Los primeros días del viaje fueron tranquilos, mientras marchábamos solía aburrirme así que discretamente le hablaba a Sardo para que el camino fuera mejor, obviamente cuidando que el general no nos escuchara.
—Psst, Sardo, oye! —le susurraba, mientras observaba al general de reojo—. ¿Como te sientes hoy? ¿No tienes hambre?.
—H-hoy me siento bien g-gracias, y tu? —dijo Sardo, algo nerviosa—. P-pero Brigitte acabamos de almorzar hace unas horas, ya tienes hambre tan rápido? —susurraba, mientras se mantenía en marcha.
—N-no,no, pero te note algo enferma, llevamos marchando todo el día y la verdad a mi no me molestaría comer una manzana.
—Gracias por preocuparte pero en serio estoy bien, solo estoy algo cansada.
—Falta poco para detener la marcha y acampar, aunque sigo pensando que ojala nos dieran manza...
No terminaba de decir la frase cuando el general ya estaba gritando por todas partes.
—Atención,firmes!, ya!!! —dijo el general, en un tono muy alto.
El general nos observo durante unos segundos y empezó a señalar a varios de nosotros, al final eligió a dos chicas y dos chicos, oh eso creía.
—"Pff, menos mal que me salve, y tampoco eligieron a Sardo, que alivio" —me dije aliviada.
—Oye tu, la pelirroja con cara despreocupada, ven para acá —dijo el general, con la mirada fija en mi.
—Q-q-que!!!, n-no, yo? seguro es un error señor, n-no,noo —dije, mientras evitaba el contacto visual.
—Acaso insinúa que estoy equivocado soldado?!!! Que venga le estoy ordenando ya!!!
—S-si, señor, le suplico que perdone mi falta de respeto —respondí, mientras me mantenía firme y derrotada.
—Bien, como verán estos soldados de aquí se han ofrecido de voluntarios para la guardia de esta noche, agradezcan su heroico esfuerzo —decía el general en tono de burla, mientras nos apuntaba a nosotros.
Varios del grupo nos felicitaban con tonos de burla, mientras que pude ver a unos pocos entre ellos Sardo con cara de preocupación.
Al caer la noche montamos el campamento, platicamos, cenamos, reímos todos juntos como si nada hubiera pasado, observe a Sardo y le platique que todo iba a estar bien, que no se preocupara demasiado, le dije que descansara porque le haría falta para el amanecer, ella solo sonreía mientras asentaba con la cabeza.
Cuando ya estaban todos dormidos, los 5 de la guardia dimos un recorrido por nuestros sectores y al final nos reunimos en la fogata y empezamos a charlar.
—H-hola, hmm, c-chicas, que tal el patrullaje? —dije, algo confundida.
—No recuerdas nuestros nombres cierto? ya deberías recordarlos Brigitte —dijo la chica mientras me observaba.
—L-lo siento, es que suelo olvidar si no los frecuento mucho pero no volverá a pasar
—Me llamo Nina, recuerdalo y por cierto ¿porque dices chicas si solo estamos nosotras dos y los chicos?
—No,no, también esta ella mira —respondí moviendo mi mano en dirección donde se encontraba la chica.
—Yo no soy mujer Brigitte, soy hombre me llamo Jake —dijo el chico, con el tono de su voz algo molesto.
—Eh?, Q-que!! Lo lamento, p-perdón te confundí no era mi intención es que sin tu casco pareces mujer
—Y tu pareces hombre cuando llevas armadura
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El Imperio Greytiliano
FantasiaEn un mundo donde incesantes guerras dominan cada rincón de la tierra, una chica cansada de este podrido y oscuro mundo, decide iniciar una lucha contra la tiranía del imperio que gobierna el mundo para ponerle fin y llevar el orden allá donde hay c...