• 4 •

84 5 0
                                    

-¡May, cuanto tiempo sin verte!- decía mi tía mientras salía del ascensor -¿No se suponía que te habías ido unos días?-

-¡Oh, no, claro que no, yo nunca viajo!- dice la señora Parker.

Mientras yo esperaba a que mi tía me ayudase con la compra, Peter se acercó.

-Te ayudo- dice mientras ríe y carga unas bolsas.

-Gracias, mi tía elige los mejores momentos para hablar- digo mientras intento que la puerta del ascensor no se cierre. Metemos todas las cosas y subimos. Abro la puerta y me dirijo hacia la cocina.

-No sabía que tú y tu madre vivían con Anna-

-Pues sí. Deja eso por ahí-

-¿Cómo es que estáis las tres aquí, si estos pisos son de dos habitaciones?- pregunta un poco asombrado.

-Te recuerdo que somos mujeres, nos apañamos con lo que sea- digo de forma burlona -Si quieres ya te puedes ir, ya guardo yo esto- digo colocando cada cosa en su sitio.

-Mejor te ayudo, no quiero que mi tía me avergüence frente a la tuya- dice riéndose.

-Mi tía y mi madre son iguales...- digo recordando cuando le conté a mi madre sobre mi primer beso. Se lo dijo a todo el mundo, y cuando digo todo el mundo, me refiero a que lo gritó en medio de la calle. Desde entonces, no le he vuelto a contar nada a mi madre.

Una vez terminamos de recoger todo, nos fuimos al salón. Estuvimos hablando un rato hasta que mi tía apareció por la puerta.

-Bueno, yo ya me voy, hasta luego MJ- dice levantándose.

-Adiós Parker- digo mientras cojo mi teléfono.

Mi tía cierra la puerta y se va a la cocina.

-¿Que quieres que haga de comer?- dice asomándose por el ventanal que hay entre el salón y la cocina.

-No sé, lo que tu quieras-

-Entonces no te quejes después si no te gusta- dice dirigiéndose de nuevo hacia la cocina.

Un rato después, mi madre llega del trabajo y nos sentamos a comer.

-¿Qué tal vuestra mañana?- pregunta mi madre mientras se sienta.

-Bien... La tía Anna casi hace que me pille el ascensor, pero todo bien- digo mientras miro mal a mi tía.

-¡No es mi culpa que lleve dos semanas sin ver a la tía May! Tú sabes que somos muy amigas- dice mientras se ríe.

Después de comer, cruzo el pasillo y entro en mi habitación. Saco el teléfono del bolsillo trasero de mi pantalón y me siento en la ventana. Me pongo un rato a hablar con Gwen sobre temas diversos y, después de un rato, me dirijo a mi escritorio.

El resto de la tarde la he utilizado para dibujar y escuchar música.

MJ

-¿Puedes pasarme los horarios del grupo de artes?-

• Gwen •

-¡Claro! Espera un minuto...

-Miércoles: 9:00 / 10:30
-Viernes: 11:30 / 12:00

Me levanto de la silla y me dirijo hacia mi armario, cojo un sueter y me lo pongo. Abro la ventana y paso a través de las escaleras de incendios. Toco dos veces a la ventana y unos segundos después Peter me abre.

-¿Qué haces aquí?- dice él.

-Me aburro yo sola en mi casa. ¿Qué haces tú?- digo dirijiendome hacia su escritorio.

Me quedo observando la cantidad de cables y aparatos electrónicos que hay sobre la mesa. Giro sobre mis talones, sobre pasando la habitación con la mirada. Me acerco a una estantería llena de libros. Alzo mi mano y rozo con los dedos el lomo de un libro en concreto.

~1984~

Este libro me lo leí a los 13 años por primera vez. Me lo recomendó mi padre...

-Estaba estudiando- dice señalando el libro de bioquímica sobre el escritorio.
Salgo de mi aturdimiento y me tiro en su cama.

-¿Estudias los sábados?-

-Si, bueno... No tenía nada mejor que hacer...- dice mientras coge el libro y se sienta a mi lado.

-¿Enserio Peter? Siempre hay algo mejor que estudiar- digo mientras me incorporo y le quito el libro.

-¿Por ejemplo?- dice mientras se cruza de brazos con una sonrisa burlona.

-Ir a la feria- digo encogiéndome de hombros.

-Está bien, vamos- dice levantándose y cogiendo una camiseta de su armario.

-Te espero abajo- digo mientras paso a través de la ventana.

Cinco minutos más tarde, Peter y yo estábamos de camino a la feria.

MJ •Spider-Man/Peter Parker•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora