Capítulo 4

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Paso una semana desde que llegue a la ciudad de México. Una semana intentando encontrar a Alonso sin tener éxito. Intente visitar todos los cines y los centros comerciales, sin embargo son tantos que mientras busco en un lugar él podría estar en otro, la extensión de la ciudad me dificulta mucho la búsqueda. Siempre que puedo voy a la dirección y si la oficina se encuentra sola aprovecho para dar un vistazo a los nombres de las listas en los otros salones, pero nunca las reviso completas por miedo a ser descubierta. Incluso intente hablar con Jos, pero eso tampoco salió como esperaba ya que no puedo preguntarle tajantemente donde esta Alonso, por suerte él no parece recordar nada de lo que paso, no estoy segura de si eso es una buena o mala noticia, pero creo que es algo que puedo manejar.

Afortunadamente no he tenido que lidiar con el fastidio que resulta ser la alumna nueva, no tengo que preocuparme con eso ya que Ana está conmigo en todas las clases, conmigo y con Jos, aunque a decir verdad más con Jos que conmigo pero no la culpo porque quien podría hacerlo a un lado.

Mi primera clase es química, así que tengo que ir al laboratorio. Me toma cinco minutos encontrar la sala adecuada pero me siento satisfecha en cuanto veo el familiar rostro de Ana en el salón de clases. Me dirijo hasta el lugar en donde ella se encuentra para sentarme en el puesto disponible a su lado.

—Por fin conocerás al profesor Widget—dice a manera de saludo.

La semana pasada el profesor no llego a clases así que tuve una hora libre para buscar en los otros salones a Alonso, pero no puedo hacer mucho con Ana a mi lado todo el día.

—Espero sea tan bueno como dicen.

—Llego Jos—dice ignorándome por completo.

Mi mirada viaja hasta la puerta del salón. En ese instante, la resolución cae sobre mí, pesada, como un bloque de concreto.

— ¡Dios mío! —exclamo en un susurro bajo.

— ¿Qué? —dice Ana.

—Él, ese chico—mi voz sale en un susurro tembloroso e inestable.

— ¿Qué pasa con él? Es Alonso.

—Es muy guapo.

—No Camila, ni lo sueñes—susurra—. Alonso esta perdidamente enamorado de Emily.

— ¿Quién es Emily?

—Es amiga de Renata, tal vez la viste ya. Es alta y delgada, de cabello oscuro y siempre suele llevarlo tejido en una trenza francesa—comienza a describirla y de inmediato la imagen aparece en mi mente. Hace dos días fue a casa y se quedó toda la tarde—, usa anteojos, el color de su piel es cálido. Todos piensan que es linda.

— ¿Cómo es ella? —digo—. Me refiero a, ¿cómo es su forma de ser?

—No tengo mucho trato con ella, pero por lo que Alonso platica es bastante tímida como para tomarlo de la mano sin sonrojarse.

— ¿Son novios?

—No—dice y una extraña sensación de alivio me invade por completo—. Pero si salen juntos, es como si fueran novios, pero sin el título. Son bastantes tímidos, Alonso no se atreve a pedirle abiertamente que sea su novia y ella parece bastante paciente para esperar a que Alonso tome el valor para pedirle que sean pareja.

— ¿Qué tanto puede durar su paciencia?

—Camila es enserio—dice firme—. Alonso no es para ti.

Antes de CD9 [correcciones]|Alonso Villalpando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora