Flores [Busca la nueva versión]

33

El joven de armadura azulada sobrevoló el cielo sobre su perro para ir a la base de Fire Man en la ciudad, no faltaba mucho para llegar pero ya no tenía ganas de continuar, por lo que se detuvo a descansar en la azotea de un alto edificio.

Habían muchas cosas que no podía sacarse de la cabeza en los últimos días que lo habían hecho emocionarse, podía incluso llegar a decir que habían sido los días más... ¿Cómo decirlo? ¿Felices? Si, talves felices... Los días más felices que había tenido fantaseando con muchas cosas.

Sin embargo ya no se sentía tan feliz como antes, era como si todos sus sueños y esperanzas se hubieran roto de repente, era tan triste y doloroso como sonaba.

Y es que... ¿Cómo podía Bass atreverse a decir eso? Se sentía traicionado en parte, se había preocupado por él, le había defendido, había acarreado muchos problemas consigo, dio mucho ¿Y que recibió?

¡Una estúpida sonrisa con sabor a galletas con chispas de chocolate!

¡Nada más!

El menor pisoteó de rabia, ¿Y ahora qué? No podía sentarse a llorar en aquel lugar.

Pero no se encontraba al cien por ciento, se sentía... Deprimido, cansado, decepcionado.

Cayó acostado sobre el suelo y cerró los ojos.

Ya había llorado por cosas menores, no sería nada malo ni nuevo si lo hiciera, así que lo dejó salir.

Lloró, sus lágrimas cayeron por su rostro y eventualmente llevó sus manos a sus ojos para cubrirse mientras sollozaba.

Rush se acercó preocupado, llorando como solo un perro puede hacerlo, con su nariz trató de descubrir el rostro de su amo pero falló.

-Ahora no Rush- ordenó el azul girando su rostro hacia su derecha evitando al perro -No quiero jugar-

El perro se acostó junto a Mega Man y descansó con mirada triste.

Idiota, era un idiota, no le hizo caso a Roll, no le hizo caso a papá, quizo creer lo que quizo creer, se forjó una simple ilusión.

El chico no podía parar de llorar por más que intentara pero no podía quedarse ahí por mucho, tenía una ciudad que salvar, así que dejaría de lado cualquier cosa que le lastimara e investigaría por su cuenta, y el siguiente Robot Master sería quien le diría todo.

Decidido se montó sobre Rush y se dirigió a su destino mientras secaba su rostro.

×××

Llegó a la base y avanzó despacio procurando guardar silencio, miró a su alrededor para percatarse de cualquier enemigo que quisiera tomarle con la guardia baja, que miedo, pero no podía darse el lujo de tenerlo, avanzó con cuidado, un paso, dos, ¿Acaso el lugar estaba vacío? Eso daba aún más miedo. Continuó avanzando poco a poco aumentando la velocidad cada cierto tiempo hasta que se sintió en la confianza de caminar de forma normal y eventualmente llegó a la puerta donde encontraría al siguiente Robot Master.

-Ahí voy Fire Man- dijo al momento que atravesaba el túnel hasta llegar al campo de batalla.

Vacío...

Avanzó hasta el centro del lugar pero no había nadie, hasta resultaba...

Volteó, dio un salto para evitar el golpe de una bola de fuego que apareció por detrás.

... Sospechoso.

-¡Ah, tuercas fundidas! ¡¿Cómo pudiste esquivar eso?!- cuestionó la alta y ardiente figura que apareció en el mismo lugar de donde había venido el ataque.