Eternamente Enamorada

Capítulo 7

ETERNAMENTE ENAMORADA

Capítulo VII

- Vamos por un helado – murmure mientras trataba de estirarme. –

- Es tarde Sol, mejor pidamos pizza. – expreso besando mi estómago. –

- Con champiñones. – murmure sin mirarlo, realmente quería un helado. –

- Vale. – dijo levantando su cabeza de mis senos, no sin antes besarlo, una vez se levantó de la cama deslizo una camisa de color gris sobre su pecho, me dedico un guiño y salió de la habitación, rodee los ojos y volví a pensar en mi helado, realmente quería un helado, me recosté nuevamente sobre la cama y di vuelta sobre para quedar sobre el lado de Luke, ama su olor, amaba todo de él, sin embargo, una vez logre conciliar el sueño, pequeños besos sobre mi cara me hicieron despertar.

- Estaba pensando que tan legos tendría que llegar. – dijo mostrándome su perfecta dentadura. -

- No lo sé, quizá deberías descubrirlo. – murmure besando sus labios, y por un instante sus bellos ojos verdes lograron atraparme como lo hacían siempre. –

- La pizza está aquí. – dijo dándome una nalgada. -

- ¿Por ello debes golpearme? – pregunte levantándome de la cama.

- No puedo resistirme, pero podría hacerte un masaje – dice mirándome fijamente. – sabes en modo de disculpa. – agrega dirigiendo su mano a mi culo. –

- Creo que...

- Empecemos con ese masaje – agrega divertido. –

- Paso – susurro sobre sus labios y salí corriendo al recibidor, porque muero de hambre.

Luke salió corriendo detrás y me tomo por la cintura pese a mis quejas me elevo y me deposito como un saco de papas sobre su hombro y me tiro sobre el amplio sofá de su recibidor y con un rápido movimiento se sacó su camisa y la tiro sobre mí a modo de stripper, nunca había visto esa faceta y fue realmente divertido; hizo un ademan y se montó sobre mí y comenzó a bailarme como si él fuera un stripper experto de Las Vegas.

- ¿Seguro que estas en la carrera adecuada? – pregunte depositando mis manos sobre sus hombros. –

- Muy seguro – murmuro besándome –

Rápidamente se levantó y comenzó a quitarse los pantalones del pijama y lo hacía de una manera muy sensual y para que mentirles si tenía un cuerpo delicioso; era digno de ver, me senté en el sofá y me dedique a ver como tiraba el pantalón gris sobre mis piernas arquee una ceja porque sobre su bóxer negro se podía observar su gran erección, su mano se dirigió al elástico de su bóxer y la dejo allí arqueando la ceja.

- Vamos a comer – dijo pasando de larga hacia la cocina –

- Vale – murmure detrás de el –

Una vez estuvo detrás del mesón de la cocina me deshice de mi ropa para quedar solo en ropa interior, y me senté sobre el mesón de mármol y el frio se posó en mis nalgas, murmure una maldición y me dedique a tomar un pedazo de pizza.

- Adoro los champiñones. - murmure añadiéndole un gemido al final, estaba muy caliente y él no podía solo dejarme con las gamas. –

- ¿es una broma? – pregunto dejando el pedazo de pizza sobre la caja para colarse entre mis piernas. –

- ¿Qué cosa? – pregunte haciéndome la inocente mordiendo mi pizza. –