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Keith suspiró y negó con la cabeza, Pidge lo había citado fuera del castillo, a esa hora, y no había ni rastros de ella. Para colmo, hacía frío y su corta chaqueta no le brindaba el suficiente calor.

Estaba por ponerse de pie para irse cuando escuchó unos pasos detrás de él, se giró sobresaltado. Resultó ser solo Lance, con los ojos pequeños por el sueño y envuelto en una manta grande.

A Keith le causó ternura, puesto que su contrario estaba completamente envuelto en la manta, excepto por su rostro, en el cuál caían algunos mechones de pelo. El chico Kogane se abrazó a sí mismo debido a que una brisa fría sopló.

- ¿Lance? ¿que haces aquí? - preguntó Keith mientras que Lance bostezaba.

- Hunk me dijo que encontró algo brillante y quise venir a ver - estiró el cuello y buscó dicho objeto con la vista, pero al no encontrarlo volvió a mirar a Keith. - ¿y tú? 

- Pidge me citó para probar su telescopio, dijo que seguramente podría ver muchas más cosas que las que veía en la Tierra - se encogió de hombros - supongo que fue alguna especie de broma.

- Parece que a ambos nos gastaron la misma broma - la voz de Lance se escuchó más cerca, Keith volteó un poco su cabeza para ver que el muchacho se había sentado junto a él. - ¿por qué estás aquí congelándote? podrías volver adentro y dormir, sabes.

- No sé, creo que me quedé mirando las estrellas - el azabache subió su vista al cielo - son más grandes y brillantes que en casa.

- Sí, lo son - Lance imitó la acción de su contrario, pero segundos después miró a este, y se maravilló con la forma en la que las estrellas se reflejaban en sus ojos violáceos.

Apartó la vista antes de que Keith se diera cuenta de que lo estaba observando. El chico Kogane por su parte, intentaba no sonreír al ver de reojo que Lance lo miraba.

Una brisa fría sopló y Keith se abrazó a sí mismo por el frío, el ojiazul se percató de esto, por lo que estiró su manta y usó el otro extremo para cubrir al azabache, de modo que ambos quedaran envueltos en la manta.

- Gracias - dijo Keith, sin atreverse a mirarlo, ya que sabía que si lo hacía su rostro y el de Lance quedarían a muy escasos centímetros y esconder su sonrojo se volvería algo muy difícil de hacer.

- De nada - respondió, ambos se quedaron en silencio durante un rato. No era un silencio incómodo, era un silencio en el que ambos disfrutaban de la compañía del otro.

A Keith se le estrujaba el corazón en el pecho cada vez que veía a Lance, sentía que cada vez sus sentimientos hacia el ojiazul eran más fuertes y le daba la sensación de que en algún momento no iba a poder ocultarlos más. Sintió la cabeza de Lance apoyarse suavemente en su hombro, el chico Kogane soltó un suspiro antes de apoyar su propia cabeza en la contraria.

- Lance... - murmuró, sin estar totalmente seguro de lo que iba a decir a continuación - tengo que decirte algo.

El contrario levantó el rostro para mirarlo, Keith tomó aire.

- Megustasmucho - dijo en voz baja, agachando la cabeza de modo que el flequillo oculte su sonrojo.

Sintió a Lance despegarse de él, y bajó los hombros decepcionado ante el pensamiento de que el chico que amaba se había ido.

Sin embargo, el tacto de unas manos en sus mejillas lo hicieron levantar la mirada, para ver que allí se encontraba Lance, acuclillado frente a él. Antes de que pudiera preguntarle que estaba haciendo, el castaño lo atrajo suavemente hacia él para unir sus labios.

Keith se sorprendió ante la suavidad con la que Lance lo sostenía, el cariño y delicadeza de las manos de Lance acariciando sus mejillas era algo que nunca había sentido. Nadie lo había tratado así antes, y en ese momento se dio cuenta de lo mucho que necesitaba aquel cariño.

Le siguió el beso, y realmente no podía explicar la sensación de estar realmente besando a Lance. Era como sentir que los planetas chocaban y las estrellas explotaban, era una sensación totalmente nueva, y agradable, muy agradable.

Posó sus manos con la mayor suavidad que pudo en la cintura del castaño, quién aún estaba en cuclillas, para sentarlo en sus piernas. Lance colocó sus brazos alrededor del cuello de Keith para acercarlo más hacia él, mientras que comenzaba a jugar con su cabello.

Cuándo por fin se separaron, aún estaban en la misma posición y sus frentes estaban unidas.

- Creo que con eso dejé claro que tu también me gustas - rió Lance, causando una pequeña sonrisa por parte del azabache.

(Mientras tanto, en el interior del castillo...)

- NO. PUEDO. CREER. QUE. LO. LOGRAMOS.

Shiro, Pidge, Hunk, Allura y Corán se encontraban tirados en el suelo, sonriendo como estúpidos debido a la victoria del plan de los tres primeros nombrados. Allura se había despertado a mitad del plan y, hecha una furia por el hecho de que las puertas estaban abiertas y seguida por Corán, fue hasta el encuentro de los tres paladines. Sin embargo, después de que estos les habían contado brevemente la misión y que estaban a punto de lograrlo, los dos alteanos se entusiasmaron también y se quedaron a ver. Y ahora, todos estaban felices por la victoria.

Y Keith y Lance, bueno, ellos andan, por ahí.

No los molesten.

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PERDÓN PERO NO ME RESISTÍ AAAAAA GRITEN CONMIGO
che, me da paja seguir con la historia pq m quedé sin ideas. capaz la siga, capaz la deje acá y pase directamente a la segunda temporada :v
si, hay segunda temporada ahre
bueno, besis, espero lo hayan disfrutado uwu
   

space gay bois [ klance ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora