One-shots.

BUMBLE

11 de Agosto del 2018

Base Naval

Rota, Cádiz, España 10:15 pm

No tardo en estar desnudo, poniéndome el preservativo mientras la veo desnuda, esperándome. La veo nerviosa y me pongo sobre ella.

— Iré lento, te dije que lo haría.

Lía asiente y paso la lengua por mis labios. Entro en ella poco a poco y aprieto mi mandíbula mientras observo su rostro.

— ¿Te duele? —Pregunto.

— Un poco, pero sigue.

Sonrío y sigo entrando en ella poco a poco.

— Tan apretada —susurro entrando en ella completamente. Lía hace una mueca y me quedo dentro esperando un aviso de su parte—. Eres hermosa, ángel —digo en español.

Ella sonríe tímida y pone las manos en su rostro. Me apoyo con mi antebrazo en la cama y mi pecho presiona los suyos, tal y como le dije que deseaba sentirla. Quito las manos de su cara y ella pone sus brazos alrededor de mi cuello.

— ¿Sabes cuánto tiempo llevo deseando saber cómo de estrecha eres? —Susurro cerca de sus labios.

— No te he entendido —dice.

Sonrío y la beso. Ella empieza a mover su cadera y es la señal para empezar a moverme poco a poco dentro de ella mientras la beso. Una de sus manos está en mi nuca y la otra en mi brazo.

Me había imaginado esto desde el primer día que le envié una foto y ella me envió una de vuelta. Me decía "Si los chicos enseñáis, ¿por qué nosotras no? No deja de ser piel"

Y madre mía, me gustó, sí que me gustó.

Me muevo dentro de ella, saliendo un poco y entrando otra vez. Hacía meses que no lo hacía y ahora estaba en el cielo. Siento sus labios en mi hombro y cierro los ojos.

— ¿Estás bien? —Le pregunto.

— Sí —responde.

Me incorporo y vuelvo a entrar en ella poniendo mis manos en su cintura. Lía gime y sus manos se ponen encima de las mías.

— ¿Te gusta? —Pregunto.

— Sí —jadea.

Muerde su labio inferior y la levanto aún dentro de ella. Muevo sus caderas de arriba abajo con su ayuda, ya que tienes las piernas flexionadas.

— Nick —susurra.

Me ciño de nuevo sobre ella y la beso mientras entro, aunque no con tanto cuidado como antes.

— Dime si te hago daño en algún momento —susurro contra sus labios esperando que ella me haya entendido.

Su cuerpo reacciona al mío como ninguno lo había hecho, aunque tampoco me había acostado con muchas chicas.

Sus manos se ponen en mis mejillas y me besa. Correspondo a su beso intenso y sus manos bajan hasta estar en mi trasero, apretándome contra ella.

Lía dice algo en español pero no la entiendo. No es que pare porque puedo observar su cara de placer. Sus labios están un poco hinchados y sus mejillas sonrojadas.

La beso de nuevo y muerdo su labio inferior para tirar de él.

La sujeto con fuerza, rodeando su cuerpo con mis brazos y me doy la vuelta, quedando mi espalda apoyada en el colchón. Lía queda encima y la admiro.

Llevo mis manos a sus pechos y los aprieto. Sus manos se ponen en mi pecho y empieza a moverse de atrás hacia delante. Bajo mis manos por su abdomen hasta llegar a sus piernas.