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El Domingo era el día perfecto para hacer deberes. En la mesa ya estaban listos los libros y útiles de Sicheng, los cuales ocupaban toda la mesa. Dudaba que Yuta quisiera hacer la tarea junto a él y hasta dudaba que quisiera respirar su mismo aire.

-Dios, siempre pensando en ti mismo.- Llego el japonés hablando con la vista fija en la pared. Con poca delicadeza movió los cuadernos del contrario y se dispuso a acomodar los propios.

-Sé que estas molesto, pero eso no te da derecho a recriminarme por cualquier cosa.- Sicheng titubeó un momento.

No obtuvo respuesta alguna y tampoco la esperaba con ansías. Temía de un Yuta enojado, solo lo había visto irritado y ya le parecía horrenda su actitud.

Winwin intentaba leer un texto pero era notorio que no podía entenderlo. El sonoro ruido proveniente del golpeteo con su lápiz, mostraba su angustia por no entender.

-Necesito ayuda con...- Fue interrumpido por el mayor de una manera un tanto extraña.

-Sicheng, definitivamente necesitas ayuda.- Yuta soltó una risa nasal y sin expresión alguna leyó el párrafo de Sicheng.

Con intenciones claras, el japonés quería darle a entender a el chino muchas cosas. Sin embargo, no lo haría directamente.

-¿Algo mas?- Soltó Yuta con estrés pero en el fondo, si quería ayudar a su Winwin.

-No, gracias.- Sicheng inhalo muy fuerte y exhalo.- Hyung, usted es muy.- Se quedo callado al ver la mirada tan penetrante de Yuta.

El chino frunció el ceño y a paso lento se alejo de su hyung.

-El día en que me digas todas las cosas que te guardas, seré feliz y con suerte, seremos felices juntos.- Susurro el japonés para sí mismo y apreto la mandíbula con esmero, lo que menos quería era gritar e irritarse.

DokiDoki// Yuwin [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora