Príncipe omega [JinNam]

3.- Consejos de duque

Al día siguiente el pelinegro despertó temprano gracias a sus caballeros que le llamaban cada día a las seis de la mañana.

Se dio un baño caliente y en seguida le ayudaron a vestirse como era habitual aunque con un ligero cambio, había cambiado su uniforme elegante militar por el traje que solía utilizar para montar.

Ese día iría de casería al bosque, planeaba tomar algunos patos y quizá alguno que otro conejo.

Bajó a la primera planta, donde ya le esperaba su primo, él era el siguiente en la línea de sucesión, si el rey llegase a morir, ese alfa tomaría el puesto.

-Kim JungKook Duque de Seagull su majestad- anunció el mayordomo e hizo una reverencia antes de retirarse y dejarles solos

-Ahh su majestad- el castaño dijo entre risas- ¿listo para la caza semanal?- se acercó a abrazarlo con absoluta confianza

-Por supuesto que si JungKookie, más que listo- correspondió el abrazo fuertemente por unos momentos antes de separarse- vamos primero a tomar el desayuno, muero de hambre- caminó hacia el jardín trasero

Fue seguido por el castaño que reía y bromeaba golpeando y empujando al mayor, era el único con tal derecho por ser tan cercanos, cualquier otra persona que se hubiese animado a jugar de esa manera podría haber muerto de inmediato.

Al salir tomaron asiento en la pequeña mesa en el centro del jardín, justo en la que el día anterior su hermano menor había estado bordando.

-¿Qué planes tienes para hoy aparte de cazar?- preguntó el castaño mientras llevaba un trozo de fruta a su boca

-No había pensado mucho, quizá solo ir a leer en mi estudio- respondió y cortó un trozo de filete

-No, vayamos por unas omegas al bar del centro, vamos, escuché que llegaron nuevas adquisiciones- comentó en un susurro al pelinegro

-No puedo JungKookie, tu sabes que el rey tiene prohibido entrar en esos lugares de mala muerte- bebió de su jugo de naranja- podría dejar embarazada a una y eso sería realmente un problema, no necesito bastardos reclamando el trono en un futuro

-Es verdad- se encogió de hombros- aunque ya debes necesitar un poco de diversión, tu gran amor sigue manteniéndote en abstinencia- JungKook devoró los huevos fritos que habían dejado en su plato, eran sus favoritos

-No empieces JungKook- comentó con molestia

-No vas a lograr nada manteniéndolo aquí dentro, apuesto que puedes ganar mas su confianza si lo dejas salir aunque sea un par de horas al pueblo

-No, definitivamente no- respondió rápidamente- NamJoon no puede relacionarse con otros alfas, solo me pertenece a mi

-No lo hace completamente, no tienes su confianza, te aseguro que hasta te tiene miedo por la forma en que has utilizado tu voz de mando con él solo porque lo quieres callar harto de que insista con el tema de su libertad

-¿Quieres decir que debo dejarlo salir?- le miró con curiosidad

-Por supuesto, si lo dejas salir, él caerá en tus garras pronto y será consciente de que alfas como tu no hay ninguno, después de todo eres el rey SeokJin- JungKook terminó con su leche de banana y sonrió ampliamente, mostrando sus peculiares dientes que le daban un tierno aspecto

SeokJin asintió, debía tomar en cuenta el consejo de su primo menor.

Hizo sonar una pequeña campana para llamar a uno de los sirvientes.

-Llama a YoonGi de inmediato- le ordenó en cuanto llegó su mayordomo personal

JungKook sonrió gustoso, nada le haría más feliz que ver a su pequeño primo omega relacionarse con otras personas que no fueran los sirvientes, guardias y su primo el rey; ni siquiera él podía verlo mucho porque le mantenían ocupado en clases estúpidas e inútiles relacionadas con tratar a un alfa.