Capítulo 1

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Lucy enamorada de aquel hombre de hielo? Jamás. Ella de hace tiempo había caído bajo los brazos de otro hombre, todo lo contrario al primero.

El primero era callado, con un pasado triste, serio, confundido y parecía que actualmente tenía a alguien quien lo acosaba diariamente, por lo que Lucy supuso que ya debían tener algo. No le molestaba, incluso podría decirse que los apoyaba como pareja.

Mientras que el segundo era alegre, cálido y lleno de energía. Hace algunos años que había tenido una "relación difícil" con una chica del gremio, pero (para suerte de ella) parece que de "amigos" nada más surgió.

-Ahh, hoy no tengo nada interesante que escribir- dijo la rubia mientras se paraba de su escritorio- Iré al gremio a ver si hay algo que me parezca interesante- Luego de esto, tomó sus cosas y se encaminó hacia su destino.

Una vez al llegar al lugar, notó que estaba lleno de gente y a lo lejos se divisaba a su "persona especial".

-¡Natsu!- gritó para que este le oyera, pero parece que con el ruido este no escuchó. Por esto, Lucy se puso en marcha para llegar al lado suyo, pero en el camino tropezó y cayó de bruces.

-Kya!- gritó. Pero luego sintió como alguien la incorporaba.

-Lucy, ¿Estás bien?- Esa voz le sonaba familiar. Una voz sexy, que imaginaba que en la cama podría excitarla de una manera impresionante. Era Gray.

-¡Gray!- exclamó para luego ruborizarse por haber tenido esos pensamientos tan impropios de ella.

-Jajaja, ¿Qué sucede? Qué haces por aquí- Le preguntó el mago de hielo, que, para variar, andaba en calzoncillos.

-Pues, nada, no tenía inspiración y vine aquí a entretenerme; pero más importante, tu ropa- A lo cual el mago pegó un saltito.

-¿Heee? ¿Cuándo?- luego de ponerse sus pantalones a la cadera, le preguntó a Lucy:

-Hey y ¿Cuándo iremos a una misión?- Antes de que Lucy pudiera responder, una cabeza azul a lo lejos de asomó con un aura oscura.

-MIIII RIVAAAAL- decía.

-Hehehe...¿Quién sabe? Deberías invitar a Juvia- Le dijo.

-Ohm... prefería ir los 5, como en los viejos tiempos- y sonrió. Y madre mía que estaba bueno, su sonrisa y su cuerpo hacían una buena combinación de feromonas.

-Quizás cuando puedas...Ya sabes...sacarte a juvia de enci-- algo la interrumpió. Sintió un aura, pero no era la de Juvia, era más bien, un olor que invadía todo el lugar- Gray, hueles eso?- preguntó.

-No, ¿Por qué?- Poco a poco Lucy comenzó a marearse.

-Es...extra-- y se desmayó. El mago de hielo, asustado, enseguida la intentó reanimar.

-Lucy, ¡Lucy!- pero ella no respondía- Rayos- tomó su pulso. y vio que estaba bien. Sólo se había desmayado. Mira llegó a su lado.

-¿Todo en orden?- Cuando vio a Lucy en el piso, se asustó, sin embargo, Gray al explicarle lo acontecido, Mira le dijo que probablemente había sido el cansancio de la misión de ayer. Gray dijo que la llevaría a casa y Mira se lo agradeció. Por lo tanto Gray tomó a Lucy en brazos y se la llevó hasta su casa.

Lucy en sus sueños no entendía nada. Se sentía desnuda y que esa suave fragancia la envolvía.

-Q-qué es esto- decía para sus adentros. Poco a poco esa fragancia se volvería una necesidad puesto que sentía que poco a poco ese olor la tomaba por completo. Comenzó a subir por sus piernas cuando...

-Ahh~ - gimió al despertar.

-¿L-lucy? ¿Estás bien?- Gray estaba sorprendido con aquel sonido recién emitido.

-Ehh... si, gracias ¿Estamos en mi casa?- Lucy que fue ese sueño!!?? Porque gimes así de la nada!! pensó.

-Si, te traje aquí porque te desmayaste-

-Ahhh-

-Sobre recién...-

-Ahhhhh no digas nada porfavor! Estaba teniendo una pesadilla, eso es todo!!-

-Este... Okey- luego se paró de su silla y quiso salir- me iré ya que estas mejor, vendré luego a visitarte vale? - y tomó su chaqueta.

-Claro, gracias por todo- Gray se iba, pero Lucy sintió que un deseo increíble le subía por el cuerpo, lentamente hasta llegar a lo profundo de su ser. No podía pararlo. Necesitaba decir su nombre y rogarle porque no se fuera.

-G-Gray!!-

Y Gray se dio vuelta.

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