Cap #3

127 25 6
                                    

Kim Hyun Joong

Estaba golpeando el saco en el gimnasio; esta tarde venía a casa el compañero de mi esposo, con el que siempre tenia que hacer trabajos de esa asignatura.

Liberaba tensiones si me molestaba mucho, que se fuera a casa de su compañerito ¡pero que podía hacer! ¿Entrar en cólera y enfadarme con el cuando no tenia la culpa?

Medí una ducha para relajarme, el ejercicio duró que había estado haciendo toda la mañana y la ducha habían conseguido que me relajará un poco.

Me vestí y fui por mis peques; me preocupe al ver salir a mi pequeña con una tirita en su brazo, al parecer un animal diminuto (también llamado niño) había mordido a mi pequeña.

Con los pucheritos de mi pequeña y tras echarle bronca a la profesora, me fui de allí para llevarla con sus abuelos, la señora y el señor Heo al igual que yo también estaban enojados.

Recogí a Saeng justo a tiempo, cuando salia de clases lo bese. Omiti el bocado que le habían pegado a mi pequeña, porque era capaz de ir a gritar a las cuidadoras y arrancarles los pelos a la madre de el niño que había mordido a mi princesa.

Comimos viendo la televisión mientras me contaba su día; reí mientras me contaba que unas de sus compañeras se había sorprendido al enterarse de que estaba casado y con dos hijos. A día de hoy la gente seguía sorprendiéndose.

Me entere de que finalmente, vendrían un par de personas mas a casa, se habían juntado dos grupos para hacer el trabajo.

Cuando estaba seguro de que empezarían a llegar, me baje al sótano prometiendo no molestar demasiado. No tarde en oír el timbre y aun hombre hablando ¿Seria el famoso compañero? Reí con maldad.

Mas tarde oí a otro hombre y a una mujer. Por lo menos no eran mas hombres.

Me ejercite duro, únicamente en el ejerció encontraba la manera de soltar todos mis malos pensamientos todos mis celos, los cuales intentaba tapar me pase cerca de dos horas escondido mientras nadie sabía que yo estaba; le pedí que no dijera nada, entrecerro los ojos cuando se lo dije, pero creo que entendía mis intenciones.

—Oye tu casa es preciosa -dijo la chica, sonríe orgulloso.

—Es la casa perfecta -dijo otro chico, sonrei  ese chico me iba a caer bien, seguro.

—Si no esta mal. ¿Y como es que te casaste tan joven? -dijo el otro chico ¿Hola? ¿Que mierda le importaba?

—Pues mira...ni siquiera supe que me iba a casar fue todo sorpresa. Me preparó una boda sorpresa, perfecta, hermosa, no supe nada hasta que camine por un caminó de flores azules y ahí estaba el y mi familia -dijo contento y sonríe.

—¡Que maravilla de hombre! -dijo la chica.

—¡Tengo que conocer a ese súper hombre! -dijo el otro chico, sabía yo que me iba a a caer bien.

—¿Ves romántico todo eso? Se supone que una boda es algo entre dos, algo que deben platicar, no te dio esa opción. -dijo con maldad.

—¿Perdon? Me fue mejor de lo como yo habría hecho -dijo Saeng molesto <<Vas mal por ese camino idiota>> pensé.

—Si tu lo dices -dijo el chico.

Ya me había cansado de estar en la puerta del sótano escuchando a ese mierda, iba a salir a marcar territorio ha dejar claro que el era mio, infle mis pulmones de aire y cogí el bombín de la puerta.

—Empieza el show -susurre y abrí la puerta.

Tense mis músculos ligeramente, aprovechando que con el sudor brillaban y sonrei  a mi precioso esposo que me miraba comiendome con la mirada y no era el único.

—Buenas tardes -dije educadamente.

Me acerque a mi esposo, coloque mi brazo por delante de su pecho, haciendo que mi mano descansará en su panza y lo bese, le di un beso tierno y suave y muy sensual que me devolvió desde el minuto uno.

—¿Todo bien? -preguntó besando su frente.

—To...todo bien -dijo sonrojado perdón compañeros, este es mi esposo -dijo sonriente y feliz.

—¡Encantada de conocerte! -dijo su compañera.

—No mas que yo -dijo el chico —Me llamo ivan y es un auténtico placer para mi conocer al dueño de este maravilloso chico -dijo y sonrei.

—Mi nombre es Kim Hyun Joong -dije sonriente —¿Quieren una Coca-cola o cerveza? -dije educadamente.

—¿La tienes light? -dijo ivan —La coca-cola digo -dijo divertido.

—Aqui tienen -dije dejando las bebidas de mis invitados.

Volví a la cocina, mientras oía un...<< Y para ti, ¿No trae nada? >> dijo el otro anormal.

Salí de la cocina con una Coca-cola para mi esposo, con su copa favorita.

—Aqui tienes hermoso -dije mientras oía suspiros de la zona amable del grupo.

Los deje trabajar mientras subía a ducharme, definitivamente ese chico no me gustaba.





Gracias por sus votos y comentarios.

Star Love #2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora