5. Feliz año nuevo

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Cogo el móvil y salimos de mi habitación para ir a cenar con los demás. Me he puesto elegante ya que cenamos con los padres de Lucía, si no estuvieras ellos bajaría en pijama, como siempre he hecho, que en verdad es lo más cómodo.

Aquí en España es invierno, por lo cual voy con un vestido medio largo, azul marino de manga larga, Lucia lleva puesto una falda larga que le llega por los tobillos color granate combinada con una blusa blanca. Va muy elegante y le queda divino...

Sin embargo mi hermano... mejor no hablar de él, voy a pasar del tema. Solo voy a decir que lo he visto mejor vestido.

- ¡Venga, que ya está casi todo! - dice Carla, la madre de Lucia.

- Ya vamos mamá - dice ella entrando en el comedor, que se comparte con el salón. Por lo tanto veremos ahí las campanadas. En España es típico comerte una uva por cada campanada.

- ¡Qué guapas estáis! - dice mi madre

- Las hay mejores - susurra Carlos. Lo oigo y le pego un ligero golpe en la cabeza. Y le susurro

- Yo también los he visto más fuertes - no hay nada como meterse con el cuerpo de un chico, eso le fastidia demasiado.

Lucia me oye y se ríe, mi hermano la mira y le da una mala cara. No sé que me da que mi hermano está loquito por Lucia. Siempre que salimos Lucia y yo con el grupo de amigos, mi hermano me hace unas preguntas ridículas, como: ¿hay alguno que esté más fuerte que yo?, ¿qué edad tiene?, ¿son maduros?... Está loco por ella.

Ha veces es tan cutre, no se atreve a declararse, solo porque tiene dos años más que ella, y no podrá pasar tanto tiempo con ella en el instituto, dice que como no va a su clase...  ¡Va! Tonterías varias.

Ahora que lo pienso, nunca le he preguntado a Lucia que piensa de Carlos...

- ¿Qué hay de primero? - pregunto sentándome en la silla

- De primero hay rollitos de jamón york rellenos de huevo hilado, entremeses, lombarda... - lombarda de asco

- ¿Y de segundo? - pregunta esta vez Carlos

- De segundo hay pollo asado - dice Carla

Miro a mi alrededor y veo a mi padre y al padre de Lucia hablar de cualquier cosa, a nuestras madre terminando de poner la comida en la mesa. A Carlos con el móvil y Lucia embobada con la televisión.

- Ya está todo listo - dice mi madre satisfecha de ver el resultado.

Todo el mundo deja de hacer lo que estaba haciendo y se sientan caso uno en su sitio.

- Que aproveche - digo para empezar a comer.

.....

- Chicos las campanadas - dice elevando la voz mi madre porque estamos en mi cuarto, los tres.

Mi hermano se levanta y se marcha, Lucia se empieza a levantar pero la paro.

- ¿Qué pasa? - me mira preocupada

- ¿Qué piensas de mi hermano? - le pregunto así sin más

- ¿Cómo que, que pienso? - me dice confundida

- Si, ¿te parece guapo, amable, atractivo... ? Esas cosa...  - le respondo obvia

- Pues nunca lo había pensado...  Haber no es feo y es atractivo. Amable depende del día- concluye.

- Vale - digo levantándome y saliendo por la puerta, Lucia me sigue

- ¿Por? -

- Por nada, solo quería saber como lo veías - digo improvisando

- Vale... - dice no muy convencida

Nos volvemos a sentar en los mismos sitios de antes y empiezan las campanadas...

Ding, dong

Primera uva

Ding, dong

Segunda uva

Y así con las doce campanadas...

- ¡Feliz año nuevo! - gritan los padres al unísono

- ¡Vamos! No me he atragantado - dice mi hermano contento

Le iba a insultar por lo tonto que es pero una notificación de mi móvil. Me acerco a la mesa, ya que lo había dejado ahí y miro de quien es. Ecko.

Abro el chat

Ecko

Aquí aún faltan horas pero...

¡¡Feliz año nuevo!!

Le envío un mensaje agradeciendolo, pero no puedo. Seguro que no puedo porque todo el mundo estará mandando mensajes a le vez, y las líneas estarán saturadas...

Mierda.

Es lo único que pienso.

Mañana se lo digo y de paso se lo explico.

EsperaréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora