C A P I T U L O 11°

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Compré ropa negra y cómoda, cosas de cuero, jeans negros, todo negro, calzas, zapatillas negras, polerones negros y compré una mochila para meter todo.

Miré a Matteo que estaba en la moto.

Yo llevaba puesto unas calzas de cuero negras y un poleron algo olgado negro, con unas Nike air blancas.

Me miró de arriba a abajo, y me miró serio.

–Con esas calzas se realza tú trasero.– dijo con una sonrisa pervertida.

-Das asco- le dije con una expresión de asco.

Me subí a la moto, acomodé la mochila en mis hombros y me agarré de su cintura y arrancó la moto.

No sé exactamente a dónde nos dirigimos.

Hasta que en mis ojos aparece un gran cartel que dice.

Motel.

Es en serio?

Matteo estacionó la moto y nos bajamos.

Me tomo del brazo y me hizo mirarlo.

-Sigueme la corriente cada vez que te lo pida- agarré mi mochila y el sus bolsas de ropa.

-Está bien

El tomó mi mano y la entrelazó con la suya.

Y caminamos directo al motel.

Nos acercamos a la mesa de reservación.

-Que linda pareja- dice un hombre con barba cuidada blanca- ¿Habitacion matrimonial?

-N..- matteo apretó mi mano antes de me hablara- Si, claro.

No me enfoqué mucho en lo que Matteo habló con el resepcionista, miré el lugar, era lindo, bien cuidado, pero no de lujo, era acogedor.

-Habitacion 707 segundo piso- nos miró pícaro- disfruten.

Algo que me dió náuseas.

Iu.

-Lo haremos- le dijo Matteo al recepcionista.

Cuando caminamos hasta las escaleras lo miré y lo enfrenté.

-¿Cómo que nos vamos a divertir?

-Sabes luna, eres muy tierna a veces.

Soltó mi mano y subió las escaleras dejándome allí.

Rodeé los ojos.

-No soy tierna!

Subí las escaleras y encontré a Matteo abriendo la habitación.

Entró y dejó la puerta abierta, entré y cerré.

Tiró sus bolsas a la cama y se sacó la chaqueta de cuero que llevaba puesta, se iba a sacar la camiseta blanca que llevaba.

-Hey! Qué haces!?-Le dije mirándole con los ojos muy abiertos.

-Ves la razón por la cual digo que eres tierna?- me dijo con una sonrisa arrogante- me daré una ducha.

Caminó hasta lo que sería el baño.

Prendí el televisor esperando a que el desocupe el baño, para darme una ducha también.

Y escuché unas voces de unos hombres

- Deben estar por aquí.

-Será fácil identificar, no son pareja, ¿qué hacen las personas que vienen a los moteles?- un tipo rió

Me paré de la cama rápidamente y toqué la puerta del baño.

-¿Qué pasa luna?- dice Matteo algo irritado.

Escuché de nuevo voces.

-Deben estar en una de estas dos habitaciones.

Desesperada, abrí la puerta con los ojos cerrados.

-Mierda luna!

-Matteo, hay personas que nos buscan!

-Ven y sigueme el juego.- dijo Matteo.
Caminó hasta la cama y habló.- súbete a la cama, salta para que haga ruido y hace como que estás gimiendo.

-¡¿Qué?!- dije en susurro.

Este está cada vez más chiflado.

Pero igual es una buena idea.

-Debe ser aquí- escuchamos ambos

Matteo me miró para que lo hiciera.

Me subí a la cama y empecé a saltar, Matteo hizo lo mismo.

Y empecé a gemir.

Dios, todo por salvar mi vida.

Matteo solo me miraba a punto de estallar de la risa.

-Te gusta!?- gruñía fuerte Matteo

-Siii!- le respondía en gemido.

Dios, esto es lo más estúpido que he hecho en mi vida.

Matteo saltando con solo una toalla y gruñendo, ¿quién puede tener mente limpia así? Su abdomen bien trabajando, uff que bombón.

Digo, no, no.

Escuchamos una risa -Definitivamente no es aquí- y sentimos unos pasos alejarse.

Matteo suspiró en alivio y me miró

-Ninguna palabra sobre esto- le dije seria

El solo rió y se fué al baño.

Ahg, estúpido.





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⏰ Última actualización: Jan 17, 2019 ⏰

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