Sostén mi amor,
y no lo sueltes;
y si lo sueltas,
tómalo,
y si lo sueltas,
ámalo,
y si lo sueltas,
cuídalo,
y si lo sueltas,
protégelo.
Sostén mi alma hasta
el punto de hacerla tuya,
pero en la medida
de la eternidad,
eternidad que nos acoge,
eternidad que nos brinda.
Sostén mis anhelos,
porque en ellos,
te encuentras,
porque en ellos,
disfrutas,
porque en ellos,
vives,
porque en ellos,
viajas,
porque en ellos,
somos.
Sostén mis caricias,
porque en ellas,
emana una flor
de primavera,
primavera que produce
buenos frutos,
luz,
algarabía,
momentos,
vida.
Sostén mi silencio,
porque en él,
tengo guardado
nuestro amor,
amor que brilla,
amor que alivia,
amor que sana,
amor que purifica.
Sostén mi eco,
porque en él,
te escuchas,
ves,
te alimentas,
creces.
Sostén mis vibras,
porque en ellas,
encuentras tesoros,
como tu sonrisa al despertar,
como tu risa al anochecer,
como tu mirada
al mediodía,
como cariño
en la madrugada.
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Agosto: Instantes
PoesíaInstantes que extrapolan una condensación de felicidad, felicidad inesperada, inesperada como aquel que no espera nada y recibe todo. Instantes que aguardan un cúmulo de emociones intrínsecas en las olas del mar, mar que juega con el océano...
