Se Busca un corazón

Caminos #1

Caminante que por caminos estrechos vas, a tu destino deseas llegar, ¿estas dispuesto al precio pagar, o por sendas espaciosas sin rumbos deseas vagar?

Desperté de golpe y estaba tirado en el suelo, rápidamente me levante y observe el reloj en mi mesita de noche y marcaba las 03:00 am aún me quedaban dos horas para descansar antes de tener que arreglarme para ir al trabajo, trate de dormir nuevamente pero me fue imposible conciliar el sueño por lo que decidí comenzar mi rutina de preparación para ir al trabajo. Me dirigí al baño, tome mi cepillo le coloqué crema y comencé a cepillar mis dientes, luego entre a la ducha y a pesar de haberme duchado hace aproximadamente unas 4 horas antes, me lave minuciosamente estrujando cada parte de mi cuerpo con la esponja de baño y retirando cualquier rastro de suciedad que no se hubiese ido con el baño anterior.

Al salir de la ducha y luego de haberme secado revise mi celular para saber la hora y cuando lo enciendo tenia una llamada perdida de un número desconocido y un mensaje de texto, al principio no le di importancia hice el celular a un lado y me comencé a vestir, sólo me pondría un short por los momentos mientras esperaba que se hiciera la hora de ir a trabajar y cocinaba algo para comer, moría de hambre en ese momento. Fui directo al refrigerador y saque un paquete de pastelitos, saque una carne para desmechar y suficientes aliños, puse a hervir agua y coloque la carne dentro, media hora con la llama fuerte y en la hoya de presión y estaría lista para luego desmechar y aliñar. Mientras esperaba fui al cuarto tome mi celular y leí el mensaje.

*Número Desconocido*
Buenas señor Marck, disculpe la hora, le escribe la señora Montero, es para informarle que debido a problemas de salud no podre ir hoy a su oficina, en mi lugar asistirá mi hijo, le ruego por favor que lo atienda y suministre toda la información como si fuese yo quien estuviese reunida con usted, este es el número de mi hijo, y disculpe nuevamente la molestia a estas horas.

Este mensaje no me sorprendió para nada, era de esperarse solo que no a estas horas, siempre avisaba un día antes, que ella no podría venir y que en su lugar vendría otra persona, en ocasiones su abogado o si no su hermana, pero esta vez era diferente, esta vez vendría su hijo, nunca nos habló de el más que para incluirlo en ciertas cápsulas del contrato de póliza de seguros familiar que ofrece nuestra empresa. La señora Montero ha sido nuestra cliente desde que se inauguro nuestra empresa por lo que el trato era mas familiar que de vendedor-cliente. Desde hace cuatro años la señora Montero comenzó a padecer de una enfermedad degenerativa conocida como artritis reumatoide, esta enfermedad ya estaba muy avanzada y le imposibilitaba salir de casa razón por la cual delegaba responsabilidades para poder hacer sus diligencias.

La señora Montero siempre ha sido fiel a nuestra empresa y el motivo de la reunión, mas allá de darle un balance de intereses por trimestre, era para hacerle entrega de un presente, pero debido a que no podría asistir ella debíamos buscar otras soluciones, pero por el momento tendría que salir de compromisos para atender a mi padre.

El tiempo se fue volando, termine el desayuno rápido, comí y me terminé de vestir para salir a la oficina, mientras subía a mi auto sonó mi teléfono era Jhoane me apresure a responder mientras me acomodaba en el asiento y encendía el vehículo.

Buenos días Jhoa como estas?

Buenos días Marck, yo bien y tu, ya voy saliendo a la oficina -tardo unos segundos- ¿como sigue todo en casa?

Dentro de lo que cabe, todo bien Jhoa, ya voy saliendo de la cochera hablamos en la oficina si, no quiero que me multen por estar al teléfono mientras manejo -me reí un poco y ella río nerviosa al otro lado-.

