Pequeñas Historias

HISTORIA VIII

Pedida por:
@MelanieRamirez532

›Esperó y te guste‹

Detrás de una mascara

Estaba haciendo un día perfecto en Konoha, los pájaros cantaban y el cielo estaba despejado; salvo por ese terrifico sol que me daba directo a la cara. Pudiera apostar que estaba totalmente roja y, lo peor de todo, cubierta de sudor.

Me detengo un momento de la tarea que mi padre me pidió, eso de pintar la fachada del restaurante no es trabajo fácil; y me limpió el sudor con el brazo. Contempló de nuevo el cielo olvidando por completo que estaba encima de una escalera y me exalto al escuchar una voz conocida.

-Hola -dice tan cautivador como siempre que hace que mi cordura salga volando como siempre.

Vuelvo a la realidad, seguro solo esta aquí como todos los clientes. Me encojo de hombros ante la verdad, pues un ninja como él nunca se sentiría atraído a una mesera como yo; menos a una que esta cubierta de pintura.

-¿Puedo ofrecerle algo? -limpio mis manos en el delantal y doy un paso al frente. Ups, olvide que estaba en una escalera.

Siento que la tierra me reclama con ayuda de la gravedad, y como hundo mi miedo en fuertes gritos. Seré una paranoica ya que no esta muy lejos el suelo, pero no me gusta la idea de que él me vea hacer el ridículo. Bueno, demasiado tarde.

Sigo gritando hasta que me doy cuenta de que he dejado de caer. Abro los ojos, ya que los había cerrado por miedo, y miró al suelo: Sí, no caí. Levantó la vista lentamente y siento como unos brazos tan... No entremos en detalles, me sostienen. Creó que mi rostro esta más rojo que los tomates que al joven Sasuke le gustan. Dios, es él, Kakashi evito mi caída. ¡Que romántico! Es como todas esas películas dramáticas, que obviamente no veo. Lastima que Kakashi lleva su máscara, como siempre, sino pudiéramos dar el siguiente paso. Aún no puedo olvidar su perfecta mandíbula o eso pómulos tan marcados.

-Ayame, ¿estas bien?

-Sí... -digo sonriendo con una voz que no reconozco-. Digo, estoy bien. Gracias -me bajo de sus poderosos brazos y me encamino dentro del restaurante sabiendo que él me sigue detrás-. ¿Qué te sirvo?

Me paso tras la barra donde esta papá batiendo los fideos y tomo la libreta y una pluma. Vuelvo donde Kakashi que mira el menú detenida y concentradamente. Se ve tan apuesto. Kakashi baja el menú y me mira sonriendo, se que esta sonriendo, lo puedo notar por como se estiro su máscara.

-A ti.

-¿Qué cosa? -y nuevamente la sangre sube a mi cabeza.

-Dije que un miso ramen de pollo.

-E-enseguida -lo anotó y le paso la orden a papá. Vaya que estoy alucinando cosas.

Le entregó su plato a Kakashi y finjo que estoy cortando los tallarines para verlo comer. Se baja la máscara y en escaso cinco segundos ya la tiene de vuelta puesta y con el plato completamente vacío. Bien es dicho que de lo bueno poco.

-Gracias por la comida -dice y deja dinero junto al tazón vacío.

Veo como sale del restaurante y suspiro recargandome en la barra preguntándome si algún día seré vista por él. Creó que se vale soñar. En fin, vuelvo a fuera a continuar pintando la desgastada pintura.

~♥~

Salgo de restaurante frotándome el estomago. Si que ese Teuchi se luce en cada platillo: Siempre siento que es la primera vez que como ahí. Me detengo ante la escalera en que estaba subida Ayame y sonrió recordándola allá arriba. Parecía que el sol la iluminaba haciéndola parecer un ángel. Miro mis brazos, aún siento su presencia en ellos. Si que ha crecido bastante... Me río de mi mismo, pues sueno como anciano.

Continuó caminando y saco de mi bolsa de artefactos ninja mi tan amado Icha Icha. Me preguntó si pronto habrá una continuación.

Pequeñas historias
2/Agosto/18

Si quieres una pequeña historia en particular, no dudes en pedirmela!