Nueva vida

1984

Había pasado un año desde que Melanie había conocido a Alex y eran muy buenos amigos.

Ese día Melanie, Alex, Ginny y Eddie estaban jugando en el jardín mientras Harry, Neville y Ron jugaban dentro. Alex se cayó en un charco de barro manchando su ropa.

-Mi mamá se va a enfadar mucho.-Dijo Alex mirando su ropa triste.

De repente Alex volvía a estar limpio. Melanie, Ginny y Eddie miraron sorprendidos a Alex. Los cuatro entraron, buscaron a sus madres y les contaron lo que había pasado. La única que estaba sorprendida era Kate.

-¿Estáis seguros de eso?-Preguntó Kate sin entrever como eso podía ser posible.

Molly, Lily y Alice se miraron dudando si decirle a Kate la verdad.

-Creo que lo mejor es decirte la verdad sobre algo.-Dijo Lily decidida a contarlo, tarde o temprano lo descubriría de todos modos.

-Lo que le ha pasado a Alex es algo normal para un mago.-Dijo Alice.

-¿Un mago? ¿De que estáis hablando?-Preguntó Kate confundida.

Le explicaron a Kate sobre el mundo de los magos.

-Entonces, ¿Alex es un mago e irá a ese colegio a los 11 años?-Dijo Kate sorprendida. ¿Cómo era eso posible?

-Exacto.-Dijo Lily asintiendo con la cabeza afirmativamente.

-¡Vas a venir a Hogwarts con nosotros!-Dijo Melanie contenta.

Melanie, Alex, Ginny y Eddie fueron a jugar con Harry, Ron y Neville que estaban en el jardín.

-¿Como es posible que Alex sea un mago?-Preguntó Kate sin entenderlo.-Ni Aaron (Padre de Alex) ni yo somos magos.

-Eso es normal.-Respondió Lily.-Mis padres tampoco eran magos pero yo sí soy bruja.

-Para ser mago hijo de muggles tienes que tener un antepasado squib.-Explicó Molly. Kate la miró confundida.-Squib es una persona que tiene padres magos pero no es mago o bruja.

Sirius, Remus y Regulus llegaron por la red Flu y Kate los miró muy sorprendida.

-¿Es muggle?-Preguntó Sirius sabiendo que la habían fastidiado.

-Es la madre de Alex.-Respondió Alice.-Y ya ha descubierto que Alex es mago.

-¡Padrino!-Dijeron Harry y Melanie entrando al salón y corriendo para abrazar a sus padrinos.

-Hola lobita.-Saludó Remus abrazando con cariño a la pequeña azabache.

-Hola cachorro.-Saludó Sirius despeinando aún más el pelo de su ahijado.

-¿A mi no me saludais?-Preguntó Regulus fingiendo estar ofendido.

-Hola tio Reg.-Saludaron Melanie y Harry abrazando a su tío.

Ginny, Eddie, Ron, Neville y Alex entraron en el salón y los cuatro primeros saludaron efusivamente a los que consideraban sus tíos.

-Tengo regalos para vosotros.-Anunció Sirius señalando la bolsa que traía con él.

-¡Bien, bien!-Celebraron todos los niños menos Alex porque pensaba que Sirius no le regalaría nada.

A Melanie le regaló un peluche con forma de loba gris que cambiaba a la forma de un perro negro, a Ginny un peluche con forma de caballo que se transformaba en un ciervo, a Eddie un libro sobre bromas (Aunque el pequeño pelirrojo no sabía leer Sirius sabía que James se lo leería), a Ron un ajedrez mágico, a Harry un peluche de un ciervo, a Neville un balón de fútbol (Desde que Melanie y Alex se habían hecho amigos a los niños les empezó a gustar el deporte muggle y eso se lo contagiaron a los adultos) y a Alex un peluche de un perro negro que se transformaba en una loba gris.

Alex miró sorprendido a Sirius, no esperaba recibir ningún regalo.

-Gracias.-Dijo Alex con una tierna sonrisa.

