Un Cambio |2|

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El Bogotazo

—Esto no se quedaría así, no señor— comenzó a hablar Rafa tratando de cautivar a los muchachos.

>> Las causas eran muy claras, la injusticia contra los trabajadores fueron inmensas, y el gobierno actuó en contra de su pueblo. Parecía que el mundo se habia olvidado del Magdalena, y todo lo que había ocurrido en la zona, excepto por unos cuantos; entre estos Jorge Eliecer Gaitán, un abogado de familia humilde que tras una temporada en Italia las ideas Fascistas* llenaron su cabeza, cuando volvió al país había sucedido, en diciembre del mismo año (1928) visitó la zona que había sido testigo de tal atrocidad, al regresar a la capital su discurso se enfocó en las bananeras sacando a la luz lo que otros intentaban ocultar, convirtiendose así un nuevo líder popular.

>>Fue ganando fama con el pueblo, hablaba con la verdad, hacia actos de presencia y no se escondía tras papeles que nunca cumpliría, Gaitán estaba cambiando la visión de lo que era un político.

Las masas lo adoraban, lo idolatraban incluso, en 1936 se vuelve alcalde de Bogotá haciendo reformas sociales como la municipacion** de los servicios públicos, estableció comedores y restaurantes escolares; mostraba soluciones y las compartía.

A principios de 1948, antes de las nuevas elecciones, luego de quedar el tercer puesto la vez anterior, Gaitán encabezó manifestaciones donde asistieron más de 100.000 personas.

Para el 9 de abril de 1948, horas antes de una charla importante, todo estaba muy tranquilo, tendrían el congreso latinoamericano de estudiantes, con el fin de protestar ante el intervencionismo estadounidense, el congreso fue ideado por un estudiante de leyes cubano, Fidel castro.

Nuestro personaje salió campante a la 1 de la tarde con varios amigos a almorzar, seguro tenía hambre, porque iba de primero pero tres balas impactan en su pecho causándole la muerte pocos minutos después.

Todo el mundo estaba conmocionado, las personas se juntaron para ver lo sucedido, y al ser señalado al homicida a este le tocó esconderse en una drogueria con un policía. "¡Ay virgen santísima!" Era lo único que decía.
Una horda de gente enfurecida por el magnicidio le dió palo, puño y patadas hasta acabar con su vida, lo llevaron hasta la calle séptima en Bogotá, y dejaron el cadáver a la vista de todos.

Eso fue solo el principio, el resto del día hubo robos, hurtos saqueos y asesinatos, más todo el descontrol público que las FF.AA no podían soportar, principalmente en el centro de Bogotá, donde el movimiento gaitanista era más fuerte; para el final del día anunciaron entre 500 y 3.000 muertes en todo el país.

Se dice que el asesino, Juan Roa Sierra, no era culpable, que la horda de gente y los verdaderos culpables lo tomaron de cebo, pero más adelante se le denominó esquizofrénico, que había actuado solo.

Y esto no termina como un intento de cuento del terror, un año después comienza "La Violencia", dónde comenzaron a enfrentarse abiertamente simpatizantes del partido liberal contra el conservador.

Por un lado al año siguiente los conservadores le pusieron "el primer golpe" y los liberales "la revolución frustrada" o "el día que murió la esperanza". Hicieron desfiles, misas, marchas...

Pero el problema más grande estaba en los pueblos, habían sectores divididos entre liberales y conservadores, donde no podían entrar unos a otros, la masacre sería inminente o sino lo hacían por deporte (así parecía chicos) luchas de familias de pueblos, ciudades causando guerras civiles por doquier.

Con tanta muerte el general Gustavo Rojas Pinilla anuncia golpe de estado el 13 de junio de 1953, al principio sería por un año pero luego se tornó dictatorial, pero contrario a las dictaduras contemporáneas a su época no hubo mucha represión ni violación a los derechos humanos.

Para 1956 estaba perdiendo fama, y renunció, a finales del año siguiente se decidió por "El Frente Nacional" que empezaría el 7 de agosto de 1958.

Este periodo fue muy particular porque tendría cuatro presidentes en 16 años, cambiando entre liberales y conservadores. Primero fue Alberto Lleras Camargo, estableció un programa de inclusión para los guerrilleros que habían firmado la paz, apoyo la reforma agraria, impulsó la educación y proyectos económicos. Le siguió Guillermo León Valencia, conservador, dió continuidad a lo empezado por Lleras, impulsó además la construcción de la vivienda y electrificación rural.

Continuó después Carlos Lleras Restrepo y por último Misael Pastrana quién tuvo varios problemas con las guerrillas.

Fin.

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