Esta bien, hablamos en la oficina

En auto particular tardaba 20 minutos en llegar a la oficina y Jhoane vivía en el edificio que estaba a una cuadra de la oficina por lo que no pasó mucho tiempo antes de encontrarnos y retomar la conversación.

Entonces Marck, ¿que ocurre con tu padre?

Aun no sabemos Jhoa, los medicos no tienen un diagnóstico concreto aún -la mire a los ojos- solo nos dicen que debe mantener reposo, nada de viajes largos y ni actividades que hagan que aplique mucha fuerza

Oh Marck -sus ojos se humedecieron- espero pronto tengan un diagnóstico y puedan ayudar a tu padre...

Si, yo también espero eso -forcé a salir una media sonrisa de mis labios para quitar la tensión del ambiente- vamos, tenemos que acomodar todo antes de que lleguen los clientes.

Jhoane se sentó en su silla detrás del mostrador y encendió el computador, yo me fui a mi oficina y encendí la computadora de mi escritorio, antes de llegar los clientes debía imprimir algunos papeles que se les entregarían, unos por petición de ellos y otros por protocolo de balance trimestral. Mientras comenzaba la impresión de las cartas, tablas y gráficas, revise mi correo electrónico a simple vista no había nada extraño mas que facturas electrónicas de los servicios de la oficina y mi departamento, mensajes de algunos clientes confirmando su asistencia a las citas que se le programaron y otros posponiéndola, tome nota de todo para pasarlo a Jhoane para que agendara las citas pospuestas para la semana después de que yo regresara de estar en casa de mis padres. En total hoy se programaron la atención de 20 clientes y solo 16 confirmaron su asistencia, sería un día ocupado pero teníamos que ser eficientes y terminar rápido con los balances de trimestres y otras solicitudes.

A pesar de la cantidad de trabajo que tenía para hoy no me preocupe mucho ya que me ayudaría a no pensar mucho en la situación de papá y así tener la mente despejada cuando regrese a casa. Seguí revisando el correo mientras se terminaban de imprimir los últimos documentos. Al finalizar la última impresión fui a la sala donde se encontraba Jhoane detrás del mostrador y le entregué la mitad de los documentos impreso para que me ayudara a organizarlos. Eran las 08:30 am, los clientes comenzarían a llegar a las 09:00 am y esperábamos haber atendido a la mitad antes de medio día ya que así se les habían pautado las citas. De forma puntual llego nuestro primer cliente justo a las 09:00 am el señor Agustín Parra. Yo estaba ya en la oficina preparado cuando Jhoane abrió la puerta y la hizo entrar.

Buenos días señor Agustín -le estreche la mano y luego mire a Jhoane- gracias señorita Jhoane -hizo un gesto con la mano y cerro la puerta-.

Buenos días joven Marck -estrecho mi mano y la agito un poco- ¿como esta todo por aquí?

Perfecto señor Agustín, todo va de maravilla por acá -las relaciones con la mayoría de nuestros clientes eran de mucha confianza y respeto- ¿como esta la familia?

Muy bien hijo, todo perfecto gracias a Dios -sus ojos tuvieron un destello de alegría- y dime que haremos hoy?

Me alegro señor Agustín -respondí con una sonrisa- Bueno, para comenzar hoy no se hará mas que entregarle un balance trimestral de sus intereses en nuestra empresa y una carta para invitarle a el aniversario 50 de la compañía Seguros Fénix, este evento se realizará este año aquí mismo en nuestra cede...

El señor Agustín recibió los papeles y aceptó de forma muy cordial la invitación y prometió asistir a la celebración, salió de la oficina no sin antes estrechar nuevamente mi mano y entro otra persona, luego salio esta y entró otra, y así fue pasando hasta que el reloj marco las 12:00 m ya habíamos atendido a la mitad mas uno de los clientes solo faltaban 7 clientes y terminábamos la jornada de hoy. No había nadie en la sala por lo que Jhoane y yo cerramos la oficina y nos fuimos a almorzar. Ya a la 12:50 pm teníamos que estar regresando a la oficina por lo que fuimos rápido al restaurante que esta frente al edificio.