Charla

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Ya eran las siete de la tarde y todo estaba casi listo, así que dejo a Dinna ultimando detalles y subo a prepararme para estar presentable.

Llamo a Jay para saber si va a venir ya que está cabreado conmigo por el beso que me dio Luke y obviamente lo entiendo pero yo no tuve la culpa de que Luke se lanzará y me besará casi delante de él, aparte que yo lo aparte de mi lo más rápido que pude.
Le expliqué mil veces a Jay que fue un mal entendido pero no quiso escucharme y desde hace unos días que no se digna a hablarme ni a contestar mis mensajes ni llamadas.

Me prepare y me puse mi vestido rosa palo y unas sandalias a juego, me hice unas pequeñas hondas en el pelo y me maquillé un poco más de lo normal, para verme un poco más mayor.

Para entonces ya eran las 9 así que me dispuse a bajar para ayudar a Dinna a preparar todo, pero al parecer ella ya se me había adelantado y tenía absolutamente todo arreglado, hasta el más mínimo detalle estaba echo.

-¿Como es posible que hayas hecho todo esto en 2 horas solamente?- La mire con sorpresa a lo que ella solamente me sonrió.

-Querer es poder- dijo y subió las escaleras rumbo a mi habitación para prepararse supongo.

Así que para calmar los nervios que tenía me preparé un cubata de 43 con red bull y me lo bebí entero casi sin respirar, me senté en el sofá y me limité a ver un punto fijo y dejar que el tiempo pasara hasta que llegara la hora de la fiesta y esto se animará un poco.

Tan solo pasaron 15 minutos cuando el timbre sonó, y me dispuse a ir a ver que pasaba, me levante del sofá, fui hacia la puerta principal y descolgué el teléfono, Dwayne habló al otro lado desde la entrada de la casa.

-Señorita Ely, aquí hay un grupo de chicos que dicen ser sus amigos y que vienen a la fiesta, pero según el horario que usted marcó la fiesta empieza hasta las 11

-Diles que digan un nombre- lo repitió con tono serio.

-Jackson.

-No, que no pasen, la fiesta es hasta las 11 y no conozco a ningún Jackson- en realidad si que conocía a varios Jackson's, pero simplemente no quería ver a nadie hasta las 11 que empezara todo, así tendría tiempo de relajarme.

Colgué el teléfono y el timbre volvió a sonar, descolgué y conteste algo irritada.

-Simplemente no los dejes pasar, si quieren entrar que esperen hasta las 11.

-Señorita, están insistiendo mucho y me han dicho que le diga otro nombre para ver si los deja pasar.

Me quede en silencio esperando que dijera el nombre, aunque en el fondo ya me lo esperaba.

-Jay- se hizo el silencio entre las dos lineas.

-Pues diles que sigan esperando que hasta las 11 estas puertas no se van a abrir, lo siento muchísimo pero esto es así para todos, ni un minuto más, ni un minuto menos- puse el teléfono en su sitio y volví al sofá y me senté.

Jay pretende que después de pasar días sin cogerme el teléfono y responderme las llamadas voy a dejarlo que entre hora y media antes a mi casa, pues va a ser que no, que aprenda que si el me ignora, no me contesta los mensajes ni nada, yo también puedo hacerlo y contestarle cuando me de la gana a mi.

Mi actitud puede que sea un poco infantil o lo que queráis, pero si el juega tengo que enseñarle que yo también puedo jugar y se que ahora mismo está echando humo por todos lados y intentando sobornar a Dwayne para que lo deje pasar.

Al cabo de unos minutos baja Dinna con su precioso vestido y unos tacones de infarto tan diva como solo ella puede serlo.

Al bajar todas las escaleras a una velocidad de miedo corre a la cocina y sale con una bolsa transparente con un contenido algo extraño y corre hacia la puerta corrediza que da al patio trasero, la sigo y me percato de lo que está haciendo, esparce el contenido de La Bolsa en la piscina poco a poco.

Salgo por la puerta y me hacerlo poco a poco a ella.

-¿Porque pones pétalos de rosas dentro de la piscina?- pregunto levantando una ceja en señal de pregunta y ella me mira con cara de desaprobación.

-Estoy creando un ambiente romántico y apasionado para las parejitas que puedan llegar a formarse esta noche, y que así puedan tener su rinconcito romántico- me mira fijamente con cara tierna y mueve sus pestañas parpadeando rápidamente- yo solo te recomiendo que mañana vacíes la piscina, la esterilices y luego ya si quieres la vuelves a llenar y le pones el triple de coloro de lo que suele tener, nunca se sabe lo que las parejitas pueden llegar a hacer en estos sitios- me sonríe y entra a la casa, a lo lejos escucho un fuerte grito diciendo "Que empiece la fiesta" así que entre en la casa y llame a Dwayne para que dejara pasar a todo aquel que viniera y que no le pareciera raro.

Por lo pronto solo entraron los amigos de Jay y el de ultimo, estos traían 4 barriles de cerveza, los colocaron en diferentes sitios de la casa y pusieron la música a tope del altavoz ya que eran las 10:45 y hasta las 11:15 el dj no llegaba para poder motivarnos más.

Me prepare otro cubata para calmar el león que tenía en la tripa de los nervios de ver a Jay.

-¿Podemos hablar?- se escuchó una voz a mis escaladas la cual podía diferenciar a 100 kilómetros de distancia.

Me giré poco a poco y lo vi a los ojos, mientras me miraba con ojos serios y penetrantes, apretaba sus manos en señal de que estaba furioso y quería relajarse pero le era imposible hacerlo.

-¿Quieres ir a mi cuarto?- simplemente asintió y yo pase delante de él para adelantarme.

Una vez allí estando los dos solos nadie articulaba palabra alguna así que me dispuse a sentarme, ponerme cómoda y esperar a que el empezara, porque el problema que teníamos...bueno el problema lo tiene el, así que hable el primero.

Elody Is The MelodyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora