Capítulo 09: Confesión.

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En esa semana (t/n) no quería ir a la escuela, Law trataba de convencerla, pero la joven no lo acepto, así que el ojigris trataba de cubrirla para que su padre no se diera cuenta, el viernes a la hora de la salida, Law espero fuera del instituto a Doflamingo.

A quien tuvo que esperar por mucho, pero no salía sólo, lo acompañaba un compañero de la misma edad del rubio, de cabellos negros cortos, lentes negros, mirada sería y curiosamente tenía comida en la mejilla.

-Bien mañana empezamos con el negocio...- dijo con una sonrisa altanera Doflamingo, de repente Law salía de su escondite, encarando al mayor.

-¿Qué quieres?- dijo un tanto molesto el mayor, su acompañante sólo miraba con desconfianza al muchacho.

-¡Hacerte pagar... (t/n) no merecía lo que le hiciste, jugaste con sus sentimientos!- exclamó con enojo.

-Yo no jugué con nadie, eso demuestra que sólo es una niña, debía saber que las relaciones se desgastan y no duran para siempre...- Law se molestaba por cada palabra, Doflamingo por su parte sonreía con arrogancia.

-Ella es la mejor persona que pudiste conocer, pero nunca te importó, no sé que buscabas, pero es obvio que nunca sentiste algo por ella...- declaró y para su sorpresa Doflamingo carcajeo. -¿Qué es tan gracioso?- exigía saber.

-Hablas de ella como si fuera inocente, sabes cuántas veces te mintió para estar conmigo...- decía con malicia, Law se sorprendió por la declaración. -Yo nunca hice algo que ella no quisiera... fufufu...- eso sorprendió al joven, quien estaba enojándose a cada momento. -Así que no tienes nada que hacer aquí, ella ya no me interesa, puede revolcarse con quien quiera si es lo que desea...- decía con burla, esa fue la gota que derramó el vaso, Law se abalanzó en su contra, lanzado su puño, el cual le dio en la mejilla a Doflamingo, quien sólo giro el rostro.

-¡Doffy!- exclamó sorprendido Vergo, molestándose con el ojigris, dispuesto a responder, pero Doflamingo levantó la mano en señal de calma, aquel golpe le había dolido, dejando una notoria marca, borrando aquella sonrisa arrogante.

-Eres un vulgar infeliz... sabía que le harías daño... la usaste, y aplaste sus sentimientos... no te lo perdonaré...- exclamó.

-No tengo tiempo que perder con un mocoso como tú, no quiero volver a verte, a ti a la ilusa de (t/n)...- se dio la vuelta, dispuesto a alejarse.

-¡Esto aún no acaba!- gritó Law, dispuesto a seguir con el pleito.

-Vergo... hazlo rápido...- el pelinegro asintió, encarando al ojigris, quien se sorprendió un poco, pero no se dejó intimidar.

-¡Cobarde!- gritó Law, pero Doflamingo ya no le prestaba atención. -¡Oye!- estaba dispuesto a acercarse al rubio, pero su acompañante lo agarro bruscamente del brazo. -¡Suéltame!- trataba de soltarse, antes de pudiera decir otra cosa, Vergo lanzó un puñetazo que lo tiro al suelo.

Eso sorprendió a Law, cuyo rostro había sido golpeado, sangraba de la nariz, sin duda el impacto fue brutal, comenzaba a levantarse, pero una patada le dio de lleno en el estomago, cortándole en aire, y regresándolo al suelo, otro par de patadas impidieron que pudiera levantarse, procuraba no gritar por el dolor, pues nunca había sido golpeado así.

-Espera...- Vergo se detuvo, él se agachó para ver al muchacho, quien levantó el rostro, había sangre en su boca, y parecía luchar por no perder el conocimiento. -Una última cosa... sólo para que te des cuenta de la clase de mujercita que es tu "hermanita"...- decía de manera seria. -A ella no le importo engañarte para irse a acostar conmigo...- Law abrió la boca incrédulo. -Y antes de que digas alguna estupidez, no la viole, ella misma me abrió las piernas... fufufu...- sonrió levemente. -Tal vez pensó que así, sería sólo de ella, eso la hace una cualquiera... así que te lo repito, no quiero saber nada de ustedes...- se levantó.