Melanie, Alex, Harry, Neville y Ginny fueron a jugar fuera con el balón de fútbol y Ron se quedó dentro jugando al ajedrez mágico con los adultos. Nadie fue capaz de ganar al pelirrojo.

Fuera.

Los equipos eran estos: Melanie y Ginny contra Harry y Neville. Alex era el árbitro porque si no sería injusto que un equipo fuera de tres y el otro de dos. Mientras jugaban iban cambiando los equipos.

Días después.

Estaban en el parque todos los Weasley, los Potter, Neville y Alex. Estaban jugando todos juntos a todo tipo de juegos muggles que Alex y Lily les enseñaban. Harry, Ron, Melanie, Alex y Ginny vieron que una chica castaña estaba sola y parecía estar llorando así que se acercaron a ella.

-¿Estas bien?-Preguntó Ron preocupado.

La castaña les miró, tenía los ojos rojos y se notaba que había llorado. Negó con la cabeza lentamente.

-¿Que te pasa?-Preguntó Harry sentándose en el suelo junto a ella.

-Unos niños me han llamado anormal y se han burlado de mi.-Dijo la castaña secándose las lágrimas.

Los cinco la miraron con tristeza, no creían que se mereciese eso.

-¿Como te llamas?-Preguntó Ginny.-Yo soy Ginny.

-Me llamo Hermione.-Respondió la niña.

-Yo soy Ron.-Se presentó Ron.

-Yo soy Harry.-Se presentó Harry.

-Yo me llamo Melanie.-Se presentó Melanie.

-Y yo soy Alex-Dijo Alex.-¿Quieres jugar con nosotros?

Hermione asintió y fueron con los demás. Todos se hicieron amigos de Hermione muy rápido.

Unos días después.

Lily estaba en el salón de su casa leyendo un libro mientras sus hijos estaban arriba jugando. Alguien tocó el timbre y la pelirroja abrió sorprendiendose al encontrar a Petunia con Dudley en la puerta.

-Hola Lily.-Saludó Petunia tímidamente.

-Hola Tuney.-Dijo Lily extrañada. Hacía años que no veía a su hermana.-Pasad.

Petunia y Dudley pasaron y se sentaron en un sofá.

-¿Pasa algo Tuney?-Preguntó Lily al ver la mirada miedosa de su hermana.

-Nos hemos escapado de casa-Dijo inocentemente Dudley.

-¿Qué?-Lily estaba sorprendida por lo que había dicho su sobrino.-¿Por qué? 

-No aguanto más a Vernon, Lils.S horrible.-Dijo Petunia con lágrimas en sus ojos.-A veces me pega y me grita por cosas que no tienen importancia y al pobre Dudley también.

Lily abrazó a Petunia.

-Tranquila Tuney, aquí estáis seguros-Aseguró Lily.-Si quieres te puedes quedar aquí con Dudley.

-¿De verdad harías eso por nosotros después de como te he tratado?-Petunia miró emocionada a su hermanita. Realmente era una gran persona.

-Claro que si.-Dijo Lily mirando a su hermana con una sonrisa para intentar tranquilizarla.-Porque eres mi hermana, y él es mi sobrino.

-Muchas gracias Lils.-Dijo Petunia abrazando a Lily.

Harry, Melanie y Eddie bajaron las escaleras en busca de su madre y al verla abrazando a Petunia se miraron confundidos, solo habían visto a Petunia en fotos y no conocían a Dudley.

-¿Quienes son mamá?-Preguntó Harry con curiosidad.

-Son vuestra tía Petunia y vuestro primo Dudley.-Les presentó Lily.

-¿Son tus hijos?-Preguntó Petunia mirando con una sonrisa a Harry, Melanie y Eddie

-Si, se llaman Harry, Melanie y Edward pero todos le llamamos Eddie-Respondió Lily. A Eddie no le gustaba que le llamaran por su nombre completo así que nadie lo hacía.

Los niños se hicieron amigos más rápido de lo que Lily y Petunia habían pensado. Cuando James llegó del trabajo y Lily le explicó la situación James no tuvo problemas en que Petunia y Dudley se quedaran un tiempo.