22. Nosotros

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Durante la cena Yesung no pudo con su genio y terminó por contarle la charla de los días previos con el más chico, quería dejar las cosas claras y decidió que si quería que todo funcione no podía empezar de nuevo con mentiras y ocultamientos. Hyukjae no estuvo contento con las cosas se dijeron, pero estaba agradecido de que al fin las cosas estuvieran en su lugar, se sumió en su pensamientos, dejando al mayor temiendo la reacción que tardaba en llegar.

-Gracias. Iré a hablar con él después de todo. Se que por más que es un niño insoportable aún me necesita. Irene no sabe lo que pasó entre nosotros en verdad, por lo que no se opondrá a que me acerque a ellos, supongo.

-Hyuk.. no..

-Quiero estar contigo.- lo calmó, tomando sus brazos - Estaré para él del modo que tendría que haber estado todo este tiempo, no durmiendo con el, no incentivando a que sea un mocoso, solo apoyándolo para que sea el gran padre que tiene que ser. Si vieras su cara cuando tiene niños cerca, entenderías que entre nosotros nunca hubo un futuro.

-Resignaría mil niños por ti.

-Tu.. porque eres especial. Eres un premio al final del día. Siempre voy a estar agradecido de que me salvaras aquella noche y lo sigas haciendo todos los días. No puedo decir aún que te amo porque sería descarado de mi parte, pero si de algo estoy seguro, es que quiero seguir a tu lado. Gracias por no mentirme. Donghae.. sé que parte de él quiero en mi presente y cuál no. - le sonrió, apoyando su cabeza en su hombro. El mayor esbozo un puchero, matándolo de ternura.

-Bien ¿cuando quieres hacerlo? Si tu puedes perdonarlo, yo también puedo darle otra oportunidad.

-Creo que una vez que el niño nazca, el temporal pasará. Ya falta poco tiempo, tres meses es poco, y nos dará espacio para nosotros.

-"Nosotros" suena bien - le contestó achicando aún más la distancia entre ellos.

Una nueva guerra de besos inició dejando como resultado a Yesung indefenso, contra la cama, mientras era aplastado por el bailarín, que gozaba su victoria.

-Que gran vista. Podría acostumbrarme a esto. - Hyukjae apoyo sus caderas en los glúteos de su novio como respuesta. - Si, a eso me refiero cariño. Sería feliz de que te hagas cargo de mí también, ¿sabes? - levantó su ceja.

-Oh, que bueno que me propuse hacerte feliz de ahora en adelante.

La temperatura de la habitación siguió subiendo, terminando las risas agotadas, delineando al fin la paz que el corazón de Hyukjae necesitaba. Había tocado fondo, pero había valido la pena para llegar a esa tranquilidad.

Arreglaría las cosas con Donghae y entonces, sería el hombre más pleno del mundo.

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Verán que ya el amor de Yesung lo tiene derretido a nuestro mono.. pero en verdad.. ¿superó a Donghae? Falta poco para el reencuentro :O

SálvameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora