oscuras necesidades × kookmin

tres - jungkook [parte uno]

another way out - hollywood undead

¿qué hizo?

Se preguntó porque había decidido ocupar un lápiz tan rojo para marcar la fecha. Le molestaba, el día había llegado y las ansías por acobardarse le hacían odiar ese color rojo. Quizás debería levantarse, tachar aquel circulo y marcar otra fecha, una más lejana en donde se sintiera más valiente. Sí, sería una buena idea, pero tenía sus contras. Debía esperar, seguir esperando, seguir aguantando. ¿Cuanto más podría?, ¿podría en realidad? Un último suspiro, posiblemente el último vistazo a su habitación. Miró su lista, todo tachado. Su bolso estaba listo, ya no podía seguir arrancando. Solo un incentivo y ya no sería tan difícil.

Parecía ser otro día normal en el instituto, los estudiantes entraban a carcajadas a sus primeras horas de día, otros algo tristes o más bien serios. JungKook decidió quedarse afuera por el momento, sentarse en aquella banquita que nadie solía ocupar y esperar. De todas formas, mantuvo su atención en las personas que entraban, en sus rostros. La cobardía estaba tirando de su cuerpo nuevamente y si aquellas personas no asistían aquel día, el se rendiría. Iría a casa, dejaría su bolso por ahí, donde su madre pudiera verlo y se colgaría. No parecía ser un mal final, le dejaba un buen sabor en su boca.

Sus ojos visualizaron cada rostro de las personas que ingresaban al recinto por la siguiente hora y cada vez la esperanza de dejar todo e ir a casa se volvía más fuerte, hasta que aparecieron. Venían tarde, no era común, pero tampoco raro. Por costumbre, subió la capucha de su sudadera y se lanzó hacía atrás, rogando por no ser notado. Tuvo suerte, escuchó sus risas y pasos cercanos, mientras comenzaba a sudar helado, tan frío que dolía. Pero nada ocurrió. Segundos mas tarde los chicos entraban por la puerta principal y él podía respirar bien nuevamente. De hecho, no solo era su respiración la que se sentía completa. Una sensación de satisfacción se posó en su pecho, un llamado al deber y tomó su bolso nuevamente, está vez con más fuerza y disposición, ya no tenía más excusas.

El cambio de ropa era el primer paso. Sus principales victimas no le habían visto, pero otras personas sí, no podía quedarse con la misma ropa si estaba entre sus planes escapar. El suicidio solo era opción si no hacía nada, si la venganza estaba concluida quería vivir lo suficiente para sentir aquel relajo en su cuerpo. Ropa gastada fue la opción, la que ocupaban en el taller de teatro cuando debían pintar escenografía. Se felicitó a si mismo por el saqueo a la sala de teatro el día anterior, además de ropa había conseguir una mascara de drama que cubriera todo su rostro, sumándole a ello un sombrero de pirata, el cual taparía su cabello. Utileria del año anterior. Observó su obra de arte en el espejo del baño de hombres. A simple vista, se veía como cualquier chico de secundaria alta en el instituto. Su altura no era muy peculiar, tampoco así la forma de su cuerpo. Supo que con ello obtendría una ventaja. En algún momento se sabría que fue él, pero con su identidad disfrazada ganaría unas cuantas horas para escapar.

El primer cambio de hora fue alertado y el supo que era el momento. Terminó por guardar su antigua ropa en su bolso, sacó su arma y lo escondió en uno de los cúbilos, encima de un inodoro. Los estudiantes suelen esconderse en los baños, lo sabía, pero aún así era un buen escape para su propia persona. Era un riesgo que debía tomar.

Se paró junto a la puerta y tomó un respiro, esperando a que el segundo timbre sonase y no encontrarse con una manada enorme de estudiantes afuera, pero sus planes deberion ser adelantados. Un estudiante entró al baño, encontrándose frente a frente con él. La frente de JungKook comenzó a humedecerse, no sabía con precisión que hacer. Hasta que la intensidad de la luz bajó y el rostro del chico pudo distinguirse. JungKook lo conocía, ¡oh! lo conocía tan bien. Tanto así que no le costó nada apuntar el arma y dispararle al chico de lleno en su frente, haciendolo caer de inmediato al suelo.