La Luz de tu aparecer

Curtis

A la mañana siguiente me desperté con muchos ánimos. El día anterior con Noah había sido increible; a pesar de que pasamos tan solo un par de horas juntos, de verdad logro subirme el ánimo y cambiar mi opinión sobre el; quizás no era como los demás cabezahueca de sus amigos.

El despertador marcaba las 8 am, eso solo podía indicar algo.

-¡Hora de la medicina Emma Porter!—corre mi madre más animada de lo que comúnmente está.—¿Que compraste ayer en el centro comercial? Llegaste con una cara de felicidad que no veía hace meses.

-Nada, solo una malteada—miento a la vez que trago las innumerables pastillas.

-Anda ve a tomar desayuno-dice ella dándome una palmadita en el trasero

-¡Mamá! -río ante su acción

(...)

De camino a la parada al autobús pienso que les diré a mis amigas respecto a lo de ayer. ¿Debería pedir disculpas?¿Debería contarles lo de Noah?
No lo sé, algo tendría que venir a mi mente a la hora de verlas. Después de todo, no había recibido ningún mensaje de texto de ellas después de eso, quizás...¿No les importaba?¿Se habrían enojado conmigo? Da igual.

En fin, sigo mi camino recordando la cara de Noah al verme con la polera, fue muy halagador y tierno de su parte, nadie había gastado 79 dólares en mi; a excepción de mis padres, claro.

Cuando llego a la parada me encuentro con mis amigas... y Curtis. Al parecer me había perdido de algo ayer en Rocky's, Curtis le tomaba la mano a Lily en este momento. No puedo evitar poner una cara de asco ante tal escenario.

Maldito

-¡Hola Em!-dicen todos incluyendo a Curtis cuando me uno a ellos.

Noto como Lily tímidamente suelta la mano de Curtis y se aparta un poco. La situación me produce una sensación de asco interno y ganas de vomitar. De seguro Lily notó mi expresión y por eso se apartó de Curtis.

¿Esto significa que todas las mañanas se uniría a nosotras en el autobús? Que horrible. Espero con ansias que sea mi cumpleaños para que me regalen mi propio auto. Si ya odiaba el autobús, ahora lo detesto.

-Hola-digo lo más serio que puedo

-¿Donde te metiste ayer Em?-pregunta Curtis

- A ti que te importa-susurro

-¿Eh?

-Me fui a casa algo me cayó mal en Rocky's-sonrio falsamente.

Estaba claro que el único que no comprendía la verdadera razón por la que me había ido ayer era él. Las demás habían notado la incómoda situación ayer en Rocky's y creo que por sus caras ante la extraña conversación en la parada de autobús notaron que algo me pasaba; bueno Kat y Cher lo saben, Lily es la única que no, supongo que le diré después.

- Em te perdiste la segunda vuelta de malteadas, ¡Curtis derramó la suya en su pantalón! Fue comiquísimo-dijo Lily

Im ti pirdisti li siguindi viilti di miltiidis¡Cirtis dirrimi li siyi in si pintilin! Fii cimiquisimi

-Genial

Todo el camino al instituto, literal, todo hablaron de lo ridículo que fue Curtis al pedirle una cita a Lily frente a todas, al parecer "no se pudo contener por su belleza". Iugh pero que cursi. Por primera vez me alegraba cruzar la alameda que indicaba que estábamos cerca del instituto.

Cuando todos bajaron, yo me quedé atrás para no irme con Curtis, ya tuve una dosis muy alta de él por hoy. Noté que Lily me esperaba y se acercaba a mi al mismo tiempo.