¿Escolta?

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El repiqueteo de la alarma me despierta, cuando era niño era muy difícil que me despertaran, mi madre trataba por todos los medios de levantarme de la cama, mi tío era el único que podía, maldito… ¡quien no se levanta cuando te arrojan un balde de agua fría!; esta mañana tenía pensado pasar por el centro y ver si me había llegado correo, no dejar que nadie se acerque al edificio tiene su lado negativo. Escucho a Erica dar vueltas en la cocina, después de todo tiene su lado bueno tenerla por aquí, me tomo una ducha rápida y bajo por un desayuno que calme el hambre que llevo, desperté de buen humor algo raro en los últimos días.

 Estas muy sonriente hoy. _comenta Erica intrigada.
 Solo estoy de buen humor.
 Eso es raro en ti. _me mira con interés _tienes planeada alguna atrocidad?
 Aunque te cueste creerlo también puedo estar de buen humor sin razón alguna. _comento sin interés.
 No me engañas, tú tienes algo entre manos. _comenta con más interés, de hecho si tengo pensado algo  qué hacer.
 No te metas donde no te llaman.
 Como quieras. _me dice con un gesto despectivo, a lo que respondí con una sonrisa.

Una vez en mi camaro no pude evitar sonreír, es raro que despierte de buen humor, pero creo que se debe al sueño de anoche, en el me encontraba en una habitación impregnada de hormonas en selo, lo más seguro de un adolecente, aunque con un dulce aroma a canela con un poco de menta, por una de las paredes se encontraba un mural de recortes de periódicos con unos hilos rojos que conectaban cada caso a un solo punto en común, me detengo a ver y analizar un poco, eran casos policiales no resueltos, no llegue a comprender nada; a un costado de la cama sobre la mesa de luz reposaba un libro abierto, paro para leer el párrafo subrayado “…si el amor del lobo es correspondido la bestia en su interior se aplacaría y la maldición retrocedería, pero si el amor de la amada del lobo no era correspondido por él, la maldición tomaría como sacrificio a la esencia del encanto y ella pagaría el precio de amar a los hijos de la luna…”, no pude continuar leyendo ya que en eso entran a la habitación dos jóvenes, adolecentes, tenía razón. Uno mas alto que el otro, no podía ver sus rostros pero era claro que estaban pensando en hacer algo, se pusieron frente al computador, discutiendo sobre lo que debía de hacer, parecía ser que el de tez morena no quería hacer lo que el de piel blanca pedía, lo escucho preguntar por mí a lo que el otro responde con un “es mi primo”, no recuerdo tener un primo tan hiperactivo, y exagerado, y charlatan, y dramático, y charlatan, y tan intenso, y… en serio habla demasiado…,  no recuerdo que fue lo que me dijo “mi primo” pero termine cambiándome de remera, para mi sorpresa ninguno me quedaba, me molesto que tuviera que hacerlo y a demás el hecho que sentía que me estaban usando para algo, cuando volteo veo sonreír a “mi primo”, genial… el aroma a canela con mentas era suyo…

Me detengo frente al centro de correo del pueblo, no puedo evitar sonreír una vez más al recordar aquella tierna sonrisa, al entrar por las puertas del establecimiento me llega el olor a lobo, y no uno de mi manada; el olor despedía nerviosismo y un poco de miedo, parece ser que también ya me olió, creo que me divertiré un poco más, al dar unos pasos más puedo ver al rubio de ojos azules que siempre sigue al mocoso latino, su beta. Me dirijo al mostrador a preguntar si me había llegado un paquete, me atiende una mujer regordeta, con un claro olor a excitación, le sonrío para agilizar el trámite a lo que escucho un gruñido por lo bajo.
 Que ocurre pequeño cachorro? _pregunto de lo más divertido _puedes pasar también los paquetes de mi joven amigo? _esta vez pregunto a la recepcionista.
 No soy amigo tuyo. _responde enojado el joven beta.
 Oooohhh…. No te molestes cachorro, está bien. _respondo sin perder el humor _puedes perder el control y morder tu cola.
 No soy un niño, ni un cachorro _claramente estaba molesto.
 Ok… ok… esta bien…  _La mujer en el mostrador me entrega dos paquetes, uno tenia como remitente mi nombre y el otro el de Liam Dunbar. _toma Liam _le entrego su paquete, tardo un poco en recogerlo… que?, todos los adolecentes en esta ciudad tienen problemas?

Olvídame   (Sterek)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora