●Capitulo 3●

512 37 1
                                    

Zayn iba a dar un paso hacia el salón, pero se vio detenido por Nathaniel que, repentinamente, se abrazó a la pierna escayolada. ________ estaba llenando el fregadero de agua y no se percató.

—Suéltame, niño.

—No —sonrió Nathaniel, mostrando sus blancos y diminutos dientes. Aunque no le estaba haciendo daño, Zayn tenía miedo de dar un paso con el niño enganchado a la escayola.

— Suéltame —repitió, irritado. Pero el niño no le soltó. Se limitó a fruncir el ceño, como si intentara imitarlo.

_________ se volvió entonces y ahogó una exclamación.

—¡Nathaniel! Cariño, suelta al señor Malik.

—Papá —dijo el niño entonces, apretándose con fuerza contra la escayola.

Esa palabra, pronunciada por aquella vocecita infantil, fue como un cuchillo en el corazón de Zayn. Intentando apartar de sí el dolor, dio rienda suelta a la furia que utilizaba siempre como escudo.

—¿Quiere apartar a este niño de mi pierna?

—Lo estoy intentando —dijo _______, abochornada. Intentaba apartar los bracitos de su hijo, pero Nathaniel se negaba a soltar la escayola— Quizá si usted lo toma en brazos…

—Sí —exclamó el niño, mirándolo con sus ojitos redondos.

Zayn no quería tomarlo en brazos. No quería sentir el cuerpecillo de aquel niño entre sus manos. Pero tampoco quería pasar el resto de su vida atrapado en la cocina.

Suspirando, se inclinó y lo tomó por la cintura, haciendo un gesto de dolor cuando intentó cerrar la mano izquierda. Nathaniel soltó la escayola inmediatamente y le rodeó el cuello con los bracitos.

Zayn intentó no sentir nada, intentó no experimentar la sensación de estar abrazando a un niño pequeño. Pero era imposible no oler la colonia infantil, imposible no sentir que su corazón se calentaba al tocar aquel cuerpo diminuto.

—Tome al niño —le dijo a _______— Tómelo y váyase.

—Pero los platos… —empezó a protestar ella, mientras intentaba quitarle a Nathaniel de las manos.

Estaba tan cerca que Zayn podía respirar su olor. Si quisiera, podría inclinarse y besar su nariz pecosa. Si quisiera, podría tomar aquella boca entreabierta. Pero, por supuesto, eso era lo último que deseaba.

—Ya ha hecho más que suficiente. Yo limpiaré los platos.

Quería que se fuera. Y, sobre todo, quería que se fuera el niño. No había sitio en su vida para alguien con tantos sueños idealistas.

Había algo en ________ que lo hacía pensar en besos apasionados y dulces. Había algo en _________ y su hijo que lo hacía recordar viejas esperanzas, sueños casi olvidados.

—¿Seguro que puede hacerlo usted? —preguntó _________, levantando la voz para hacerse oír entre los gritos de Nathaniel.

—Claro que sí. Voy a echarme un rato y después llamaré a María para que vuelva. No pasa nada, estoy bien.

__________ buscó las llaves del coche en su bolso.

—Estamos en el hotel Masón Bridge, si necesita alguna cosa. Por favor, no dude en llamar si puedo hacer algo para que la convalecencia le resulte más agradable.

Zayn asintió. Lo mejor que podía hacer era desaparecer de su vida.

—Adiós, ________. Que sea feliz —dijo, entre dientes. Cuando ella desapareció, dejó escapar un suspiro— Por fin.

"Only a Kiss" ➳ Z.M.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora