Capitulo 3

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Yennick

De vuelta a casa, el lugar donde estan todos mis recuerdos o al menos los mas importantes.

Salgo del avion cansado de tantas horas de viaje, solo quiero llegar a casa y dormir. Voy a recoger mis maletas para ir en busca de Abraham, mi madre insistio en que me recogieran. Paso por el area de seguridad, a lo lejos lo veo y me acerco a el. A cambiado mucho al igual  que yo, ya no somos los mismos niños que jugaban a las luchas o cualquier cosa trival.

-Bienvenido señor-me dice eduacadamente mientras toma mis maletas.

-Abraham no me digas señor no soy mi padre, aparte nos ganamos con dos años. Solo dime Yennick-digo, veo como se relaja.

Nos montamos en el coche y nos dirijimos a la gran mansion Russel. El camino es silencioso asi que trato de romper ese ambiente.

-Y dime como esta mi nana?-le pregunto, mi nana es su madre y hace un tiempo enfermo. Ella nos cuidaba a mi hermano y a mi desde que eramos unos niños.

-A estado mejorando, es una mujer fuerte-dice con una sonrisa triste.

-Sigues estudiando?-

-Si, pronto me graduo de derecho-dice orgullosamente.

-Felicidades, espero que despues de eso trabajes en la empresa-

-Al que deberia de felicitar soy yo se...-lo miro con una ceja levantada- Yennick, te has graduado antes y ahora vas a dirijir la empresa de tu familia-me dice mirando la carretera.

-Supongo que es un gran logro, pero ahora solo quiero llegar a casa y dormir-contesto mientras entramos a la residencia.

-Sobre eso...-dice nervioso.

-Dime que mi madre no organizo una fiesta-digo frustrado mientras tomo el puente de mi nariz.

-Era una sorpresa-

-Le dije que no queria sorpresas-bufo. Apaga el coche enfrente de la mansion.

-Entiendela, esta emocionada que su hijo vuelva a su hogar. Despues del accidente ella...-levanto una mano para que se calle, suspiro frustrado y bajo del coche. El imita mi accion y baja mis maletas, se posiciona a lado.

-Luce sorprendido-dice antes de seguirme a la entrada.

Al entrar lo primero que me recibe es el flash de una camara haciendo que mis ojos se cierren, trato de calmarme para no armar un show. Al abrir mis ojos veo como mi madre se me acerca con los brazos abiertos junto con esa sonrisa que no veia hace tiempo.

-Bievenido mi amor-dice tomandome en sus brazos, detras de ella viene mi padre.

-Bienvenido hijo-me dice mi padre dandome unas palmadas en la espalada.

Los invitados pronto empiezan a darme la bienvenida y a felicitarme por empezar a manejar la empresa de mi padre. Solo me limito a decir gracias y sonreir forzadamente.

Me disculpo de unas personas y me acerco a mi madre.

-Madre necesito ir a darme una ducha-le digo al oido.

-Claro hijo vamos-se disculpa y subimos al segundo piso.

Nos detenemos en mi antigua habitacion la cual compartia con mi hermano.

-Te espero abajo-me dice pero la detengo.

-Madre no voy a dormir aqui-

-Porque no hijo, es tu habitacion-dice confusa.

-Solo no quiero madre, hazme caso si?-le respondo frustrado.

-Esta bien dejame decirle a una de las empleadas que te acomode el cuarto de huspedes-

-No es necesario, solo quiero ducharme-doy media vuleta y me voy sin esperar respuesta.

La razon por la que no quiero dormir ahi son por los recuerdos que tengo con Elian, cuando vivia en Rusia tuve que cambiarme de departamento. Los recuerdos me atormentan al igual que ese maldito dia.

Entro al cuarto de huspedes y voy a darme una larga ducha, olvidandome que abajo hay una fiesta en mi honor.


Ya listo bajo para seguir con esta farza de fiesta, veo como todos hablan mientras toman vino. Al ver que nadie se a dado cuenta de mi presencia voy a la cocina por algo de comer. Empiezo a tomar lo primero que veo para introducirlo en mi boca, tomo una copa de vino para pasarme todo esa comida.

Y entonces la miro.

Veo como aquella chica sirve agilmente vino en aquellas copas, ese vestido realmente le queda bien y hace resaltar su piel morena. Sin quitarle la mirada de encima veo como deja la botella de vino y voltea a verme.

-Se le perdio algo?-me dice algo molesta.

-No-contesto cortante dandole un sorbo al vino.

-Entonces deje de mirarme-contesta dandose la vuelta y vuelve a servir vino.

-Trabajas aqui?-pregunto, suspira y vulve a dejar la botella.

-Si-contesta entre dientes.

-Enserio si apenas eres una niña-comento viendola de arriba hacia abajo, aunque no lo parece .

-Disculpe?-dice con el seño fruncido.

-Dime, cuantos años tienes ¿12? ¿13?-pregunto tomando un bocadillo, apesar del color de su piel veo como el color rojo empieza aparecer en sus mejillas.

-Mire porque mejor no se guarda sus estupidos comentarios y se los mete por...-se calla cuando ve a mi madre entrando a la cocina.

-Hijo todos te estan esperando-dice mi madre, veo aquella chica y casi me rio al ver su cara de sorpresa. -Gade todo esta bien?-le pregunta mi madre.

Gade... no se porque me suena.

-Si señora-responde

-Entonces ve a ofrecer mas bebidas-le dice mi madre, ella solo asiente y toma una bandeja de copas.

La sigo con la mirada hasta que la pierdo de vista.


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