Capítulo VI ( Sentimientos alborotados )

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| Nayeon |

Lucharé por ti...

Nayeon no supo cómo reaccionar, las palabras de Mina habían sido como un balde de agua fría directo a su rostro dejándola completamente congelada, pero algo tenía que decir, la rechazaría, definitivamente lo haría, no deseaba nada de ella y se lo dejaría en claro, por lo que tomó valor y comenzó a hablar.

— Yo...yo no soy un trofeo que no has podido tener, soy una persona con sentimientos que tú misma te encargaste de destruir, déjate de estupideces, Mina. — Nayeon ya un poco cabreada con algo de brusquedad quitó la mano de Mina de su rostro.

A Nayeon le hacía mal tenerla tan cerca, porque si bien por fuera no quería ni siquiera toparse con ella, por dentro, aunque no lo admitiría así como así; sus sentimientos eran todo un alboroto.

Mina sonrió, sabía que apesar de todo lo que decía Nayeon ella estaba confundida y nerviosa ante tal cercanía, por lo que nuevamente volvió a poner su manos sobre el rostro ajeno, pero esa vez su intención no fue acariciar su rostro, si no que en cosa de segundos acortó la distancia entre sus rostros y la besó.

Cuando los labios de Mina tocaron los de Nayeon por un momento su instinto le exigió que la alejara, sin embargo no lo hizo, dejó que ganarán los sentimientos y nostalgia de volver a besarla, porque a pesar de todo el tiempo que había pasado, en su interior tal como se lo dijo Jeongyeon, Nayeon aún sentía algo por ella.

Mina apegó su cuerpo al de Nayeon pasando sus brazos por el cuello ajeno y Nayeon para tenerla más cerca deslizó sus brazos por la cintura de Mina y allí estaban ambas teniendo un jugueteo entre sus labios y lengua y a pesar de que Mina quería un beso suave, la necesidad podía más y en vez de ser algo lento fue todo lo contrario, era algo apasionado al punto en que más de una vez los dientes de ambas chocaban, sin embargo aquello no las detuvo.

Pero lo que si prácticamente las obligó a parar fue el golpeteo en la puerta del baño, alguien quería entrar y aquello hizo que Nayeon entrara el pánico y su reacción fue poner las manos en el pecho de Mina y desde allí empujarla hacia atrás hasta que estuviera lejos de ella.
Su respiración estaba tan agitada que tuvo que llevar sus manos hasta su boca para tratar de calmarse y que así la persona afuera no las escuchara. Pasaron unos cuantos segundos y al parecer volvían a estar solas.

Nayeon para sus adentros agradeció la interrupción, porque si seguían a ese ritmo y encerradas, ella sabía que solo pasarían minutos hasta que ambas estuvieran en el suelo del baño completamente desnudas haciendo algo de lo que seguro después se arrepentiría.

— Mina... — Nayeon no sabía cómo decirlo, estaba un tanto nerviosa y un poco avergonzada. — No lo hagas.

— ¿Qué cosa?

— Ya sabes, eso...luchar por mi, no quiero que lo hagas, años atrás con tu partida algo se rompió en mi y si vuelvo a estar contigo nada bueno saldrá de eso, viviré con inseguridades y no quiero pasar por eso.

Mina la iba a interrumpir acercándose nuevamente hacia ella para de ese modo abrazarla, pero Nayeon rápidamente extendió su brazo para marcar distancia entre ambas.

— No, yo sé que el beso posiblemente te hizo creer que pasaria algo más, pero no es así solo me deje llevar por el momento, de verdad lo siento si te hice creer otra cosa, yo también estaría confundida, pero no volverá a pasar.

Nayeon, tomó sus cosas que estaban en el piso del baño, salió lo más rápido posible y evitando todo contacto visual con Mina, pero al momento de pasar por su lado antes de salir susurró un lamentable; lo siento.

Cuando iba saliendo del edifico una chica de rostro muy conocido paso por su lado e instintivamente se detuvo para de ese modo darse la media vuelta y asegurarse de que era exactamente la chica a quien conocía.

Como miel y abeja. MinaYeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora