¡Sorpresa! Nueva Bea aqui

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Capitulo 3

-Despierta Bea- Sentí un pequeño zamarreo en mi hombro derecho y me gire sobre mi cuerpo para hacerle frente a aquella persona que molestaba mis tan preciados y profundos sueños. De apoco abrí los ojos, con la vista un poco borrosa todavía, y vi a mi madre arreglada con su valija en mano.

-EL VIAJE- pensé y me levante como un rayo, ella soltó una leve risa y giro sobre sus pies abandonando la habitación para dejar que me arreglara.

La noche anterior me había bañado para ya estar lista, por lo que me dirigí al baño cepille mis dientes y peine mi cabello en una coleta. Me puse un top blanco con puntilla que mostraba el arito turquesa de mi ombligo –el cual mayormente ocultaba- pensé al mirarlo para que luego mi yo interior saliera a la luz diciéndome a gritos VIDA NUEVA, BEA NUEVA; me mire al espejo y decidí que no me haría daño mostrar mi plana y decorada panza. Luego me puse unos shorts de mezclilla tiro alto y mis Vans turquesas que iban a juego con el arito de mi ombligo.
Abrí el bolso de mano ya preparado y saque el kit de maquillaje. Me puse las cremas humectantes que solía usar y la base adecuada para mi bronceada pero no tan morocha tez de piel. También me delinee los ojos «bastante», un cambio que me gusto ya que no acostumbraba a pintarme más que sombras o un delineado fino. Pinte mis labios de un fucsia algo llamativo que iba a la perfección con mi vestimenta, me mire por última vez muy satisfecha y salí del baño con el bolso de mano otra vez acomodado. Tome las valijas de mi habitación, mirando melancólicamente el vacío que era mi dormitorio, pensando en cuan decorado y lleno de porquerías estaba hasta hace unas semanas.
Baje las escaleras para encontrarme con mi madre y mi padre sentados en el desayunador de la cocina tomando sus respectivos cafés. Me uní a ellos que me dieron una gigante sonrisa.
-Toma, hemos comprado un latte para ti mientras te arreglabas- dijo mi padre entregándome la taza descartable de Starbucks, idéntica a la de ellos.
-Gracias- Dije y le di un gran sorbo.  Dulce de Leche Latte, mis padres siempre sabían cómo alegrar mis mañanas.
-Repentino cambio, eh?- Dijo mi madre sonriendo.
-Si, cambiar no hace mal- Le sonreí devuelta.
-Me gusta, te ves bella- me comento y yo solo sonreí apenas.

Después de unos minutos tomamos un taxi hasta el aeropuerto. Como de costumbre mi madre charlo con el taxista todo el recorrido.
Por fin habíamos pasado por esas enormes puertas y ahora estábamos registrando unos cuantos papeles. Ya me habían sacado 2 fotos de identidad y me habían hecho varias decenas de preguntas sobre el viaje y nuestra estadía. Por suerte mi madre me había explicado todo lo que tenía que decir, así que me fue muy fácil responder todas las preguntas realizadas.
Nos dirigimos a los asientos de espera para abordar el avión, quedaban unos 45 minutos hasta que nos llamaran, por lo que dimos un paseo. Mi madre nos arrastró a mi padre y a mi hacia un pequeño bar de espera en el que podían ir amigos y familiares a despedirte. A mis amigas ya las había despedido ayer y a mi familia, bueno mi familia es pequeña solo tengo una tía que está de viaje por Tailandia, mis abuelos paternos que también están de viaje en Cancún y mi abuela materna que paso la tarde de ayer con nosotros, por lo que solo tomaríamos algo ya que nos habíamos despedido de todos.

Llegamos al bar y me sorprendí al ver dos idénticas cabelleras castañas que me resultaba muy conocidas. Chad y Dylan, por detrás de ellos pude ver a mis tres mejores amigas charlando entre ellas.
Me miraron con sus gigantes sonrisas sobre sus rostros y corrí hacia ellos para abrazarlos, previamente dándoles una sonrisa a mis padres.  
A medida que me acercaba vi sus caras tornándose un tanto confusas, exceptuando a Dylan que ahora sonreía aún más que antes, mire para atrás solo para verificar si me observaban a mí o que era lo que tan atontados los dejaba, una vez a solo cuatro metros de donde mis amigos se encontraban mi cabeza me grito ¡TU APARIENCIA!
Mi subconsciente comenzó a desesperarse y frene mi caminata rápida para quedarme totalmente petrificada Oh mi dios fue lo único que mi cabeza decía una y otra vez. Ellos se acercaron de apoco hasta que esos cuatro metros se hicieron uno. Dylan seguía con esa sonrisa que no lograba interpretar mientras que Brook, Stella y hasta Anne me miraban extrañadas.
-No me miren asi que no soy ningún bicho raro- Dije pareciendo seria aunque no afectada ante sus extrañas miradas.
-Oh mi dios, el bicho habla- bromeo Chad tocando asquerosamente mi brazo y luego me dio una sonrisa.
-Wow- Fue lo único que Anne dijo
-Mírate, estas hermosa- dijo Stella sin poder creer la apariencia que lucía.
-¿Cómo es que jamás pude ver ese arito desde que te obligue a hacértelo y ahora cuando te vas mágicamente reaparece? ¡Ni hablar tampoco de tu maquillaje!- Reprocho Brook para que todos riamos a continuación.
Nos sentamos en una mesa y conversamos un rato. Dylan me miraba y seguía sin despegar esa radiante sonrisa de sus labios, esos labios color fresa que derretían a cualquiera. Le hice señas con mis ojos, para entender que era lo que le sucedía; el sacudió apenas su cabeza para que nadie más que nosotros dos lo notara y sonrió con su mirada fija en la mía.
Los minutos se pasaron rapidísimo y ya quedaba poco para ser llamados por los parlantes. Mis padres estaban muy entretenidos saludando a mis amigos, mientras que me deslizo a un lado con Dylan y le miro.
-¿Qué es lo que te está causando tanta gracia desde que llegamos? Juro que estoy volviéndome loca- Dije casi exasperada. Sin siquiera quitar su sonrisa dijo tranquilo
-Te ves hermosa- Dijo ahora mostrando sus dientes.
Quede en shock ¿QUEE? Por lo menos sabía que mis amigos me aceptaban de esta forma también.
No sabía que contestarle, el por supuesto que estaba hermoso.. ¡Como siempre! Pero después de guardármelo todos los años de nuestra infancia no pensaba decírselo, y menos ahora que me estaba yendo.
-Gracias- Fue lo único que pude decir y comencé a sentir mis mejillas enrojecer.

El pareció notarlo porque su sonrisa se había tornado más picara, por suerte Anne salvo el momento cuando grito –¡Abrazo grupal!- y se abalanzó sobre mí, así como el resto de mis amigos.

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 Siento muchisimo la demora, se que es Martes pero por la tarde no pude subirlo y cuando estaba haciendolo se me borro. De no ser por mi papi no podria estar subiendolo!
Perdon y espero que les guste..
En multimedia una foto de Dylan :)

Hasta el Lunes que viene!!

The Drummer Girl (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora