-Capitulo 8-

9 1 0
                                    

POV Julie

Me he despertado sobre las diez de la mañana sobre mi cama, con mi pijama puesto y con un plato de tortitas el la mesita de noche a mi lado.

Llevo media hora mirando la pared de mi cuarto, donde están mis diseños colgando y junto a esta, fotos de mi vida. Seguramente la comida estaba caliente y buena pero ahora está fría y asquerosa. Asin me sentía yo ahora mismo, asquerosa de mi misma.

Escuche el frenazo de un coche cerca de casa y fui a ver por la ventana. Vi a Greta bajando corriendo de su coche vestida con un pantalón de chándal y la sudadera que llevaba ayer Christopher. Se paro un momento para mirar a mi ventana, yo cerré la cortina y eché el pestillo a la ventana. Mientras escuchaba con golpeaba la puerta de mi casa fui y cerré la puerta con pestillo para que nadie entrara.

Me acerque a mi cama y me volví a sentar. Minutos después se escucharon gritos cerca de mi puerta. Pude distinguir la voz de papá, de Greta y ... y la de Tommy. En ese momento todo me vino a la cabeza, cuando Greta me dejo en la cafetería para irse con un chico, del hombre desagradable, de Carl, del momento del callejón y de cuando Thomas me rescató.

-¡JULIE, SOY GRETA, POR FAVOR ÁBREME LO SIENTO DE VERDAD! -dijo mientras aporreaba la puerta y lloraba- Por favor perdóname, es mi culpa lo siento de verdad por favor. Siento haberte dejado allí pero no pensaba que te pasara nada. Perdona por favor, ábreme.

-Greta creo que es mejor que te vayas, ahora no quiere hablar con nadie.

-No no, voy a estar aquí hasta que abra la puerta y salga para hablar y que me perdone, lo necesito.

Me levante y me acerque.

-Sabes yo te necesitaba esa noche, te necesitaba conmigo. Me abandonaste por un chico y yo tuve que pasar por esto -pegué un golpe en la puerta y elevé la voz- POR TU CULPA ¡¡ASÍN QUE PUEDES COGER TU ESTUPIDO COCHE CON TU ESTUPIDO CHICO, IRTE A LA MIERDA Y NO VOLVER PORQUE ERES LA PEOR AMIGA DEL MUNDO Y LO SABES Y NO NECESITAS MI PERDON SINO LIMPIAR TU CONCIENCIA Y NO SENTIRTE CULPABLE.

 Me abandonaste por un chico y yo tuve que pasar por esto -pegué un golpe en la puerta y elevé la voz- POR TU CULPA ¡¡ASÍN QUE PUEDES COGER TU ESTUPIDO COCHE CON TU ESTUPIDO CHICO, IRTE A LA MIERDA Y NO VOLVER PORQUE ERES LA PEOR AMIGA DEL MUNDO Y...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-No, no, no, no Julie no es por eso te lo juro, Ju te quiero muchísimo y te quiero a mi lado y quiero que me perdones porque me siento la peor persona del mundo contigo. Cuando necesitaba a alguien hay estabas tú y ahora que tú me necesitabas y a pasado esto me siento fatal. Esto no tenia que pasar.

-Si es verdad, no debía pasarme esto pero paso y ya se de quien es la culpa -estaba tan furiosa que no sabía lo que esta diciendo y de lo que me iba a arrepentir- Vete y ni se te ocurra pisar mi casa.

-Julie por favor no hagas esto, no quiero irme, quiero estar contigo -dijo mientras lloraba más- perdóname por favor.

-¡VETE, VETE, VETE QUIERO QUE TE VAYAS! -grite mientras me alejaba de la puerta y volvía a mi cama-.

-Me iré pero quiero que sepas que volveré.

Hubo un momento de silencio hasta que la voz de mi padre se escuchó

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Hubo un momento de silencio hasta que la voz de mi padre se escuchó.

-Thomas quédate aquí cuidando de Julie, yo llevare a Greta a casa, no puede conducir asin.

- Vaya tranquilo, yo cuidar de Julie.

Escuche los pasos sobre el suelo del pasillo y los sollozos de Greta. Había mucho silencio de repente.

-Julie déjame entrar.

-No Thomas no quiero ver a nadie ni que nadie me vea.

-Pero yo necesito verte.

Y yo a ti Tommy.

-No es no Thomas no vas a entrar.

Escuche unos pasos en el pasillo y luego reino el silencio.

En realidad si quería ver a Thomas pero no quería que me viera con asco ya que el fue el que me separo de el hombre y vio todo lo que me había echo, no soportaría esa mirada de él. Me levanto y me acerco a ver unas fotos, más concreta una foto que tenía con mi mamá cuando tenía seis años, íbamos las dos de blanco y estábamos en un prado, es una bonita foto. Tampoco se como voy a actuar con papá pero lo que si tengo claro es que no voy a salir de mi habitación nunca jamas.

Cuando voy a girarme para entrar al baño de mi habitación para lavarme la cara. Veo unos brazo y al acercarme veo a Thomas colgando de la ventana y unas escaleras en el suelo, nose como no e escuchado nada.

-¿Me puedes dejar entrar por favor o quieres que muera por culpa de una caída de 100 metros? -dijo mientras intentaba subir por la ventana-.

-Te e dicho que no quiero ver a nadie, nadie te a dicho que hagas esto no tengo porque ayudarte -dije mientras me recargaba en la pared con los brazos cruzados y una cara de póker- puedes caerte que no te voy a ayudar.

-Julie ayúdame, se que quieres. No lo hagas por mi hazlo por los mini Thomas o mini Julie's necesitaran un padre.

Claro que iba a ayudarlo pero quería hacerlo sufrir un poco.

-No ah y ten cuidado con la caída -dije mientras me ponía frente la ventana y tenía intención de cerrarla-.

En un momento inesperado Thomas se soltó de la ventana y yo corrí a cogerlo.

-Sabia que no me dejarías caer -dijo con una sonrisa socarrona- me quieres demasiado.

-Eres un idiota, querías que me diera un ataque al corazón ¿o que? -me eche hacia atrás y Thomas entro por la ventana-.

Se acercó a mi y me apretó en su pecho con un fuerte abrazo. Me quede paralizada y no sabía que hacer pero el no se separó de mi. Poco a poco fui subiendo los brazos y también lo abrase. Cuando menos lo espere sentí mis mejillas humedecerse y como Thomas me abrazaba más fuerte. Estaba llorando en sus brazos y no me había dado cuenta.

-Ya esta pequeña estoy aquí, aunque me a costado pero estoy aquí -me susurro mientras acariciaba mi pelo- no te va a pasar nada.

Thomas tomo el camino hacia un sofá que había bajo la ventana, se sentí y me sentó en sus piernas.

Aunque estuviera con Thomas no me sentía cómoda, asin que me levante y corrí a mi baño. Cuando entre cerré con seguro y me apoye sobre la puerta.

-Lo siento Thomas no puedo, no puedo. De verdad quiero poder acercarme a ti y que me puedas abrazar pero no puedo, no me siento segura. No quiero que nadie me toque. Lo siento de verdad.

Lo único que se escuchó fue el portazo de la puerta de mi habitación. Me acerque al espejo del baño y me large a llorar.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Quien lo hubiera imaginado (Finn Wolfhard)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora