El Suplicio De Una Inocente

CAPÍTULO III

Los personajes de Masashi Kishimoto no me pertenecen. Más la historia a continuación es de mi autoría.

AVISO IMPORTANTE
Publico sensible leer bajo su responsabilidad, la historia contendrá escena fuertes, con contenido sexual, violaciones, violencia física, maltrato psicológico, muerte de personajes, insultos a la religión, discriminación racial y lenguaje soez.

Los personajes tendrán personalidades algo distintas a las del anime.

Antes de empezar a leer aviso que hay una escena lésbica leer bajo su responsabilidad.

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Llevaba tres noches sin poder dormir, su cuerpo solo temblaba al recordar todo lo que había pasado hace tres noches, el como tras caer desmayada tontamente pensó que solo fue una pesadilla, pero al despertar todo su cuarto estaba lleno de viseras y sangre, el lugar apestaba, cuando su Nana Tomasa había entrado se había asustado tanto hasta quedar desmayada por la visión y aparte ella tenía los tobillos con marcas moradas de unos dedos sobre ellos y a su mente siempre venía esos ojos negros, que se tornaban de color rojo carmín.

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-Dios rey de reyes, Salvador y guía de nosotros tus siervos, ati acude hoy esta humilde sirva de tú reyno, pido ayuda, dios Santísimo, pido perdón y misericordia- de pronto la ventana sonó- Hinata miro aterrada hacia su ventana, en el filo de esta un cuervo se había posado y en su pico llevaba lo que parecía un dedo humano, aterrada salió de su cuarto hacia la habitación de su hermano.

-N... Neeji...... NEEJI- tocaba desesperada la puerta de su hermano. -Neeji hermano por favor habré- pero nada se escuchó al otro lado.

De pronto por el pasillo pasaba la joven doncella Samui. -Señorita Hinata que es lo que le pasa, sus gritos se escuchan de aquí hasta los cuartos de servicio-

Hinata se asustó al ver ahí a la muchacha pero al percatarse bien de ella se tiro a abrazarla, la muchacha no reaccionó solo sintió como su patrona la abrazaba fuertemente mientras temblaba -Duerme esta noche conmigo Samui- Dijo aferrándose aún más a la joven morena frente a ella.

-Pero señora si yo me quedo a dormir con usted puedo hasta ser asecinada-. Decía aún sin comprender nada.

-Es una orden de tu patrona-. Dijo mientras se alejaba de la muchacha y empezaba a caminar a su habitación.

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Se removía inquieta sintió como una mano tocaba bruscamente su pecho izquierdo mientras una sensación rara se abria pasó en su parte íntima, abrió los ojos asustada, para sentir como su criada se encontraba sobre ella, quiso decir algo pero sintió como la besaba, su tacto era brusco, su lengua se metía en su boca recorriendo cada parte de su ser, sintió como la mano de esta subía su camisón hasta la cintura, quiso retenerla pero no pudo, su mano se había posado ya dentro de su ropa interior, la sirvienta dejo de besarla para recuperar el aliento y posteriormente besar su cuello, un par de dedos intrusos habían abierto sus pliegues vaginales para acariciar su clítoris. -N...no Samui.....- trataba de alejarla de ella pero su cuerpo no reaccionaba y no sabía que era eso que sentía era tan placentero que la dejaba sin habla. -N...no está bien.... Ahhh-

Grito al sentir como se metía uno de sus pezones a la boca para luego introducir un dedo dentro de su vagina. Hinata trato de ver a Samui a la cara pero está solo mordía y chupaba su peson sin dejarla ver su rostro, para luego bajar hasta llegar a su vagina. -Que harás-. De pronto vio como ella solo abrió más sus piernas y metió su cabeza entre ellas, sintió como su lengua atacaba su clítoris mientras dos dedos, se introducían en su interior, su cuerpo estaba extrasiado sintió como algo se acumulaba en su estómago, trato de ver hacia donde se encontraba  su sirvienta y vio como de la espalda de esta se desplegaban dos las de murciélago se removió asustada al verla pero está seguía entre sus piernas, todo el placer que sentía se fue al piso de golpe. -DIOS.. - grito.