-Maldito...- Law trataba de levantarse, pero otra patada le dio de lleno en el rostro, Vergo comenzó a golpearlo...

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Law abría pesadamente los ojos, visualizando un cuarto blanco, escuchando voces, le dolía todo el cuerpo, estaba acostado con la cabeza un poco levantada, tenía moretones en el rostro y cuerpo, su brazo izquierdo estaba enyesado, respirar parecía una tortura.

-¡Law!- escucho la voz de (t/n), levantó un poco la vista, ahí estaba su padre y la joven, parecían bastantes preocupados.

-¿Law, hijo, me escuchas?- se acercó su padre.

-¿Qué pasó? ¿Dónde estoy?- cuestionó aún aturdido.

-Estás en el hospital, estabas en la calle totalmente golpeado, te encontraron tus amigos, ya es de noche...- explicó su padre, un poco aliviado de que su hijo haya despertado.

-¿Quién te hizo esto?- cuestionó (t/n) con lágrimas en los ojos, ya que ella estaba en casa, cuando Shachi y Penguin habían llevado a Law en aquel lamentable estado, se había asustado y de inmediato llamó a una ambulancia y a su padre.

-No los vi...- dijo en tono serio, recordaba todo con claridad, pero no lo contaría, Vergo lo golpeó hasta que perdió el conocimiento, tal vez lo daban por muerto o tal vez no, obviamente no sabía qué pasó.

-Iré por Doctorine...- salió su padre, dejando solo a sus hijos.

-Temí por ti Law...- sollozó.

-(t/n)...- llamó su atención, ella miró lo serio que se veía, su mirada estaba del otro lado.

-¿Qué pasa?- cuestionó con cierta preocupación.

-¿Hasta qué punto llegaste con Doflamingo?- cuestionó girando con cuidado el rostro, tratando de mirarla, observando que ella se tensó. -Quiero la verdad...- pidió en ese tono serio.

-Eso ya no importa...- dijo un tanto triste.

-¿Es cierto que me mentiste, qué mentías para verte con él?- cuestionó un tanto melancólico.

-En su momento... pensé que hacía lo correcto...- declaró avergonzada.

-Ya veo...- dijo un tanto decepcionado.

-Me arrepiento de eso, por mentirte y mentirle a papá...- unas lágrimas bajaron por su rostro.

-(t/n)...- él tomó la mano de la joven.

-No puedo cambiar el pasado, por eso perdóname Law... fui muy ingenua, me enamore del tipo equivocado...- sollozaba.

-Si... fuiste una tonta...- la joven se sorprendió por la declaración, Law nunca le había hablado así. -Por no confiar en mí... yo deseo lo mejor para ti, y tú...- al fin se estaba desahogando. -Desearía haber golpeado más a Doflamingo...- susurró, la joven se sorprendió por la confesión.

-¿Él te hizo esto?- Law afirmó. -Lo siento Law...- dijo ella, las lágrimas abundaban.

-Ya no importa, para mí es claro que sólo buscaba dañarte, debí esforzarme más para separarte de él...- la joven tomó su mano entre las suyas.

-Tienes razón, fui una tonta, debí confiar en ti, en todos estos años, has sido mi mejor amigo, mi querido hermano, siempre cuidándome... nunca debí dudar de tu instinto...- ella miró al joven, quien negó levemente.

-Ya no importa, lo hice porque me duele verte mal, deseo verte sonreír de nuevo, ve a la escuela, todos preguntan por ti...- dijo un tanto triste.

-Si... olvidare a Doffy... gracias por tu apoyo Law-niisan...- el ojigris amplió su sonrisa, tal vez no pudo ganar el amor de la joven, pero si que lo llamara hermano, con mayor razón se encargaría de que ella olvidara y superada aquella relación tóxica.

Las siguientes semanas todo iba normal, (t/n) iba a la escuela y salía con sus amigas, Law había hablado con Rocinante, contándole a manera general, que Doflamingo le rompió el corazón a la joven.

En esas semanas Rocinante había hablado con (t/n), quien lo trataba con amabilidad, pese a ser el hermano menor de quién le había roto el corazón, todo parecía ir bien, Doflamingo parecía haberse convertido en una sombra del pasado.

Todo iba bien...

Hasta que (t/n) se dio cuenta que su periodo no había llegado...

Ganando tú amor. (One Piece. Corazón y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora