▪︎Capítulo 13▪︎

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Bueno ahí me encontraba yo, corriendo del inspector después de un día de locos, maldita la hora en que deje que Elsa se fuera por el lado derecho, el inspector termino por seguirme y ella probablemente este en algún lugar del Instituto respirando algo que a mi me faltaba en estos momentos; oxigeno.

Necesitaba descansar lo más pronto posible, ya que mis piernas literalmente no podían dar un paso mas. Agradecí internamente haber estado en el grupo de porristas, pero sin duda bajar y subir escales varias veces, después de correr por los pasillos era algo que dejaba un gran desgaste físico. Voltee un poco mi cabeza para ver si el inspector seguía persiguiéndome, ¡Mala idea! Se acercaba cada vez mas, y para tener una prótesis en su pierna derecha, tenia una buena resistencia y velocidad.

―¡Señorita!- gritaba en tono cansado el inspector de nombre Bocón- ¡No puede correr por los pasillos, además debe ir a la oficina del Director por lo que hizo!

¡Ni loca voy a ese lugar! No puedo creer que esto me este pasando, maldita Elsa todo es su culpa.

Mágicamente mis pies aumentaron su velocidad y logre girar antes que Bocón.

Desesperada buscaba donde esconderme, gire mi cabeza a ambos lados y encontré el lugar perfecto.

A mitad del pasillo se encontraba una pequeña puerta donde el conserje comúnmente guarda sus utensilios de limpieza, así que sin perder tiempo me adentre en ella, la cual por suerte estaba abierta. No pude cerrar completamente la puerta ya que el inspector había pasado frente a mi, y al darse cuenta que no estaba a la vista por el pasillo termino por detenerse a unos cuantos metros de mi.

Aguante la respiración como pude; lo cual era casi imposible, estaba muy cansada y necesitaba tomar una gran bocanada de aire. Tan solo me quedo cerrar los ojos y esperar que Bocón no encontrara mi escondite.

―¿Qué haces ahí As?

¡Diablos!

―¡Por Thor Hipo!

Mierda, mierda y mil veces mierda.

―¡Qué momento mas oportuno señor Haddock!- exclamo Bocón.

Hiccup, eres un I-D-I-O-T-A

Sin esperanza alguna me dedique a salir de mi maravilloso escondite que había sido arruinado por el castaño-rojizo que estaba frente a mi con una sonrisa burlona en los labios.

Bocón ya se aproximaba a mi, con la cara mas exhausta de toda la vida pero con cierto aire de victoria.

―Al fin se deja alcanzar señorita- finalmente llego hasta donde me encontraba, miro unos segundos a Hipo y después dirigió su mirada de nuevo a mi- Le agradecería que me acompañara a la oficina del Director, señorita Hofferson.

Y sin más comenzó a caminar en dirección al lugar de mi muerte, con la seguridad de que lo seguiría. Exhausta lo seguí no sin antes soltar un:

―Gracias Hipo.

Con el mayor sarcasmo que el mundo haya escuchado.

Mis pies ya cansados recorrían los pasillos, que un par de minutos antes habían sido testigos de la huida más asombrosa de todas. Pocos segundos después, Hiccup ya se hallaba a mi lado siguiendo al igual que yo al inspector.

―¿Qué fue todo eso?- pregunto Hiccup con una pequeña risa- ¿Escondiéndote de Bocón?

―Larga historia- me encogí de hombros- De igual forma ¿Qué hacías fuera de clases, no tenias Trigonometría?

―Si, pero tuve que salir al baño, ya sabes una emergencia.

―¿El gel loco te volvió a atacar?- bromeé- ¿Necesitas mi a ayuda de nuevo?

TE AMO [1] ||Hiccstrid|| Modern AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora