Pasaban los días y mi "relación" con Matthew se hizo pública. Yo realmente no sabía que tipo de relación teníamos ni que eramos todavía, pero realmente tenía miedo de saberlo...
Le conté a mis amigas sobre lo sucedido la anterior vez, me dieron consejos, pero era mi primera vez y no sabía que hacer...
Aún con todo lo que ocurrió con Matthew, todavía no me podía olvidar de "él", me lo encontraba por las calles y nuestras miradas se cruzaban, pero había algo extraño, ya no sentía esa sensación al encontrar nuestras miradas, sentía que mis sentimientos hacía "él" se los llevaba el viento, mis sentimientos desaparecían cada vez, pero yo realmente sabía que no me podría olvidar de "él".
*~~~~~~~*
Ya pasaron dos semanas desde que "eso" ocurrió, Matthew se comportaba extraño, a veces era cariñoso y pegajoso conmigo, pero otras veces se volvía frío y distante.
Decidí tomar una decisión, lo había pensado detenidamente y pienso que sería mejor hacerlo así.
-Matthew, ¿podemos hablar a solas un momento?. Pronuncié nerviosa esas palabras esperando la respuesta del castaño.
-Sí, claro, ven, vamos ha hablar tranquilamente en ese banco de ahí. Respondió serio, pero con una leve sonrísa en su rostro.
Estaba realmente nerviosa, no sabía cómo decirsélo, pero tenía que hacerlo, mierda, ¿por qué no le habré pedido consejo a las chicas sobre esta conversación?.
-Bueno, ¿y de qué queríras hablarme?. Preguntó ansioso el castaño mientras se sentaba en el banco, pero a la vez sacándome de mis pensamientos cómo hacía habitualmente.
-Eh, ah, sí, te quería dar una respuesta a tú "proposición" o por así decirlo de hace unos cuantos días. Respondí nerviosa mientras intentaba ocultar el sonrojo de mi rostro a tráves de mis dorados cabellos. Me ponía roja al recordar la escena que viví con el castaño que está aquí presente.
-¿Ah, sí?, ¿y que has decidido?. Preguntó mientrás se acercaba peligrosamente a mí.
Díos, si lo tengo tan cerca no me puedo concentrar, ¿lo hará a posta?, ¿quiere que caiga en su juego?.
-Bueno, no sé si lo sabrás, pero es mi primera vez, y creo que todo fue muy repentino y avanzo muy rápido y preferiría esperar un tiempo ántes de que eso suceda... Al fín lo había soltado, solo quedaba esperar como sería su reacción.
-Ah, "eso", tranquila, realmente me esperaba esa respuesta. Respondió sonriente el castaño.
La tarde se pasó rápida, Matthew y yo conversamos sobre nuestros gustos y demás, gracias a esa "pequeña" conversación lo conocí un poco más, aunque todavía quedaba algo por resolver.
¿Que eramos realmente?, ¿amigos?, ¿amigos con derecho a roce?, ¿novios?, querría hallár alguna respuesta a mis preguntas, pero no sabía cómo ni cuando, solo me quedaba esperar y ser un poco más valiente, cosa que realmente veía imposible.
Ya eran casi las 22:00, la hora con la que había quedado con mis amigos.
Había conseguido convencer a mi madre para poder quedarme a dormir en casa de Lucy, ya que realmente no sabría en que condiciones volvería a casa y a Lucy no le molestaba dormir conmigo, es más le gustaba tener algo blandito que agarrar para dormir. (No penséis mal, Lucy está acostumbrada a dormir con su mano en mi teta).
*~~~~~~*
-Chicos, ¿que os parece ir a la playa?. Suguirió una muy sonriente Lucy.
-Claro, y así nos "tomamos" unas ricas "piruletas". Respondió una divertida Holly, a lo que todos asintieron, realmente les apetecían unas "piruletas" como nosotras solíamos llamarlas.
Mientrás caminábamos me entretuve en el juego que se encontraba en mi móvil, (Díos ese juego me tenía enganchada), y sin darme cuenta mis amigos avanzaban sin mí.
-Genial, se han olvidado de mí. Comenté enojada debido al "descuido" de mis amigos, estaban tan ansiosos por las "piruletas" que se olvidaron de su amiga.
-Yo no me he olvidado de tí. Respondió alguien en tono ¿coqueto?.
Me dí la vuelta para ver quién había hablado.
Y ahí me lo encontré, con su sonrísa burlona y esos ojos chocolate que antes me volvían loca.
Cuando iba a abrir la boca para pronunciar algunas palabras, noté como una fuerte mano pasaba por mis caderas y me atraía fuertemente hacía el cuerpo de ¿¡Matthew!?, ¿cuando había aparecido?, entonces escuche como pronunciaba unas palabras que hicieron que me sonrojara a más no poder.
-Que novia más despistada tengo. Comentó el castaño mientras acariciaba mi mejilla. -Pero que sexy. Prosiguió mientrás se mordía levemente su labio inferior.
Busqué con la mirada a Alex, pero ya no se encontraba aquí, todo había sucedido tán rápido que no pudé ni procesarlo, ya veía alucinaciones y todavía no me había "tomado" ninguna "piruleta", ¿pero realmente había sido una alución?, ¿De verdad Alex me dijo eso?.
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Todavía no me podía olvidar de las palabras de Matthew; "Que novia más despitada tengo". ¿Novia?, ¿me lo había pedido y ni si quiera me había dado cuenta?, ¿o lo había echo solamente para ahuyentar a Alex de mí?, sí era esto último, significaba que Matthew se había puesto ¿celoso?, ¿pero era eso verdad?, ¿realmente eramos novios?.
-Charlotte, venga ven, que ya esta echa la "piruleta". Me llamó el castaño, sacándome otra vez de mis pensamientos.
-Vale, ahora voy Matthew. Respondí sonriente ante su llamada.
-Verás que te va a gustar, lo he preparado yo. Presumía el castaño mientrás me extendía la "piruleta".
La noche pasó muy rápida, nos divertimos y entretuvimos mucho, Lucy y Holly se veían más sonrientes de lo habitual, pero no entendía el porque, al parecer si que les había afectado las "piruletas".
En algunas ocasiones parecía que Lucy quería contarme algo, pero siempre se veía interrumpida por los cariños que me regalaba el castaño.
Parecía que Matthew no quería que Lucy hablase conmigo, y eso realmente me molesta, no entendía el por que y parecía que no me lo quería explicar.
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Abrí lentamente los ojos, no recordaba nada de anoche, me dolía la cabeza y me pesaban todas las extremidades de mi cuerpo, estaba fatal, tenía razón en que sería mejor no volver a mi casa, estaba fatal, definitivamente tenía que dejar las "piruletas", pero no sabía cuantas veces había dicho eso ya.
Notaba como una mano acariciaba suavemente mis cabellos dorados, realmente se sentía muy bien así, estaba acurrucada en su pecho, me sentía cálida y protegida, núnca ante me había sentido así.
Entonces caí en la cuenta de que ¡Estaba acurrucada en su pecho!, díos míos, ¿que diablos hice anoche?, y, ¿porqué he acabado así?.

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"Sueño o Recuerdo"
Novela JuvenilCharlotte era de personalidad una chica timída, amable(con quién ella quería), simpática, un poco infantil, de apariencia era una chica rubia, baja y con unos ojos azules. Ella vivía en un pequeño pueblo andalúz llamado: "El Portil", vivía con sus a...