capítulo diez♡

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A la mañana siguiente despertaron temprano pues empezaba el gran viaje. Se ducharon, vistieron, desayunaron y salieron rumbo a Disneyland. Scar estaba tan emocionada que no se podía estar quieta más de dos minutos. Harry solo reía y tú disfrutabas de verlos sonrientes a los dos. Nada más llegar se hicieron unas cuantas fotos y compraron orejitas de Mickey Mouse. Estuvieron mucho rato andando de un lado para otro, viendo todo y corriendo detrás de Scar que a la mínima se emocionaba y se iba a ver otra cosa que veía. Ahora por fin estaban descansando un rato sentados mientras que bebían unas coca-colas frías y Scar se comía un sándwich.

-¡Qué horas ...!-suspiraste-Estoy cansada.

-Y nos queda mucho por ver todavía-aseguró Scar-quiero verlo todo por lo menos dos veces ya que tengo que ver cada mínimo detalle para recordar siempre todo esto.

-¿Enserio?-parpadeaste sintiendo como la vaguedad se instalaba en tu cuerpo y te hacía sentir mucha pereza. Ni querías levantarte de ahí.

-Vamos cariño, parece que tienes sesenta años-rió Harry que no parecía cansado desde luego.

-He dormido mal anoche-suspiraste-tuve una pesadilla tonta y después ya no pude descansar. Estoy cansada pero bueno, no pasa nada, seguiremos disfrutando de esto.

-¿Por qué no me llamaste?

-¿Para qué? ¿Y qué iba a decirte ...?-reíste-'Harry ven conmigo que he tenido una pesadilla, cántame y a ver si así me duermo ...'.

-Puede funcionar, conmigo funciona-parpadeó ofendido-. Louis siempre logra que me duerma así.

-Bueno, Louis es Louis, tú eres tú y yo soy yo, una friki, ¿te acuerdas?-reíste.

-Sé que tienen una conversación muy interesada de frikis pero, ¿podemos seguir?-intervino tu hermana arqueando una ceja.

Los dos rieron y se levantaron para seguir con lo que era el maravilloso Disneyland. Cuando Harry entrelazó su mano a la tuya lo miraste con una pequeña sonrisa. Cuando te besó ni siquiera te molestaste en separarte. Cuando te abrazó no lo rechazaste. Ese día habían parecido novios de verdad y sinceramente no te había molestado nada sentirlo a tu lado. Sentir su mano entrelazada a la tuya mientras que andaban sonrientes por todos los lados. Había sido hermoso, habías sentido mariposas y te habías emocionado. ¿Conclusión? Estabas tomándote demasiado enserio a Harry y eso no podía ser.

-Mírala nada más, dormidita como un ángel-sonreíste al ver a tu hermana dormir de camino al hotel.

-Ha sido un día excitante para ella-habló Harry.

-¿Sólo para ella?-reíste.

Al poco rato tú también te quedaste dormida apoyada en Harry, él te abrazó sujetándote cerca de él. Por una extraña razón se sentía en deuda contigo, te quería proteger de todo que quisiera hacerte mal, y no solo a ti, también a la pequeña Scar. Su instinto protector había salido a la luz como nunca antes y no entendía por qué. No quería entrar en las razones que los chicos habían sacado pero la verdad era que estaba pensándolo sin querer y se daba cuenta de que sí había algo. Te había abrazado, besado y cogido de la mano sin tener la necesidad de hacerlo. Eso decía mucho para él.

"Problemas. Pillado."-le escribió a Louis frunciendo los labios.

"Te lo advertimos amigo mío ..."-fue la respuesta de Louis. Bueno, en ese momento necesitaba algo más, ¿un consejo o ayuda?

"¿Algo más que decir? No estás ayudando mucho ... solo digo."-suspiró esperando la respuesta.

"Ves a por ello."-le escribió.

Novia por contrato | adaptada, h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora