, su padre, los amigos de Hyun cantando y bebiendo, la invitación de Hyun, Dong Yul, la pelea en la cafetería, Dong Yul invitándole un refresco... Refresco, ¿acaso no sabía raro? ¿Acaso no evitó despreciarlo por no parecer grosero? Comenzó a sofocarse, a respirar con dificultad... Dong Yul... Miró aterrorizado el brazo que lo sujetaba, sintiendo paralizarse de miedo, ¿acaso Dong Yul...? ¡No! ¡Hyun no lo permitiría! Hyun...



Hyun...



Hyun bebiendo con sus amigos, Hyun hablando con una mujer... ¿una mujer? ¿Era real o la había soñado? Hyun soplándole a una ¿vela? Las risas, las cosquillas... y... volteó lentamente, mientras otra serie de intentos de recuerdos llegaron a su cabeza. Vagas ideas que le calentaron las mejillas y le hicieron tener ganas de llorar. Hyun... ¡Hyun! Se levantó de prisa tomando una camiseta que fue lo primero que encontró. Era larga y le cubría hasta la mitad de los muslos. De Hyun. Se quedó, ahí, de pie. Mirando como Hyun se desperezaba, se tallaba los ojos e intentaba enfocar su vista. Al fin lo vio y se levantó de golpe. La sábana resbaló por su cuerpo, dejando su pecho desnudo. Young Saeng no tenía más dudas. No había sido un sueño. - Saengie... yo...



- No me digas así - Hasta a él le impresionó la firmeza en su voz. Su mente trabajaba ágil, intentando encontrar una causa, una lógica, un porque, mientras, petrificado, parecía haberse transformado en piedra.



Hyun bajó la cabeza, mortificado. - Young Saeng-ssi... yo... lo qué pasó...



- Es normal... - Hyun levantó la cabeza, mirándolo como si hubiera enloquecido. Saeng continuó, dejando salir lo que en su mente fluía, abrazándose a ello como a una tabla de salvación. - Un gran porcentaje de personas tienen su... - titubeó ligeramente, pero apretando los puños, continuó. - su primera vez durante la adolescencia. Es muy iluso creer que siempre tenga que ser por amor. Las hormonas despiertan de una forma descontrolada y es parte del instinto. Es una necesidad fisiológica.



-¿Qué? Saeng...



Saeng no lo escuchó, dejó escapar una risita torcida, desesperada. - Tarde o temprano iba a suceder. Con esta o con aquella persona, no importa. Es sólo parte de la vida. Sólo son ideas cursis y baratas las que hacen pensar en todo esto como un ritual rosa, con velas, flores y champagne. No. Por supuesto. Es sólo instinto, sólo eso. Qué se intensifica bajo el influjo de ciertas sustancias. Ocurre... la mayoría de las veces ocurre así. Sin planearse.


- Saeng...



- ¿Puedo bañarme?



Hyun estaba preocupado, muy preocupado por Saeng. Si al menos le hubiera gritado o intentado golpear, sabría cómo actuar, pero con esa indiferencia, con esa frialdad, no podía. Se dio cuenta de sus puños apretados, de sus ojos líquidos, del temblor de su barbilla. Y su corazón se rompió. Para Saeng no había sido bueno, nada bueno.

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