A ti

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En aquello días cuando corrías por toda la casa y los juegos eran interminables y tú imaginación hiba más allá de lo creíble. éramos exploradores, esos aventureros que escapaban a escondidas por la mañana llevando en la mochila la alegría, la iniciativa a conocer un mundo diferente solo para nosotros, del amor de cuidarnos unos a otros, de llevar a cabo el conocimiento antes aprendido por el. El que en los pequeños momentos que nos dedicaba nos enseñaba a velernos por nosotros mismos, el que en sus muchas ausencias nos enseñó a cuidarnos, a acostumbrarnos a su ausencia. Hoy se que vives, que estás bien cuando escucho tu voz. Y aún a mi pesar en mis momentos de recordar nuestra infancia y tú imagen no tengo nada que reprochar fui feliz intensamente feliz. Y mis recuerdos son juegos, risas, aventuras, vivencias experiencia y amor.

remembranzasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora