El Día Perfecto (Romanogers 2) #Terminada

Capítulo 1

THOR "ODINSON"
-Banner, desde que te fuiste han pasado muchas cosas...-digo nervioso.

-Lo sé, han pasado 2 años que he estado convertido en el otro, entiendo que hayan pasado cosas...-replica él.

-Sí, pero las cosas que han pasado son mucho más diferentes a lo que tú estás pensando...-añado mientras aparco el yet de SHIELD en la plaza que me han otorgado.

-¿Te refieres a Natasha?-pregunta él triste.

Yo asiento como respuesta. Voy a empezar por algo suave.

-Ella es hija de Stark.-digo creando que reaccione abriendo los ojos como platos y me mire sin entender.-Y la madre de ella nos atacó e intento matarla.-añado.

-¿Pero todos están bien?-pregunta nervioso.

-Sí, sí, están genial, eso pasó ya casi hace un año...-respondo.-De hecho, mañana hará un año exacto.-añado recordando.

-¿Por qué te acuerdas del día en que pasó? Digo, hemos hecho muchas otras misiones y ni yo me acuerdo del día.-replica él confuso.

Yo me pongo tenso y nervioso a la vez. No quiero que haya un código verde si le cuento todo.

-Bueno... Un año es muy reciente para mí.-contesto con rapidez.

-Oh, bueno, vale. ¿Ha pasado algo más en el tiempo que yo no he estado?-pregunta preocupado.

-No, nada importante.-respondo.

Bueno, a no ser que considere importante que Nat se va a casar con el Capitán, que han adoptado a un chico y que han tenido una hija, no, nada importante en ese último año.

-Bien, pues entonces tengo ganas de verlos...-añade Banner triste.

-Lo siento pero hasta que nos aseguremos de que eres estable y no te volverás el otro en cualquier momento, tienes que quedarte en SHIELD.-respondo suspirando.

-Lo sé, lo he pedido yo. No quiero hacer más daño a nadie...-responde sin ganas algunas.

Una vez entramos dentro del edificio de SHIELD, me despido de Banner y él se va acompañado por agentes hasta un pequeño recinto que es un laboratorio para que al menos se entretenga, aunque sí se vuelve Hulk, me da que todo el laboratorio acabará destruido.

PETER PARKER/ ROGERS ROMANOFF
-Hola, señorita Romanoff.-dice Ned ilusionado.

-Hola, Ned. Por favor, llámame solo Nat.-responde mi madre guardándose las llaves y el móvil en el bolsillo de su chaqueta.

Ella lleva insistiendo en que la llame así todo un año, pero Ned le tiene demasiada admiración.

-Hola, Capitán.-dice ahora Ned saludando a mi padre.

-Hola, Ned. A mí llámame solo Steve.-replica ahora él.

-No puedo, son demasiado importante como para llamarlos así...-se queja Ned.

-Bueno, Peter, cielo, nos vamos a comprar la tarta de cumpleaños para Mya, volveremos rápido.-dice mi madre nerviosa.

-Claro, mamá, no te preocupes, yo me encargo de ella.-digo mirando la gran cuna blanca en la que está Mya metida mientras duerme plácidamente.

Ella está enorme, mide unos 74 cm, tiene el pelo bastante largo y dorado. Sus ojos son azules como los de sus padre y no para de reír. Ya casi anda sola, pero le da miedo caerse así que le gusta sujetarse de la mano de alguno de nosotros para sentirse más segura.

En este último año hemos cambiado mucho todos. Mi padre ahora se ha dejado el pelo un poco más largo y lleva barba, mi madre ahora es rubia y tiene el pelo un poco más corto, a la altura de sus hombros, y yo, yo solo he crecido 2 centímetros, pero en lo que a físico se refiere, no he cambiado nada.

En 2 meses se casan nuestros padres, y la verdad es que todo va genial. Todos tenemos ya la ropa que llevaremos a la boda. Mi madre no es que sea muy religiosa, pero mi padre sí, así que a ella le da igual y se casarán por la iglesia. Mya lleva un vestido hecho con la misma tela que el de mamá, y yo llevo un smoking parecido al de papá, según ellos, así se demuestra mejor quienes son los 2 hijos.

Mi abuelo, me está enseñando todo sobre Industrias Stark para que le ayude cuanto antes. Ahora ya tengo 16 años, así que empiezo a dirigir una parte de las Industrias con ayuda de Pepper. Luego seré yo quien le enseñe todo a Mya, pero por ahora me han dicho que aprenda todo cuanto pueda, pues Mya cumple 1 año mañana, y aún queda para que pueda dirigir la empresa.

Mya es muy cariñosa. No para de abrazarnos a todos, y ella duerme conmigo por las noches, les pedí a mis padres que fuese así. Quiero ser un buen hermano para ella.

Me despido de mis padres y me quedo con Ned y Mya dormida.

Ned y yo hablamos de tonterías sin sentido por 10 minutos hasta que oigo un pequeño ruido en la cuna. Me levanto de la mesa y voy hacia ella sigilosamente. Allí veo a Mya sentándose en la cuna y mirándonos.

-Tete.-dice ella sonriente.

-Al parecer alguien se acaba de despertar...-digo sonriente cogiendo en brazos a Mya.-Buenas tardes, enana.-añado creando que ella ría y me abrace.

-¡Ed!-grita al ver a Ned por encima de mi hombro. Ella le llama así, Ed.