Courtney ©

Capítulo tres

No tengo idea de donde estacionar el carro, hay muchísimas fans afuera del hotel y es imposible pasar por esa calle, logro ver como salen guardias intentando tranquilizarlas y mantener el orden, pero son tantas, que tres personas son insuficientes. Me giro para ver a mi amiga nerviosa, ella levanta los hombros en forma de respuesta y es cuando empiezo a preguntarme la razón de porqué la traje, no está ayudando en nada.

Decido colocarme un poco alejada, pero es el único lugar disponible que encontré, al apagarse el motor, bajamos del vehículo y emprendemos camino a la entrada, mientras suplico que no ocurra ningún inconveniente y me permitan la entrada. Tengo entendido que Marc habló con los trabajadores del hotel para avisarles que mi representante y yo, asistiríamos, por lo cual, debo entrar sin problema.

Tomo de la mano a Raven para no extraviarnos entre las chicas que están presentes, una chica se gira y posa su vista en mí por varios segundos, como averiguando si me conociera de algún lugar, luego se gira tocando el hombro de la persona de enseguida y de un instante a otro, estoy en la mira de todas. Miro la puerta que está a unos metros de distancia y apresuro el paso, pero nos resulta imposible, a Raven y a mí, seguir avanzando, ya que nos encontramos rodeadas de varias chicas haciendo diversas preguntas y como hablan a la vez, no logro entender lo que dicen. Intento sacar mi celular del bolsillo de mi chaqueta para llamar a Marcy decirle lo que está ocurriendo, pero no puedo ya que estoy siendo aplastada por ellas, lo único que puedo hacer es sujetar con fuerza a mi amiga para no perdernos.

Segundos después logro divisar a un hombre pidiendo que nos dejen en paz y de algún modo, nos logra sacar de ahí y con su ayuda, logramos entrar a la recepción. Nos ve por unos segundos y verifica algo en su móvil, al hacerlo, me indica que me están esperando en la sala de juntas, del último piso, agradezco y aún tratando de entender lo que acaba de ocurrir empezamos a caminar hacía allí. Raven presiona el botón para que llegue el elevador, al hacerlo entramos y de nuevo es ella, quien presiona el número 10, las puertas se cierran y dejo que mi cuerpo recargado en la pared anonada por lo que sucedió.

—¡Mi mejor amiga ya es famosa! —grita Raven demasiado feliz. Yo la miro estupefacta al darme cuenta que la única desconcertada soy yo.

Las puertas se abren, salimos y con rapidez encontramos la sala, pero antes de entrar, le pido a mi amiga que me observe para averiguar si mi aspecto sigue igual a cuando salí de casa, acomoda un poco mi gran cabello rizado y sonríe indicando que estoy lista, hago lo mismo con ella y tocamos la puerta para que nos permitan la entrada, al escuchar la voz, que identificaría donde sea, indicando que pasemos, trago saliva y comienzo a repetirme varias veces que debo comportarme normal y no hay razón para ponerme nerviosa. Entramos a la enorme habitación y lo primero con lo que mi vista choca, es con la de Sean, el cual está mirándome con una gran sonrisa, se pone de pie y camina para llegar a donde me encuentro.

—Hola —saluda estrechando su mano con la mía y hace lo mismo con la de Raven —Nos enteramos que tuvieron algunos problemas afuera.

—Sí, algunas chicas nos encerraron entre la pared haciéndonos preguntas que no entendía, logramos salir con ayuda de un guardia—informo tomando asiento delante de Sean y en seguida de él se encuentra Marc— . Espero que no les moleste que haya invitado a Raven.

—No, para nada, es un placer tenerla aquí —dice el representante del cantante con una sonrisa— , pero bien, tengo entendido que ya revisaste el contrato con Oliver ¿no?

Afirmo con mi cabeza al mismo tiempo que lo hace Oliver.

—¿Alguna inconformidad o modificación que quieran realizar antes de firmar?

Richards me ve para averiguar si tengo algo que comentar, pero solo niego, indicando que estoy de acuerdo en todo lo que dice. Ese contrato es el más perfecto que han visto mis ojos, hay demasiadas cosas que me benefician a mí, como que tendré mi propia casa durante los meses que duraré en Ontario, también tendré todo mi viaje pagado hacía allá y otras cosas más que me hacen alucinar.

—Todo en orden —digo emocionada por firmar.

—Perfecto. Entonces, Sean firma aquí —le señala donde, después lo hace él y lo coloca frente a mí indicando donde debo hacerlo yo también, veo por unos segundos el garabato del chico, gritando en mi interior porque mi firma va a estar en seguida a a la de él.

En cuanto Oliver le devuelve las hojas a Marc, solo quiero ponerme de pie para gritar como nunca, me giro a ver a Raven, percatándome que se encuentra del mismo modo que yo. Lo único que podemos hacer, es autocontrolarnos y seguir comportándonos de manera correcta.

Cada representante guarda las hojas en su portafolio con sumo cuidado y Marc al terminar de hacerlo, comienza a buscar algo en el. Imagino que son los boletos, ya que en dos días inicia la gran aventura, confirmo que tengo razón al ver como los saca y me los entrega, dándome todas las indicaciones necesarias, cuando termina de hablar, ya no puedo soportar más, es necesario ponerme a gritar. Voy a viajar a Ontario junto a Sean y ambos iremos en el mismo vuelo, con asientos consecutivos. Es una completa locura, aunque me repito de manera constante que es real y no es un sueño, sigo sin creerlo por completo y Raven no me ayuda mucho, ya que cuando volteo a mirarla, ella se encuentra congelada con su vista puesta en los boletos que hay frente a mí.

Le había pedido a Raven que me acompañara para no hacer ninguna tontería y hacer lo posible para actuar como normalmente lo hago, pero no está ayudando en nada, yo sola debo controlarme en todo y sé que Olive se está burlando por como nos encontramos mi amiga y yo.