La joven entre sus piernas also la vista de golpe, Hinata observó cómo ella tenía unos ojos verdes como los de una serpiente y que dos pares de colmillos salían de la comisura de sus labios. Se removió más y más bajo la mirada de lo que sea que estaba frente a ella, cerró los ojos fuertemente, mientras sentía que alguien la movia.

-Señorita Hinata, señorita Hinata- Decía junto a ella una joven morena mientras la movia para despertarla.

-S....Samui dijo aterrada-. viendo a la mujer frente a ella, sentía como el sudor recorría por su frente y pechos, sus cabellos estaban mojados y pegados a su finos rostro.

-Llevo mucho tiempo tratando de despertarla, pero creo que estaba teniendo una pesadilla- Vio como su patrona la miraba sin dar crédito a sus palabras, quería irse de esa habitación, toda la noche no pudo dormir, sentía como algo merodeaba el lugar, en el pequeño pueblo ya se había empezado a esparcirse el rumor sobre lo que pasó hace unas noches, todos decían que la joven señorita Hyuga estaba loca, que había descuartizado a un animal en su alcoba.

-Vete- dijo sin más, la ver que ya entraba luz por su ventana.

-Como usted diga señorita- se retiró de la alcoba para dejar a la muchacha aún cubierta de sudor y con las manos sobre su pecho.

"Solo fue una pesadilla, solo fue una pesadilla, todo está en mi imaginación" se repetía mentalmente una y otra vez lo mismo y lo mismo.

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Ese día decidió ir con el nuevo padre del lugar, era aún muy joven y se sorprendió al verse pensando en lo apuesto que era "Que estoy pensando, esto es pecado". Pero aún así se quedó viéndolo, media más de 1.75 cabello rubio y ojos azules.

Meneo la cabeza tratando de alejar los malos pensamientos. -Buenos días padres-

-Buen día hija, ¿En qué puedo ayudarte?- tomo haciendo junto a ella mientras le sonreía tiernamente.

-Yo, necesito saber si estoy loca padre- vio como el cura la miraba confundido. -Lo siento padre usted es nuevo aquí así que no lo sabe-. Vio la dudo tras sus palabras en los ojos del nuevo cura.

-Esta bien hija, pero déjame decirte que soy un cura no un psiquiatra-. Adoptó una posición más fría mientras espero que ella hablase.

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-Puedo entender lo que te está pasando hija, pero porque no has acudido antes por ayuda-. Miro a la mujer frente a él mientras, se levantaba de su lugar para llamar a una doncella del lugar.

Hinata vio a la joven mujer frente a ella, era blanca, con un extraño color de cabello muy parecido al rosa y unos ojos verdes profundos. -Ella es mi sierva Sakura, deja que ella te guíe hacia Tsunade, ella lleva una carta de mi hacia ella, para que te reciba, por tu hermano no te preocupes el entenderá, que es por tu bien-

-Pero el luto de padre, no puedo hacer eso- vio como el padre sujeto su mano y sin decir nada also la manga de su vestido, dejando ver su muñeca, se vio una extraña marca roja con la forma de la cabeza de una cabra en un pentagrama, Hinata nunca se percató de la marca estaba asustada, que era eso miro aterrada al cura en busca de una respuesta.

-Es la Marca del demonio Hinata, solo en tierra santa él no te puede encontrar, así que tienes que ir lo antes posible al convento-. La muchacha frente a él temblaba tras lo escuchado sin más se dejó guiar por la sirvienta del cura.

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Aquí con un nuevo capítulo de esta historia, que espero que les guste, gracias por leer y disculpen mis faltas ortográficas o palabras sin sentido, aveces escribo algo pero el auto corrector de palabras las corrige y pone cosas que no son.