Cierro la puerta con la pierna, debido a que traigo las manos ocupadas con varias frituras, pero aunque Raven me ve, no se levanta de la cama y sigue buscando algo interesante en Netflix. Toso para darle a entender que me ayude, lo único que hace es verme unos segundos y luego vuelve su vista al televisor, ruedo los ojos y lanzo todo a la cama para luego subir a ella y acomodarme a un lado de mi amiga, abriendo una de las bolsas y empezar a comer, estira su mano para intentar agarrar, de inmediato me alejo negando con la cabeza, provocando que me mire sorprendida ante mi actitud, no dice nada y toma otra bolsa para poder comer.
—Espero que April venga y te vea comer toda esa bolsa.
Cuando termina de hablar, suelto la bolsa decepcionada de ya no poder seguir comiendo. Mi entrenadora es bastante exigente respecto a mis alimentos, por supuesto que de vez en cuando puedo comer algunas cosas que no se encuentran en mi dieta, para ello, solo tengo disponible un día y no debe de ser en gran cantidad, pero acabo de firmar un contrato y debo encontrarme en perfecto estado, por lo cual, si April llegara a verme me quitaría las frituras y las tiraría a la basura frente a mis ojos. Al inicio de todo eso, fue algo complicado, pero al darme cuenta que tener un régimen alimenticio me ayudaba a estar mejor en salud y el baile, todo se volvió más sencillo.
—Eres la peor amiga de todas —digo arrebatándole el control remoto para apagar la televisión.
Me pongo de pie y camino hasta mi armario para iniciar mi búsqueda del atuendo que usaré esta noche en mi despedida con amigos. Decidieron organizarme algo, debido a que me iré de la ciudad por un tiempo y quieren despedirse como se debe. Emborrachándonos y haciendo cosas que probablemente nos arrepintamos a la mañana siguiente con un dolor de cabeza y ganas de morir.
—Cuando fuiste por las frituras, agarré tu celular...
—¿Y?
Pregunto desconcertada, eso no es nada fuera de lo común, es algo que hemos hecho desde siempre, conocemos a la perfección la contraseña de la otra.
—Le envié un mensaje a Sean para invitarlo a la fiesta y dijo que si.
Me quedo estática mirando la ropa, siento como empiezo a arder y me giro con lentitud para verla con inmensas ganas de querer asesinarla.
—¿Qué hiciste qué?
—Me escuchaste, no voy a repetirlo de nuevo.
Y es en ese instante en que grito con una intensidad sorprendente, provocando que mi amiga se cubra los oídos con las manos y se levante de la cama con rapidez para alejarse lo mayor posible de mí. Lo único que puedo pensar es una manera para esconder el cuerpo y nunca lo encuentren.
—En mi defensa, tu dijiste que lo querías de amigo y es con alguien que vas a trabajar durante un tiempo, deben llevarse bien, aparte, él dijo que estaba encantado de asistir, no tuve si quiera que convencerlo, ya hasta había planeado varias ideas para decírselas si se negaba.
Mi cabeza se encuentra procesando lo que acabo de oír, tengo tantas opiniones en este momento que no tengo idea de como actuar. Siento que puede ser algo bueno, de esa forma tal vez mis nervios empiecen a calmarse y por fin me comporte con normalidad, en cambio, viéndolo desde la peor perspectiva, es que va a conocer a todos mis amigos y absolutamente todos, saben que él es famoso, podría crearse un caos si más gente descubre que se encuentra aquí, existirían miles de teorías y comentarios al respecto. Sigo sin estar lista para ello, mañana mismo en la noche iré a vivir a Ontario y sé que eso provocará demasiadas cosas positivas como negativas, tantos chismes y yo sigo sin encontrarme preparada.
—Cada persona que vaya llegando le vamos a quitar el celular... —hago una pausa pensando— más bien, énviales un mensaje a todos de que está prohibido traer su celular, si lo hacen, se los vamos a quitar en la entrada. Si quieren fotos, tú las vas a tomar.
—¡¿Y por qué yo?!
—¡Porqué tu provocaste que entrara en esta crisis!
—Estás exagerando, todos son personas cercanas, no va a ocurrir nada si toman videos o fotos y las suben a internet, nadie nos conoce a nosotros.
—Si entiendes que el fandom es como el FBI ¿verdad? ¡Si hay algo mínimo de Sean, van a saberlo!
—Cierto, muy cierto —comienza a buscar su celular preocupada— Ya mismo les envío mensaje a uno por uno. Yo estaré en la entrada revisando que nadie traiga celular... no debí de ver invitado a Sean.
—Pero lo hiciste y no le vamos a cancelar...
—¿Acaso crees que pueda ocurrir algo entre tú y él hoy? —me pregunta curiosa y de manera juguetona.
Desde que le comenté que había tomado la decision de solo ser amiga de Sean y dejar todo lo demás atrás, no ha parado de reírse en mi cara e intentar que cambie de opinión ya que dice que es una locura que teniendo al amor de mi vida frente a mí, no intente nada para conquistarlo, ella lo ve de esa manera y yo lo hago de otra totalmente distinta y mucho más razonable.
—Entre Sean y yo no va a ocurrir nada, solo una amistad y espero que sea muy bonita.
—Como los próximos hijos que tendrán juntos.
—¡Raven! —grito regañándola y me ruborizo al imaginarlo.
—Le llamas demasiado la atención y lo sé porque he visto como te mira y trata, sin ignorar como se comportó cuando vino a comer con su familia aquí.
—Solo fue amable.
—Solo te estaba coqueteando y tu como estás atrapando moscas, ni cuenta te das. Ya verás está noche como es que tengo razón.
Una parte de mí ruega que lo que dijo Raven sea verdad, en cambio la otra se encuentra suplicando que no sea así, porque ser amigos es mucho más sencillo.
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Courtney ©
RomanceCourtney es una gran fan de Sean Keleht, así que cuando le llega la noticia de que habrá un concurso para bailarines y que el premio será salir en un video musical de él, no lo duda ni un segundo y se inscribe, lista para dar todo de si misma en el...