Evillious Chronicles

18-. El Regalo De La Primcesa Que Trae El Sueño

[¡Ya, es hora de ir a dormir!]

Te daré este regalo y así descansarás, te daré este regalo y así descansarás muy bien. Yo soy la princesa que te la da. Todo por el bienestar de tu felicidad.

- ¿Para que desea verme la señorita Blankenheim?-preguntó confusa la rubia mayor siendo acompañada de su hermana.

- Dice que quiere hablar de asuntos en privado con usted-hablo la sirvienta acompañando a la mayor a la habitación de su señora, dejando a la menor en la sala tomando té.

El cuarto de la mujer tenía un extraño mini laboratorio y una olla hirviendo. La dama se encontraba en su cama recostada, más no podía dormir

- ¿Quiero saber quien se atreve llamar a alguien a las tres de la madrugada?-le preguntó Elizabeth llamando la atención de la mujer, que se sentó rápidamente y se abalanzaba a la joven

- ¡LIZ-CHAN!-grito emocionada

- ¡KYAAAAAA!-grito mientras ambas caían al piso-....Señorita Blankenheim, mis pechos duelen

- Son suavecitos....-le respondió apoyada en estos (- La dignidad de Alex se fue a la chin-..... *le pegan)

*-.-*

Luego de aquel incidente, ambas se dispusieron a tomar té mientras platicaban.

- Hace unos días descubrí que mi esposo me es infiel.

- ¡¿ESE MALDITO HIJO DE SU....?!-No pudo finalizar al ver la cara de confusión de la dama-Perdón, continué-hablo calmándose.

- Descubrí que me es infiel, no podía hacer nada siempre y cuando el estuviese a mi lado-hablo ella sonrojada levemente sirviendo más te a su invitada.

- ¿No le a dicho nada a nadie?

- Te lo estoy contando a ti porque eres la única que se queja de mi insomnio, por eso es que te quiero, ya que nadie se quejaba de mi enfermedad.

- ....Eso fue el día en que la vi despierta cuando mi hermana y yo vinimos de visita.

- Sip~, ese día tu platicaste conmigo y la noche no se me hizo aburrida-hablo sonriendo como niña pequeña.

*-.-*

Había pasado ya una hora y ambas rubias se retiraron de la mansión. Alex se encontraba borracha del sueño mientras Kayra estaba en peor estado al haber luchado por no quedar dormida.

Su madre y Gumillia aún dormían cuando entraron en silencio y se dirigían a sus habitaciones a reponer sus energías.

*-.-*

Alex había salido a caminar un rato por la plaza, hasta ver a la misma mujer del día en que se mudó con una joven rubia de ojos ámbar. No se giró a velas, pero una voz le hizo girarse.

- Agatha otra vez vuelvo a verte-hablo amable Julia al ver a la joven, quien se sentía más enana de lo normal al ver a la mujer.

[Pero yo no quería volver a verla]

Pensó la rubia menor girándose con una sonrisa algo forzada hacia la dama. Lilian, que era el nombre de la hija adoptiva de la muchacha, logró ganarse su amistad.

Cuando ambas amigas iban de regreso a casa, movieron a Kayra siendo coqueteado por Caspar, quien recibió un golpe en sus partes nobles, retorciéndose del dolor.

- Y no tendrá hijos....-se burló Lilian de la desgracia del hombre

*-.-*

Asesinatos comenzaron a suceder, todas las personas habían comenzado a beber un veneno que primero les daba sueño y luego la muerte inmediata

Seré yo quien cargue con las preocupaciones de todos. Mi padre, la gente que vive y de mis amigos, por todos aquellos que no pueden dormir por culpa del estrés. Les daré mi regalo y así dormitarán, abandónense a los sueños, así como un bebé en su cuna. Tomen mi regalo y vayan a dormir....

- ¡El doctor murió!

- ¡Ya van 74 víctimas!

- Acaso Margarita....¿Se deja influenciar por esa mujer?

- ¿Todo es Obra de aquella organización?

*-.-*

Kayra miraba a los bebés que Margarita había traído al mundo, se veía muy feliz al respecto. Ya que ella lloraba de felicidad murmurando

[Por fin lo e logrado....lo e logrado, si mi amado y yo los tenemos. Seré,os muy felices]

Kayra seguía preguntándose cómo quedó embarazada si Caspar jamás la había tocado. No podía dejar de observar a los gemelos rubios que se acurrucaban en brazos de su progenitora.

- Se llamaran Caín y Abel...-le respondió a su amiga orgullosa. Kayra solo se quedó observándola.

- Okey....-fue lo único que respondió

- Liz-Chan....quisiera que mis hijos te amaran como me amaran a mi, quiero que te quieran y obedezcan en todo lo que tú ordenes-le hablo orgullosa la dama arrullando a sus pequeños y entregándoselos a la rubia.

*-.-*

Había pasado un mes desde el nacimiento de los gemelos. Margarita seguía perfeccionando su [Gift] y entregándoselo a sus víctimas para ocasionarles la muerte.

Kayra y Alex habían entrado a la mansión abandonada buscando a la dama, perdiéndose en el trayecto.

Alex toda asustada había sacado su cuchillo apuntando frente suyo, cuando una mano fue colocada en su hombro, espantada se giró apuntando a quien la asustó. Cuando vio a Kayra alzar sus manos en señal de paz al tener el cuchillo frente suyo.

- Soy yo no me mates...-le respondió espantada.

- No me asustes de ese modo-hablo la rubia menor mirándola espantada.

Ambas subieron al cuarto de Margarita, la cual tenía su [Gift] a la mano y sus bebés durmiendo ignorantes de lo que pasaba a su alrededor.

Toda mi vida e sido como una muñeca, por lo que rota llevo desde hace tiempo. Esta medicina es efectiva, hace que para siempre tu duermas. Esto supera el conocimiento humano, aquella que trajo el sueño. Se a convertido en la bella durmiente.

- Liz-Chan si has venido....-hablo la dama observando a su amiga.

- Margarita...-hablo la rubia mayor adentrándose al cuarto, siendo abrazada por la dama con fuerza.

- Si hubiera nacido hombre hubiéramos sido felices las dos, junto con los pequeños Caín y Abel-reveló separándose un poco y le Romana un beso en los labios a la rubia. Quien solo abrió ligeramente sus ojos-....Bueno, te encargo a mis pequeños, te serán muy fieles por siempre-le hablo separándose de la rubia y bebía su veneno.

Cerró sus ojos lentamente y cayó al piso, con una sonrisa.

[Vamos mi príncipe....bésame en aquel bosque]

*-.-* CON....TI....NUA....RA *-.-*