Between Cigarretes And Coffe.

cap8

Nuestra relación seguía siendo atípica. Largos paseos, cortos besos y mucho silencio. Las vacaciones de verano no se hicieron esperar y estábamos a días de salir de clases, y por suerte, ambos íbamos bien en la universidad. Teníamos buenas calificaciones y estábamos planeando un viaje.

Pero esta relación, me llenaba de desesperanza. Su frío corazón hasta ahora no había sido tocado por mí amor, y aún que lo sabía, no podía dejarlo. Día a día estaba con el. Ayudándole y no dejándole ni a luz ni a sombra.

-Tal vez es frío contigo por qué lo atosigas mucho, Galaxy. - me comentó un día Luhan, quién era el único que conocía mis problemas.

Me había hecho muy cercano al primo de Tao, era quien me daba consejos, tratando de ayudarme lo más que podía. A parte que me complacía el poder hablar con alguien en mí me lengua materna.

Por su parte Tao, me había abandonado. Había comenzado a salir con el serio Sehun. Luego de que el antiguo novio de según muriera, Tao se acercó mucho a él. No me pareció raro que ambos estuvieran juntos la verdad, por que Tao es uno de los más populares y Sehun uno de los más guapos. Y ambos se llevaban de maravillas.

Luhan solía decirme que le diera espacio a Kyung para que pudiera extrañarme, por que las únicas horas que no estaba con el era cuando estababamos en clases, y claro está, cuando dormíamos. Tal vez tenía razón, y poco a poco deje que el tuviera su espacio. Pero todo seguía igual.

Un día no resistí más, llevábamos casi 3 meses juntos y faltaba solo una semana para salir de clases.

Habíamos ido a dar un paseo hacia el centro de la ciudad. Quería comprar algo para el. Algo pequeño y significativo... Pero ese día yo estaba molesto. Su frialdad había llegado a niveles descomunales ,saludándome con un simple hola desde lejos. Ni besos ni abrazos. Ni una sola palabra. Mi corazón estaba destrozado.
Era ahora o nunca... Debería aprovechar que estoy algo Molesto para tomar el valor de decirle lo que me afecta...

— Kyunggie, cumpliremos tres meses juntos. Y ya no soporto más.

–¿Qué pasa Wu YiFan?– dijo en ese tono lejano que suele tener siempre, con los ojos fríos.

– Deja de llamarme por mi nombre completo. Soy tu maldito novio!! Llevamos casi tres meses, ¿No crees que podrías siquiera fingir que te importo ? ¿Fingir que te gusto? O ser honesto conmigo de una puta vez y decirme que soy solo un juguete para ti...

– si me importas...Galaxy. – su voz sonaba como eco en mi cabeza, me había llamado Galaxy. Solo las personas cercanas a mi me lo decían cariñosamente. Mis mejillas se sonrojaron y me ardía la cara.

–No es verdad. ¿Crees que no me doy cuenta? ¿Que tan idiota te parezco? Sé que amas a alguien más, y cada vez que estás conmigo es solo un intento vacío y triste de querer olvidar a ese idiota. Pero ya me cansé– comencé a alterarme. Pero ya no podía más. Estaba dolido, Kyungsoo es mi primer novio y todo esto me dolía.

–Eso no es del todo cierto. Cálmate... Galaxy- aish!!! Segunda vez que me llamaba así... Mi idiota corazón latía a mil, estaba contento – si, cuando estaba en aquel parque que te conocí lloraba por no ser correspondido por... JongIn– la dura confirmación.

Kyung Soo sí estaba enamorado de JongIn, ese era "el otro", el que ocupaba su corazón.

Hizo una pausa, ante mi evidente cara de tristeza, me miró con esos grandes ojos que amo, y yo, solo los esquivé

–Sabes Wu , jamás estaré con el. Jamás le diré lo mucho que lo amaba. Sería muy duro ser rechazado nuevamente, no crees... Y más aún cuando será padre ¿No? –su voz quebrada terminó por romperme a mi también.

Si , Kyungsoo, lo es. Duele cuando te rompen el corazón.

– ¿y cómo estás tan seguro?– bajé mi guardia, mirándolo con ternura y algo de pena– ¿Como sabrás su tu historia con el tendría un final feliz si no le dices?– no sé por qué le dije eso... Si el hace eso... Sería el fin de esta fría relación...

– Ya te lo dije. Le gustan las mujeres. Tiene novia y será padre. –su voz volvía a su frialdad habitual - Préstame atención que después de hoy, no hablaré más del tema. Ese día lloraba por eso. Me había confesado que ella esperaba un hijo de ella. Descaradamente me mintió. Estuvo saliendo conmigo a escondidas unos meses. Decía que pronto lo haría público pero jamás pasó.

No pude hacer más que tomar su mano. Le dije que luchará por el, que si habían tenido algo a escondidas es por qué realmente ese sujeto sentía algo por el.

–¿Realmente dejarías que le diga a alguien más que lo amo? – bajó su mirada, pero tomé de su mentón y lo obligué a mirarme.

- Do Kyungsoo, Si eso te hace feliz, a mí también. Nada me haría más feliz que ver esa sonrisa siempre. Aun que no sea conmigo.

Puso su cabeza en mi hombro. Sentía mi cuello mojado. Sabía que él estaba llorando. Lo abrace. Pensado que sería el último abrazo que podría darle.

–Es por esto que me gustas YiFan.

En ese preciso y precioso momento solo quería que el mundo se detuviera. Me había dicho por primera vez que le gusto.

–Siempre antepones tu felicidad... No podría dejarte. Me gustas...

–¿estás seguro que te gusto ? – mis brazos rodearon su pequeña cintura, apegandolo más a mi cuerpo.

–¿Aun lo dudas?– me miro con esos bellos ojos, los mismos que me hacían temblar.

–si, es que siempre eres frío conmigo, o cuando estamos juntos... Sé que tu cabeza no está ahí junto a mi... – admití controlando mis lágrimas.

–Siempre me pongo pensativo cuando estoy tranquilo y feliz, y me gusta disfrutar del silencio contigo. Y es que es la primera vez que tengo algo con alguien. O al menos, algo serio. Perdoname ¿Si?

Verlo tan susceptible me rompió en dos. Ya no quería reprocharle nada más... Pero mi garganta tenía aún más que decir.

– tú no me amas como te amo yo a ti... – las lágrimas bajaba por mi rostro...

–Es cierto. No te amo... aún.

–¿Qué quieres decir con eso Kyung ?

-que aún no te amo. Pero me conquistas cada día. Y que no dudo que algún día llegue a amarte tanto como me amas tu a mi.

Después de eso todo paso muy rápido. Me besó sin importarle si nos veían...

–Deja de pensar tonterías. Me gustas y no quiero dejarte jamás.– susurró cercano a mis labios.

Luego de su bolsillo sacó una pequeña cajita y me la entrego.

-es para nosotros- sonreía pese a las lágrimas que el tambien tenia sobre sus sonrosadas mejillas.

Al abrirla vi que habían dos collares, uno de pingüino, otro de un dragón.

- tu te quedas con la de pinguino y yo con la del dragón. Así siempre estaremos juntos. Es una promesa ... felices casi tres meses, míster Galaxy.

En ese momento todo era felicidad.